Ning¨²n dedo acusa a Roca

Dos a?os despu¨¦s de que la polic¨ªa irrumpiera en el Ayuntamiento de Marbella y destapara la mayor trama de corrupci¨®n municipal investigada en Espa?a, el susto y el desconcierto inicial de los 86 procesados en el caso Malaya ha pasado. Cuando falta muy poco para que el magistrado ?scar P¨¦rez, segundo instructor del caso, cierre el sumario se adivina una estrategia que la pr¨¢ctica totalidad de los acusados sigue a rajatabla y con la que pretenden salir lo m¨¢s airosos posible del macrojuicio: nadie inculpa a Roca y el ex asesor urban¨ªstico tampoco carga contra nadie.

Los pagos a concejales se han convertido en pr¨¦stamos

Los dos ex alcaldes imputados se han negado a recibir nuevas preguntas

Algunos dicen ahora que se "inventaron" cobros bajo presi¨®n y para evitar la c¨¢rcel

En sus declaraciones indagatorias, uno de los tr¨¢mites previos al cierre de la instrucci¨®n, niegan las acusaciones, subrayan los defectos al trabajo policial y quitan valor a las primeras confesiones alegando que estaban bajo presi¨®n o coaccionados.

La larga lista de procesados, con ediles del Grupo Independiente Liberal (GIL), empresarios, promotores, abogados, marchantes de arte o polic¨ªas ha tenido tiempo de idear la mejor forma de defenderse. Con el secreto de sumario levantado y un nuevo instructor, al que todos alaban la correcci¨®n en el trato, mantienen sin ambages que nada existi¨®, que el agujero de 500 millones en el Ayuntamiento marbell¨ª y la despatrimonializaci¨®n de la ciudad a fuerza de convenios en las que sus vecinos perdieron la posibilidad de tener colegios, zonas verdes y centros de salud eran "s¨®lo negocios" urban¨ªsticos. Atr¨¢s queda la primera disoluci¨®n de un Ayuntamiento en la historia de Espa?a y una ciudad con un verdadero conflicto para legalizar sus m¨¢s de 18.000 viviendas irregulares.

Casi todos los acusados de la trama de corrupci¨®n, detenidos a base de fases y coletazos de la instrucci¨®n, han vuelto a los juzgados de Marbella para hablar de las acusaciones por las que est¨¢n procesados y aportar precisiones sobre su versi¨®n.

Uno a uno han pasado por la sala del Juzgado n¨²mero 5 de Marbella y dando explicaciones muy coincidentes: los pagos a concejales a cambio de resoluciones favorables nunca existieron y las relaciones de los promotores que construyeron en la ciudad con el m¨¢ximo imputado del caso no eran m¨¢s que negocios particulares.

El primer golpe de efecto lo dio la ex edil del GIL Carmen Revilla, el 18 de febrero. "Nunca he recibido dinero a cambio de hacer las cosas mal", asegur¨® al juez P¨¦rez. "Dije que hab¨ªa recibido dinero porque ve¨ªa que no sal¨ªa de la c¨¢rcel. Roca me prest¨® 90.000 euros pero fue a t¨ªtulo personal". Le sigui¨® Jos¨¦ Luis Fern¨¢ndez Garrosa, tambi¨¦n ex concejal del GIL: "Asegur¨¦ que la alcaldesa me hab¨ªa dado dinero porque me sent¨ªa coaccionado, me lo aconsejaron para que evitara la c¨¢rcel".

Los abogados de Juan Antonio Roca no disimulaban su agrado. "Se ha demostrado que ha habido gente que ha declarado bajo presi¨®n, con miedo de ir a la c¨¢rcel", explicaban. Pero las declaraciones indagatorias no son m¨¢s que un tr¨¢mite previo a la vista oral. El procesado puede decir en qu¨¦ puntos est¨¢ conforme y los que desaprueba. No ser¨¢ en el juicio cuando toque poner las pruebas sobre la mesa.

Por si acaso, algunos de los procesados m¨¢s conocidos no han aceptado preguntas de los abogados de sus compa?eros de banquillo. Ni el ex alcalde Juli¨¢n Mu?oz, ni su sucesora en el cargo, Marisol Yag¨¹e, accedieron a resolver las dudas de las partes. Tampoco lo hizo Mar¨ªa Rosa Jimeno, esposa del ex asesor de Urbanismo.

Con tanto viaje, hubo escenas de vecinos de Marbella deseosos de su minuto de gloria y varios percances. Salvador Gardoqui, considerado testaferro y contable de Roca, casi sufre un atropello y sale rodando por las escaleras de los juzgados en su empe?o por que los objetivos no filmaran su rostro. Montserrat Corrulla, una de las empleadas del ex asesor urban¨ªstico que m¨¢s expectaci¨®n cre¨®, afront¨® la ocasi¨®n a cara descubierta.

La larga lista de promotores, procesados por pagar a cambio de resoluciones urban¨ªsticas favorables, aprovecharon su anonimato para cruzar la puerta sin apenas llamar la atenci¨®n. S¨®lo los m¨¢s conocidos, como el cordob¨¦s Rafael G¨®mez, conocido como Sandok¨¢n, par¨® unos minutos para asegurar con la voz rota que por su detenci¨®n y procesamiento en la trama de corrupci¨®n marbell¨ª se hab¨ªa visto obligado a despedir a m¨¢s de mil trabajadores y se encuentra en mitad de una crisis financiera.