La trampa

Hace apenas un mes, Javier Madrazo pidi¨® a sus socios tripartitos, especialmente al PNV, que no cayeran en la "trampa" de centrar su actividad de gobierno en la consulta promovida por Ibarretxe. La verdad es que no entend¨ª la utilizaci¨®n en ese caso de la palabra trampa. Es bien sabido que las trampas te las ponen desde fuera para que t¨² caigas; y que cuando t¨², por tu cuenta, te pones a ti mismo en determinada tesitura podr¨¢ ser lo que sea -desde un error hasta un peligro-, pero no es una trampa. En fin, que eso de la trampa no lo acept¨¦, porque lo menos que se puede decir de la concentraci¨®n del lehendakari y su gobierno en la estricta consulta es que no se la ha impuesto nadie desde fuera, que es producto de su propia decisi¨®n y empe?o. Lo que s¨ª cre¨ª entender fue que las palabras del coordinador general de EB conten¨ªan una forma de reproche unida a una excepci¨®n. Que Madrazo criticaba a sus socios de gobierno por abandonar los problemas concretos de la ciudadan¨ªa para adentrarse en la ruta del Ibarretxe; pero, sobre todo, que quer¨ªa dejar claro que ¨¦l de esa actitud no participaba; como si dijera: los otros consejeros s¨ª, pero yo no me centro en la consulta, yo voy s¨®lo a lo m¨ªo, esto es, a la Vivienda y los Asuntos Sociales.

Hay cr¨ªticas pol¨ªticas que se hacen solas, son como frutos que s¨®lo hay que recoger del suelo

Hay cr¨ªticas pol¨ªticas que se hacen solas, que son como frutos que no tienes que ir a arrancar de ning¨²n ¨¢rbol, que te basta con recoger del suelo (de la calle) porque ya se han ca¨ªdo de puro maduros, y all¨ª est¨¢n, a los ojos de todos, clamando al cielo. Y la citada consejer¨ªa tiene tal colecci¨®n de asuntos sociales pendientes -descuidados, agravados, mal orientados y peor o nada resueltos-, que hacen que esas palabras de su titular suenen a estas alturas no a trampa sino a broma. En realidad, a burla hecha a una ciudadan¨ªa que ve c¨®mo sus asuntos sociales no s¨®lo no se resuelven sino que se agravan sin remedio: de la cesta de la compra a la casa, instaladas en las nubes, atormentando desde all¨ª la estabilidad, la felicidad y la salud (lo m¨¢s barato es la comida basura) de much¨ªsimas familias vascas.

No parece que la consejer¨ªa dirigida por Javier Madrazo haya estado muy concentrada en sus funciones. No se lo parece ni al Parlamento de Gasteiz, que (con el apoyo de la oposici¨®n y del mismo tripartito) acaba de instar a ese departamento a cumplir sus propias previsiones (contenidas en el Plan Director de Vivienda 2006-2009) y a crear el 50% de alquileres protegidos a¨²n pendientes. Y a poner en marcha cuanto antes el complemento de Vivienda para ayudar al pago de alquileres, anunciado pero no aplicado. En cuanto al proyecto de ley de Servicios Sociales -argumento central de esa consejer¨ªa- no s¨¦ cu¨¢nta concentraci¨®n se le habr¨¢ aplicado, pero el hecho es que se ha llevado al Parlamento hace s¨®lo unos d¨ªas, es decir, en el tramo final de la legislatura y con tanto retraso que corre el riesgo de encontrarse con que lo acordado previamente con ayuntamientos y Diputaciones est¨¦ ya, a estas alturas, caducado.

Es decir, el riesgo de encontrarse con todo por hacer sin tiempo para hacer, en una materia de enorme importancia para el bienestar de la gente, de los ciudadanos, que son las verdaderas v¨ªctimas de esas trampas que las obsesiones y las desatenciones de gesti¨®n tripartitas les ponen abiertamente por delante de la vida diaria.