Una musa de la movida hilvana la memoria
La pintora y ex modelo Cristina Barrera expone sus obras
Hay un hilo que recorre la vida de Cristina Barrera, que se oculta detr¨¢s de sus trabajos como modelo y su protagonismo en la movida madrile?a y que, cada pocos a?os, vuelve a aparecer. Ese hilo es su condici¨®n de artista y pintora, lo que siempre ha sido y querido ser. El cabo del hilo, procedente del pueblo de la Alcarria donde Cristina se traslad¨® hace ya cuatro a?os, vuelve ahora a asomar en Madrid, donde expone sus ¨²ltimos trabajos.
Una obra que hace referencia, precisamente, a collares, nudos y redes "que, como los hijos, nos atan y nos embellecen".
Javier Vallhonrat la par¨® un d¨ªa por la calle y le pregunt¨® si era modelo
En cuatro a?os de exilio voluntario en Guadalajara a Cristina le ha dado tiempo de criar una ni?a, rehabilitar una casa en el campo, concentrarse y dar un nuevo giro a su obra, que no expon¨ªa en Madrid desde 2002. "Me fui al pueblo y comenc¨¦ a pintar sin una idea preconcebida. Me di cuenta de que me sal¨ªan figuras conc¨¦ntricas, redes. Me obsesion¨¦ con algo muy femenino, el hecho de tejer. El ¨²nico momento que nuestras madres ten¨ªan para concentrarse en s¨ª mismas era el de tricotar, dar puntadas con hilo y agujas, hacer nudos", explica.
De nuevo en Madrid, Cristina hilvana los olvidos y recuerdos de una movida de la que hoy queda poco. Admite con dudas que fue una ¨¦poca "m¨¢s creativa, pero porque no hab¨ªa nada, porque estaba todo por hacer. Improvis¨¢bamos".
A trav¨¦s de la improvisaci¨®n del fot¨®grafo Javier Vallhonrat, que la par¨® un d¨ªa por la calle para preguntarle "si era modelo", y de su amistad con la dise?adora Sybilla comenz¨® sus incursiones en la moda. "Yo ten¨ªa 21 a?os. Estudiaba Bellas Artes en la Complutense, pero no estaba contenta. Nos hac¨ªan pintar perdices disecadas. Adem¨¢s, me hac¨ªa falta el dinero, as¨ª que comenc¨¦ a desfilar", explica. Acab¨® viajando a Par¨ªs, Londres, Mil¨¢n o Tokio, trabajando para Yamamoto y Dolce & Gabbana. "Recuerdo una sesi¨®n de fotos para [el dise?ador fallecido en 1994] Manuel Pi?a en Las Ventas y la pradera de San Isidro. Llov¨ªa a mares y hac¨ªa un fr¨ªo terrible, y Alberto Garc¨ªa-Alix, que es miope, no consegu¨ªa enfocar la c¨¢mara". Esa sesi¨®n aparecer¨ªa poco despu¨¦s en la revista Sur Expr¨¦s, donde Pi?a escribir¨ªa: "Cristina se manten¨ªa posando sobre aut¨¦nticas lagunas de agua y Alberto disparaba para que aquellas im¨¢genes soberbias quedaran grabadas en unas placas. Nunca olvidar¨¦ a un grupo de locos rom¨¢nticos capaces de emocionarse con la fotograf¨ªa, de so?ar y entregarse a la c¨¢mara como s¨®lo lo hacen los amantes desesperados".
Con 25 a?os, volvi¨® a estudiar pintura. Desde entonces, alternar¨ªa trabajos en la moda, con amigos como Juan Duyos , con exposiciones en la Galer¨ªa Moriarty y su pertenencia a grupos art¨ªsticos como el de El Elefante Rojo.
Obras de Cristina Barrera. Espacio 0034 Lab (calle de La Reina, n¨²mero 39, 2.? izquierda). Entrada libre.
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