La familia de Ingrid Betancourt espera un gesto positivo del nuevo jefe de la guerrilla
El Gobierno franc¨¦s no parece disponer de datos concretos sobre la actitud y las intenciones de la nueva direcci¨®n de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), tras la muerte de Pedro Antonio Mar¨ªn, al¨ªas Manuel Marulanda o Tirofijo. Par¨ªs se mantiene a la expectativa y ha evitado pronunciarse sobre nuevas iniciativas para la liberaci¨®n de los rehenes en poder de la guerrilla y, m¨¢s concretamente, de Ingrid Betancourt, la senadora y ex candidata a la presidencia colombiana, que tiene tambi¨¦n la nacionalidad francesa, en cuyo caso se ha comprometido personalmente el presidente Nicolas Sarkozy.
Los familiares de Betancourt, y m¨¢s concretamente su primer marido, el diplom¨¢tico franc¨¦s Fabrice Delloye, que encabeza la campa?a por la liberaci¨®n de la madre de sus dos hijos, consideran que los nuevos l¨ªderes de las FARC son gente m¨¢s dispuesta al di¨¢logo que su predecesor. Alfonso Cano es un hombre procedente de la pol¨ªtica, antrop¨®logo de formaci¨®n, en contraposici¨®n al talante militar de Marulanda.
Para la familia de Betancourt, se trata de un universitario con lenguaje pol¨ªtico. "Se puede pensar que frente a los reveses militares sufridos por las FARC, Cano quiera recuperar en el frente diplom¨¢tico el terreno perdido en lo militar" y busque "espacios en aperturas de di¨¢logo con la comunidad internacional", dijo Delloye.
Una opini¨®n que tambi¨¦n mantienen Yolanda Pulecio y Astrid Betancourt, madre y hermana, respectivamente, de Ingrid Betancourt, para quienes Cano es "un hombre culto y progresista", a quien llamaron a "dar un empuj¨®n a la historia" liberando a Ingrid y a los otros rehenes.
"Est¨¢n pasando cosas, hay que mirar con mucha calma, con mucha prudencia y mucha concentraci¨®n", advirti¨® el presidente Sarkozy la noche del domingo pasado, "y hay que ser muy prudente ante una situaci¨®n muy cambiante".
Por su parte, el ministro de Exteriores franc¨¦s, Bernard Kouchner, calific¨® de "buena noticia" las declaraciones del presidente colombiano, ?lvaro Uribe, sobre una posible liberaci¨®n de rehenes, entre los que se contar¨ªa Betancourt, que estar¨ªan en poder de un grupo de guerrilleros dispuestos a entregarse a cambio de garant¨ªas. "La mala noticia", a?adi¨® el jefe de la diplomacia francesa, "la dificultad m¨¢s grave, ser¨ªa que se concrete el asalto [del Ej¨¦rcito colombiano] en las cercan¨ªas del lugar donde est¨¢n retenidos los rehenes, y ustedes saben que en estos casos, los rehenes se juegan la vida".
Oficialmente, sin embargo, la portavoz de Exteriores, Pascale Andreani, asegur¨® ayer que Francia "evaluar¨¢ las consecuencias" que se deriven del cambio de liderazgo en las FARC y que Par¨ªs mantendr¨¢ la movilizaci¨®n para liberar a los rehenes.
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