Padrinos con pedigr¨ª para j¨®venes talentos
Un programa de mecenazgo junta a Soyinka o Scorsese con sus disc¨ªpulos
Todo artista joven que recibe un patrocinio filantr¨®pico suele ver abierto ante s¨ª un mundo de oportunidades. En el caso de la australiana Tara June Winch, su reacci¨®n fue directamente romper a llorar, abrumada al conocer la identidad de quien va a ejercer de mentor en su incipiente carrera como escritora: nada menos que Wole Soyinka, premio Nobel de Literatura (1986) y activista pol¨ªtico, cuya estatura moral le ha merecido el sobrenombre de "el Mandela nigeriano".
Maestro y disc¨ªpula acaban de inaugurar un a?o de colaboraci¨®n creativa bajo el paraguas de la Iniciativa Art¨ªstica Rolex para Mentores y Disc¨ªpulos, un programa concebido para reunir a grandes figuras con j¨®venes nombres que empiezan a despuntar en el mundo de la literatura, la danza, el teatro, el cine, la m¨²sica y las artes visuales.
No menos privilegiados que Winch se sienten los otros cinco seleccionados, que a lo largo de los pr¨®ximos 12 meses compartir¨¢n experiencias y proyectos con nombres de la talla del cineasta americano Martin Scorsese, el m¨²sico senegal¨¦s Youssou N'Dour, la directora de teatro neoyorquina Kate Walk, el core¨®grafo checo Jir¨ª Kyli¨¢n y la artista alemana Rebecca Horn.
Acompa?ado de su protegida, Soyinka ha visitado Londres esta semana con el prop¨®sito de arropar esta iniciativa bianual -estrenada en 2002- que describe como un "intercambio de ideas" entre artistas consagrados y emergentes. Antes de enrolarse en la aventura, habl¨® con su colega Mario Vargas Llosa (mentor de la promesa colombiana Antonio Garc¨ªa ?ngel en una anterior edici¨®n), si bien admite que la f¨¦rrea disciplina del escritor peruano no casa con su car¨¢cter. "Yo no escribo cada d¨ªa como hace Mario", se?ala con enorme respeto, "y lo que pretendo es que Tara atestig¨¹e c¨®mo mi trabajo se desarrolla a partir de una experiencia vital, que descubra la relaci¨®n entre el arte y la vida". No es poco en boca del primer Nobel africano, novelista, dramaturgo, poeta y erigido en icono de la lucha por la democracia en su Nigeria natal, que le ha costado la c¨¢rcel.
Soyinka no distingue entre su papel de escritor y sus posiciones pol¨ªticas, que le llevaron a decantarse en la Iniciativa Rolex por la exponente de una cultura minoritaria, como es el caso de Winch, de descendencia aborigen, afgana e inglesa. La escritora, de 24 a?os, logr¨® cautivar al p¨²blico australiano con su primera obra, Swallow the air (2006), en la que exploraba esa herencia aborigen "que durante tanto tiempo ha sido silenciada". Ambos volver¨¢n a reunirse el pr¨®ximo octubre (la beca contempla una dotaci¨®n econ¨®mica para que los disc¨ªpulos puedan adaptarse a las apretadas agendas de sus mentores), en un festival de las artes que el Nobel ha organizado en Lagos. Entretanto, la argentina Celina Murga se unir¨¢ a la producci¨®n cinematogr¨¢fica que Scorsese filma en Boston; el cantante y compositor hondure?o Aurelio Mart¨ªnez compartir¨¢ sus melod¨ªas musicales gar¨ªfunas -que amalgama ra¨ªces africanas e ind¨ªgenas del Caribe- con N'Dour, y el americano Jason Akira Osma colaborar¨¢ con Kyli¨¢n en una coreograf¨ªa para el cincuentenario del Teatro de la Danza Holand¨¦s.
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