Malos tiempos para libreros y distribuidores

El sector del libro espa?ol se prepara para la crisis y el cintur¨®n se lo va a ajustar con m¨¢s ah¨ªnco por sus ¨²ltimas p¨¢ginas: la distribuci¨®n y el punto de venta. "Los agentes y los grandes clientes [cadenas de librer¨ªas e hipermer-cados] nos aprietan por lo que los editores tendremos que reducir a¨²n m¨¢s los costes, pero para distribuidores y libreros ha llegado la inevitable reconversi¨®n a fondo", sentenci¨® ayer Daniel Fern¨¢ndez, editor de Edhasa y distribuidor, ante casi 200 de sus colegas en la primera jornada del VI Congreso de Editores de Espa?a que tiene lugar en Sevilla.

"Internet puede hacer innecesaria la distribuci¨®n f¨ªsica del libro", dice Caso

No hubo contraataque de los distribuidores, fuerza oculta del mundo del libro: su facturaci¨®n es m¨¢s de la mitad de lo que mueve todo el sector espa?ol (1.571 de los 3.014 millones en 2006). Ellos son muy conscientes de su situaci¨®n: en Espa?a hay unas 150 empresas que reparten sobre todo libros, atomizaci¨®n que repercute en todo: m¨¢s de la mitad factura menos de tres millones de euros y la media de libros por pedido llega s¨®lo a 29. "O nos reconvertimos nosotros o alguien de fuera lo har¨¢", admite Francisco Mart¨ªnez, vicepresidente de la Federaci¨®n de Asociaciones Nacionales de Distribuidores de Ediciones (FANDE).

"La estructura tendr¨ªa que quedar con un par de distribuidoras potentes por comunidad aut¨®noma y entre tres o cinco que funcionen a nivel estatal", apunta como modelo ideal Jos¨¦ Manuel Anta, secretario t¨¦cnico de FANDE. Para Mart¨ªnez, uno de los problemas es el gran n¨²mero de devoluciones: "Es

la gran sangr¨ªa para todos. Oficialmente son del 30%, m¨¢s del doble de Alemania, pero hay muchos t¨ªtulos que llegan hasta el 90% de devoluci¨®n y eso implica costes log¨ªsticos brutales". A la espera de la maduraci¨®n del e-book e Internet, hoy, para vender un libro en Espa?a hay que mover dos.

"El modelo de distribuci¨®n online en Alemania es ya del 12,5% y en Espa?a s¨®lo del 2%", aport¨® Gian Arturo Ferrari, director general de la divisi¨®n Libro de Mondadori. "Internet es un nuevo modelo de negocio en el que la distribuci¨®n f¨ªsica puede llegar a no ser necesaria, lo que cambiar¨¢ la relaci¨®n editor-distribuidor, como lo har¨¢ la gratuidad del libro de texto", complet¨® Javier Caso, director general de Santillana Educaci¨®n.

Con pausado tono mercantil, Nick Loeffer, responsable del ¨¢rea de desarrollo de negocios de Amazon, enumer¨® las bondades de Kindle, el e-book de Amazon lanzado el pasado noviembre, del que han vendido ya 50.000 unidades en EE UU y con el que pueden leerse 130.000 t¨ªtulos.

Pero las novedades tecnol¨®gicas anunciadas no convencieron mucho al sector. Jes¨²s Badenes, director general de Librer¨ªas del Grupo Planeta, lo dej¨® claro: "Los j¨®venes de 15 a 25 a?os en Espa?a no leen casi nada y se bajan de Internet casi todo; se han vendido 70.000 e-books en todo el mundo, mientras que en el mismo periodo ya se llevan 10 millones de iPods". Y Mart¨ªn Roca, de Prous Science, aseguraba que el 80% de sus los ingresos de su grupo editorial Thomson Reuters viene por contenidos digitales: "Los nuevos formatos est¨¢n ah¨ª, l¨¢ncense", desafi¨®. Los caminos de la distribuci¨®n del libro parecen, pues, inescrutables.