Los barones peronistas aprovechan la huelga agraria para atacar a los Kirchner
La falta de combustibles en las urbes argentinas agudiza el malestar popular
La cu?a m¨¢s eficaz es la que est¨¢ hecha de la misma madera y esa posibilidad es precisamente la que est¨¢ cristalizando en Argentina, donde los grandes barones del peronismo han multiplicado sus contactos en los ¨²ltimos d¨ªas para apartar a los Kirchner del poder. Se trata de hacerlo primero en el hist¨®rico Partido Justicialista y posteriormente en las instituciones, aunque el mandato de Cristina Fern¨¢ndez no concluye en teor¨ªa hasta 2011.
El ex presidente Duhalde encabeza la rebeli¨®n contra el Gobierno
Una vez m¨¢s est¨¢ quedando demostrado que en Argentina el partido en el poder es a la vez la principal fuerza de la oposici¨®n. Desde que N¨¦stor Kirchner llegara al poder en 2003, el oficialismo no se ha mostrado preocupado por las sucesivas derrotas a nivel local a manos del partido de centroderecha de Mauricio Macri o por el segundo puesto en las presidenciales del centro-izquierda de Elisa Carri¨®. Es m¨¢s, ambos pol¨ªticos han estado pr¨¢cticamente desaparecidos durante toda la actual crisis del campo, el mayor desaf¨ªo a los Kirchner, y s¨®lo en las ¨²ltimas horas han comenzado a dejarse ver.
Los Kirchner han centrado siempre su fuego en acabar con la resistencia dentro del propio peronismo. En 2005, Cristina Fern¨¢ndez infligi¨® una dur¨ªsima derrota en las urnas a las listas del ex presidente Eduardo Duhalde -curiosamente, mentor pol¨ªtico de su esposo, el ex presidente Kirchner-, y hace unos meses, Kirchner accedi¨® a la presidencia del Partido Justicialista. Gobernadores, alcaldes y cuadros del partido juraron lealtad al matrimonio presidencial. Todo parec¨ªa bajo control.
El enconamiento de la crisis del campo y la ca¨ªda del apoyo popular, sin embargo, han dado alas a aquellos que mejor conocen los mecanismos capaces de acabar con el cr¨¦dito de un presidente. Y lo saben porque previamente los han utilizado y luego sufrido en carne propia.
El ex presidente Eduardo Duhalde (2002-2003), a quien se daba pol¨ªticamente por acabado tras la derrota de sus listas en las legislativas de 2005, encabeza ahora un amplio movimiento al que ha sumado al influyente gobernador de San Luis, Alberto Rodr¨ªguez Saa, al hermano de ¨¦ste, Adolfo, quien presidiera el pa¨ªs durante 48 horas en 2002, a figuras de peronismo bonaerense y a alcaldes del superpoblado cintur¨®n que rodea a la capital argentina. El l¨ªder piquetero oficialista Luis D'El¨ªa no ha tardado en colgar a Duhalde el sambenito de "golpista".
?sta es la oposici¨®n que levanta m¨¢s preocupaci¨®n en el Gobierno, cuyas decisiones son tomadas por un reducido n¨²mero de personas y que ve c¨®mo sus sucesivos intentos por desbaratar la huelga del campo y las protestas urbanas han terminado en fracaso. El vicepresidente del pa¨ªs, Julio C¨¦sar Cobos, emiti¨® un comunicado el domingo en el que ped¨ªa que el Congreso fuera el foro donde se diriman las discusiones, lo que ha sido interpretado como un distanciamiento de la presidenta.
Pasado ma?ana, coincidiendo con la "jornada de protesta" convocada por los productores agrarios, N¨¦stor Kirchner ha organizado un multitudinario acto en la plaza de Mayo en apoyo de su esposa. Ya el pasado s¨¢bado acudi¨® a la plaza y antes se dej¨® ver mientras miembros de la Juventud Peronista pegaban carteles en los que se injuriaba al grupo period¨ªstico Clar¨ªn. Un hijo de los Kirchner preside otra agrupaci¨®n peronista que insulta a los medios de comunicaci¨®n en los actos p¨²blicos.
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