"Tr¨¢eme la carpeta del dinero"

Un testigo vio c¨®mo actuaba frecuentemente Antonio Barrientos, ex alcalde de Estepona, actualmente en prisi¨®n, acusado de cohecho, tr¨¢fico de influencias, malversaci¨®n de fondos p¨²blicos y blanqueo de capitales. Y lo cuenta: "Visitaba una asociaci¨®n, escuchaba a sus promotores y daba un generoso donativo en billetes de 500 euros. Llevaba siempre a su lado a una persona a la que le dec¨ªa: 'Tr¨¢eme la carpeta del dinero". Las donaciones a este tipo de asociaciones de la ciudad (de vecinos, de jubilados...) se hicieron m¨¢s patentes a lo largo de la pasada campa?a electoral, seg¨²n algunas fuentes. Nadie sab¨ªa muy bien de d¨®nde sal¨ªa el dinero que el alcalde entregaba siempre en efectivo a estas asociaciones cuando se acercaba a visitarlas. Todo para agigantar la figura del alcalde.

No cort¨® las pr¨¢cticas de Gil, aunque las disfraz¨® de mayor legalidad

El uso de los fondos de la caja b que manejaba Barrientos, alimentada por decenas de empresarios y promotores a cambio de favores urban¨ªsticos, licencias y permisos, ten¨ªa tambi¨¦n otro destinatario claro: conceder gratificaciones y sobresueldos a empleados municipales, actividad en la que participaba Francisco Zamorano, concejal de Hacienda y que llevaba la gesti¨®n de personal. "Cuando un expediente deb¨ªa ser agilizado, la f¨®rmula era la de premiar a determinados funcionarios", a?ade este testigo.

Los investigadores no han acreditado hasta el momento que exista enriquecimiento personal del alcalde pero est¨¢n a la espera de analizar la informaci¨®n que les llegar¨¢ procedente de los bancos sobre las cuentas corrientes incautadas. Ah¨ª esperan encontrar algo de lo hallado hasta ahora: exist¨ªan rumores muy extendidos de que la Polic¨ªa estaba investigando el caso de Estepona.

El ex alcalde de Estepona contaba con otra manera para ganar popularidad: su intensa actividad a la hora de atraer personalidades ilustres a la ciudad, sus proyectos culturales (Ciudad del Periodismo, Campus universitario). Todos estos le permitieron ganarse una imagen p¨²blica, dominar el partido en Estepona, donde su elecci¨®n como secretario general recibi¨® un respaldo casi un¨¢nime, y escalar posiciones en M¨¢laga.

Las cifras de afiliaci¨®n del partido han crecido notablemente. Esto tambi¨¦n ha llamado la atenci¨®n de los investigadores. De hecho, los movimientos de la afiliaci¨®n en el PSOE de M¨¢laga son uno de los hechos clave de la investigaci¨®n.

La publicidad de que disfrutaba Barrientos era tan evidente que pasaba por ser el socialista m¨¢s conocido de M¨¢laga. Ten¨ªa, adem¨¢s, cierta fama de ir por libre. Tanto es as¨ª que, a pesar de algunos desencuentros con la Junta de Andaluc¨ªa por sus pr¨¢cticas urban¨ªsticas, la Junta termin¨® entrando en el juego ante la imparable actividad del alcalde.

El terreno en el que se mov¨ªa Barrientos, Estepona, ten¨ªa dos caracter¨ªsticas singulares dentro de la Costa del Sol: ser el Ayuntamiento m¨¢s importante con el PSOE en el poder y mantener una notable expansi¨®n urban¨ªstica en tiempos de crisis inmobiliaria. En esas condiciones, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n, Barrientos usaba la gesti¨®n municipal para hacerse cada vez m¨¢s fuerte en el PSOE de M¨¢laga.

A esto colaboraba la situaci¨®n interna del PSOE malague?o, que sufre desde hace tiempo ciertas disensiones internas. En esta coyuntura se mov¨ªa la ambici¨®n de Barrientos, que iba m¨¢s all¨¢ de su puesto en la alcald¨ªa.

En cualquier caso, la envergadura de esta operaci¨®n no tiene nada que ver con la Operaci¨®n Malaya. Lo que est¨¢ fuera de toda duda era que Estepona no estaba en crisis o al menos no sufr¨ªa el par¨®n urban¨ªstico de otras localidades de la costa. Un d¨ªa antes de salir a la luz la Operaci¨®n Astapa, Barrientos firmaba un convenio con unos saud¨ªes que significar¨ªa unos ingresos cercanos a los ocho millones de euros para el municipio. Los convenios son, por tanto, otro plato fuerte de la investigaci¨®n.

En ese terreno, dos empresas, Valle Romano y Prasa, ocuparon la atenci¨®n de los investigadores. Sobre todo Valle Romano, el mayor proyecto urban¨ªstico de la Costa del Sol en estos momentos, patrocinador de buena parte de las actividades culturales y deportivas de la ciudad de Estepona. Valle Romano, como Prasa y otras empresas, se caracterizaba por financiar buena parte de las actividades emprendidas por el alcalde Antonio Barrientos. Las donaciones nunca fueron transparentes, as¨ª que no hab¨ªa certeza de cu¨¢l era el destino final del dinero ni qu¨¦ cantidades se manejaban.

Todas las fuentes consultadas coinciden en afirmar que el alcalde Barrientos no cort¨® con las pr¨¢cticas urban¨ªsticas de la era Gil, pero s¨ª trat¨® de aparentar una mayor legalidad.