El 'ministerio' mafioso de Petrov
El dirigente ruso capturado gobernaba su entramado de empresas ficticias desde una mansi¨®n - Garz¨®n y tres fiscales toman declaraci¨®n a los detenidos
El ca¨ªdo capo de la mafia rusa Guennadi Petrov no se escond¨ªa. Ayer declar¨® en Palma ante el juez Baltasar Garz¨®n y tres fiscales anticorrupci¨®n y, al entrar en los juzgados, esposado, lo hizo a cara descubierta, mirando al frente y sin adem¨¢n de agachar la cabeza. Est¨¢ acusado de dirigir la organizaci¨®n criminal internacional Tambovskaya, a trav¨¦s de un entramado de empresas ficticias en Espa?a que manejaba desde una mansi¨®n ostentosa, de cuatro plantas -casi un ministerio-, en la urbanizaci¨®n Sol de Mallorca, en la costa de Calvi¨¤.
Petrov usaba avi¨®n privado, ten¨ªa un yate y una colecci¨®n de coches de alta gama. A su organizaci¨®n mafiosa, relacionada con el entorno del poder de San Petersburgo y las grandes compa?¨ªas privatizadas por Mosc¨², le han sido bloqueadas centenares de cuentas bancarias, con un saldo de 14 millones de euros.
Guennadi Petrov lleg¨® a Mallorca hace 18 a?os con dinero del KGB
Amaba el lujo, pero acud¨ªa a comer a restaurantes chinos baratos
El templo de Petrov -con reiteradas columnatas de imitaci¨®n neocl¨¢sica en las fachadas- vale en el mercado m¨¢s de 20 millones. El jefe viv¨ªa rodeado de subordinados y ayudantes en su vecindad, una peque?a Rusia repleta de muros con c¨¢maras de seguridad. La zona residencial mallorquina fue creada por la familia Barreiros y all¨ª posee una casa la hermana del Rey, Pilar de Borb¨®n. Petrov ha levantado su palacio litoral y ha efectuado dos operaciones inmobiliarias en la urbanizaci¨®n.
Guennadi Petrov escuch¨® en el juzgado las imputaciones que se le formularon por sus actividades en Espa?a -asociaci¨®n il¨ªcita, blanqueo de capitales, falsificaci¨®n documental y delito contra la Hacienda p¨²blica- y contest¨®, con la ayuda de un traductor, durante casi tres horas. La fiscal¨ªa entiende que vio "reforzada" sus tesis sobre el papel de Petrov como "dirigente cualificado" de la mafia rusa y el operativo de esta corporaci¨®n ilegal en el blanqueo de sus fondos.
Garz¨®n, que coordin¨® la espectacular operaci¨®n policial en Mallorca, prolong¨® la detenci¨®n de Petrov y sus tres colaboradores apresados, que fueron trasladados a Madrid. El lunes, el juez decidir¨¢ si ingresan en prisi¨®n el capo y el resto de arrestados, 10 en M¨¢laga -tambi¨¦n interrogados ayer-, los cuatro detenidos en Alicante y los dos profesionales espa?oles arrestados en Madrid, entre ellos el abogado y ex militar que dirig¨ªa la estructura societaria y mercantil de la banda.
El primer negocio del clan de Petrov en Espa?a fue un fiasco total. A principios de los 90, una trama de sociedades rusas compr¨® el hotel Palmyra Beach, en Calvi¨¤, con fondos procedentes de los servicios del KGB y del ex partido comunista sovi¨¦tico, PCUS. Petrov perdi¨® una decena de millones de euros y el control del hotel, valorado en 15 millones.
Petrov apenas habla espa?ol, es un potentado del hampa que ama el poder y el lujo, pero que viste con discreci¨®n. Frecuentaba los restaurantes chinos baratos y se reun¨ªa en las terrazas de las cafeter¨ªas de Palma, ya que se sab¨ªa espiado desde hac¨ªa a?os.
El clan quiso comprar un remolcador y negoci¨® la importaci¨®n de madera y cargamentos de hierro. Estos negocios nunca fructificaron, pero el patrimonio inmobiliario fue en aumento, con m¨¢s de media docena de chal¨¦s al lado del mar. El mandam¨¢s de la mafia rusa se jact¨® al llegar a Palma de tener muy buenas relaciones con la autoridad local de San Petersburgo y, al mismo tiempo, trab¨® contactos con dos negociantes italianos acusados de mafiosos, Felice Cultrera y Gianni Menini. Entonces extendi¨® su actividad a la Costa del Sol y Madrid. La investigaci¨®n rastrea qu¨¦ papel en el lavado de dinero tuvieron sus firmas Hisparue, Vorteop Incor, Dima Incor, Inversiones Sarki, Inversiones Gudimar, Inmobiliaria Calvi¨¤ 2001 o Sunstar, compa?¨ªas con personal m¨ªnimo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.