La prisa por implantar la carrera complica la vida a 60 alumnos

El rector de la Universidad Cat¨®lica de Valencia, su Gran Canciller (el arzobispo de Valencia) y los valedores pol¨ªticos de su facultad de Medicina (que hicieron posible su creaci¨®n a la velocidad de la luz) ten¨ªan mucha prisa por poner en marcha la carrera. Tanta, que aunque la implantaci¨®n de nuevos t¨ªtulos estaba suspendida por un decreto del Gobierno, y aunque la misma Generalitat se hab¨ªa expresado en el mismo sentido poco antes, intentaron por todos los medios arreglar todo el papeleo a principios del a?o pasado para que este curso (el 2007-2008) la titulaci¨®n ya estuviese funcionando. No lo consiguieron, pero para cuando el consejero de Educaci¨®n, Alejandro Font de Mora, admiti¨® que la universidad hab¨ªa renunciado a sus planes, la cosa hab¨ªa ido muy lejos para 60 alumnos, que se hab¨ªan matriculado con la esperanza (aunque advertidos de los riesgos) de que finalmente la carrera ser¨ªa aprobada.

Se puso en marcha entonces el plan b. Los chavales fueron inscritos en un t¨ªtulo propio (no oficial, que no sirve para trabajar de m¨¦dico), con el objetivo m¨¢s o menos p¨²blico de que en el curso 2008-2009, ya con la titulaci¨®n aprobada, se buscar¨ªa la forma de transformar los conocimientos adquiridos durante ese a?o en cr¨¦ditos universitarios.

Los estudiantes pod¨ªan aprobar en un curso, por ejemplo, el equivalente a dos, si la correcci¨®n de los ex¨¢menes correspondientes era lo bastante generosa. Fuentes del Ministerio de Educaci¨®n reconocieron que cosas m¨¢s raras se hab¨ªan visto, y que para los inspectores eran dif¨ªciles de probar.

Si el Consejo de Universidades valida finalmente el informe de la Aneca, sin embargo, el plan b amenaza con saltar por los aires. Una cosa es aprobar dos cursos en un a?o, y otra, aprobar tres. De modo que los 60 alumnos de Introducci¨®n a Ciencias de la Salud podr¨ªan acabar en una especie de limbo acad¨¦mico no oficial. Y lo mismo puede ocurrir con los chavales matriculados en Odontolog¨ªa, Fisioterapia y Podolog¨ªa, los otros tres t¨ªtulos en los que la Cat¨®lica utiliz¨® el mismo sistema y cuyas solicitudes tambi¨¦n han sido informadas desfavorablemente.

La misma universidad est¨¢ ante un dilema: vivimos una ¨¦poca de falta de alumnos (en las universidades p¨²blicas y m¨¢s todav¨ªa en las privadas). Si le tumban finalmente las cuatro carreras, ?qu¨¦ har¨¢? ?Impartir¨¢ el a?o que viene primer y segundo curso de Introducci¨®n a las Ciencias de la Salud (y del resto de t¨ªtulos propios)? ?O renunciar¨¢ a cientos de nuevos estudiantes?