"Todos los poetas se creen el ombligo del mundo"
M¨¢s que comer, Chus Visor degusta y picotea. De aqu¨ª y de all¨¢. Despacio. Sin atiborrarse. Cualquiera, compartiendo mesa con ¨¦l en el m¨ªtico Belarmino, puede pensar que este editor solitario y heroico, uno de los escasos seres en el planeta que pueden presumir de vivir de la poes¨ªa -"claro que se puede ganar dinero con ello", dice-, basa su alimentaci¨®n en la misma metodolog¨ªa que su trabajo: la b¨²squeda de lo exquisito.
Exquisitos son los salmonetes y la ensaladilla con los que abre boca. Como exquisitos son los libros que va a editar este a?o en una colecci¨®n especial: Palabra de Honor. La que conmemorar¨¢ 40 a?os de una firma referente mundial para la poes¨ªa hispana.
Ha levantado ¨¦l solo su negocio, a base de la pasi¨®n que le meti¨® en la cabeza un cura. Qui¨¦n lo iba a decir cuando se trata de un republicano casi insurrecto, "y eso que a mi padre se le hab¨ªa metido en la cabeza que yo ten¨ªa que ser obispo", comenta. "Fue un cura que nos hac¨ªa aprendernos de memoria poemas de Lorca, de Leopoldo Panero y de G¨®ngora", comenta.
El editor asegura que los espa?oles prefieren leer a los poetas vivos
Luego, con el o¨ªdo hecho a la vida en verso, Chus empez¨® a frecuentar recitales y tugurios de poetas. Pronto se dio cuenta de que en la Espa?a de finales de los sesenta, la que empezaba a ver luz al final del t¨²nel del franquismo, urg¨ªa abrir un hueco para ese g¨¦nero. "Entonces s¨®lo editaban Adonais y el Bardo, creo recordar, y mi hermano Miguel y yo vimos que pod¨ªamos sacar esos libros que quer¨ªamos leer y no exist¨ªan".
El primer t¨ªtulo fue toda una declaraci¨®n de intenciones: "Una temporada en el infierno, de Rimbaud, con traducci¨®n de Gabriel Celaya", recuerda Chus. Y as¨ª hasta los 675 que lleva hoy por no entrar en su biblioteca particular, con cerca de 30.000 vol¨²menes, digna del puro bibli¨®filo que es.
En su cat¨¢logo ha reunido m¨¢s de 400 autores entre los que sobresalen los hispanoamericanos, pero tambi¨¦n voces de otras lenguas y algo de lo que se siente orgulloso: "Haber sido responsable de herej¨ªas como la de abrir la editorial a la obra de cantantes como Bob Dylan, Leonard Cohen o Joaqu¨ªn Sabina, nuestro superventas, del que bien orgulloso me siento", afirma.
As¨ª, echando tab¨²es por tierra, quiere seguir: "Pienso llegar hasta 1.000", sentencia, al tiempo que hinca el diente en un excelso guiso de liebre con setas. El optimismo le ha podido siempre. Si no hubiese sido imposible haber llegado tan lejos desde el despacho de su librer¨ªa, editando a puro capricho, "siempre lo que me ha dado la gana", dice, con pocas certezas y sin expertos en mercadotecnia: "De un libro sabes si va a vender mucho o poco".
Dice que es un gran momento. "En Espa?a se lee m¨¢s poes¨ªa que nunca", asegura. Algo que no le extra?a en un pa¨ªs dado al verso, "el que m¨¢s de Europa, aunque no lo parezca", comenta, y donde se prefiere leer a los poetas vivos que a los muertos: "Somos as¨ª de gilipollas". ?l los conoce bien, los trata intensamente y los divide en dos clases que al final convergen en una. "Los hay de dos estilos, los que escriben del amor y los que indagan en la vida. Ahora, todos, al final se parecen en algo: siempre se creen el ombligo del mundo".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.