Europa env¨ªa ilegalmente parte de sus desechos a los pa¨ªses pobres
Electrodom¨¦sticos y materiales peligrosos entran sin control en Asia y ?frica
La basura se ha convertido en un negocio para los pa¨ªses ricos. Para los pobres, supone una forma r¨¢pida de ganar dinero a base de reciclarla, o bien de acceder a materias primas de las que carecen. Esta impecable ecuaci¨®n presenta un agujero cada vez m¨¢s negro en Europa, donde el 15% del transporte de residuos, a veces con destinos tan lejanos como Asia y ?frica, quebranta las normas comunitarias. En un 6% de los casos, los cargamentos son del todo ilegales. Ambas cifras figuran en el informe reci¨¦n presentado al Parlamento holand¨¦s por el Ministerio de Medio Ambiente, cuyos inspectores han coordinado a sus colegas de 25 pa¨ªses europeos en la mayor campa?a de revisi¨®n de desechos hecha hasta la fecha.
Un informe oficial holand¨¦s destapa el tr¨¢fico hacia las zonas en desarrollo
Por el puerto de Rotterdam pasan al a?o 10 millones de contenedores
Desde que el barco Probo Koala abandonara hace dos a?os en Costa de Marfil una carga t¨®xica que caus¨® 16 muertos y miles de envenenados, los inspectores medioambientales de la UE vigilan mejor el contenido real de lo transportado por tierra, mar y r¨ªos. Sin embargo, del estudio ahora publicado se desprende que el peligro puede ser mucho m¨¢s dif¨ªcil de percibir, teniendo en cuenta que un 15% del total de las cargas de toda clase transportadas en Europa son basuras.
Un ejemplo de esa dificultad fue el caso de un contenedor hallado en el puerto de Rotterdam lleno de botellas de pl¨¢stico usadas. Con destino a Hong Kong para transformarse en botellas nuevas, la documentaci¨®n parec¨ªa en regla, pero un buen repaso mostr¨® la presencia de un papel adherido al recipiente de dif¨ªcil reciclaje y que no hab¨ªa sido notificado. O bien unas neveras usadas con destino a India, que ten¨ªan intacto el motor con el l¨ªquido refrigerante dentro, el denominado clorofluorocarbono (CFC). Un electrodom¨¦stico as¨ª no puede enviarse a pa¨ªses en desarrollo sin medios para tratar un producto que destruye la capa de ozono.
"Las cosas se hacen cada vez mejor, pero entre febrero de 2007 y enero de 2008 un 15% del transporte de residuos por territorio europeo vulneraba las normar comunitarias. De esta cifra, un 9% de los veh¨ªculos no ten¨ªa los papeles en regla. En el 6% restante de los casos, el transporte era ilegal", explica Jolanda Roelofs, la inspectora holandesa de Medio Ambiente que ha coordinado el informe. Lo ha hecho con colegas de toda la UE, a excepci¨®n de Espa?a, Grecia e Italia, y de Noruega, Suiza, Serbia y Croacia. "Hemos interceptado y abierto contenedores portuarios y de barcas fluviales, camiones y trenes para hallar desde metales como cobre y cromo a motores de coches y aparatos electr¨®nicos. Tambi¨¦n hemos visto basuras caseras, algo que puede parecer menos peligroso. Pero lo es y mucho; ah¨ª entra de todo y es dif¨ªcil de separar".
Los aparatos electr¨®nicos ya usados conllevan otro problema de largo alcance. ?frica los reclama para su desguace o reutilizaci¨®n y el vendedor no supervisa dicho proceso. "Hablamos aqu¨ª de piezas con productos t¨®xicos en su composici¨®n. Si el trabajador no est¨¢ bien protegido, su labor puede ser a la larga tan letal como la de otros restos en apariencia m¨¢s contaminantes", a?ade Roelofs. Luego subraya que el negocio de la basura es imparable porque pa¨ªses en alza, como China e India "necesitan materias primas, y para los africanos, reciclar desechos por dinero es un aporte a la econom¨ªa". El informe se?ala puntos negros tambi¨¦n en Europa, como Bulgaria, donde todas las cargas ten¨ªan problemas legales. O bien Polonia y Eslovenia, con muchos fallos. Sin olvidar que por el puerto de Rotterdam, el mayor de Europa, pasan al a?o 10 millones de contenedores de toda ¨ªndole. Para la inspectora holandesa, lo mejor ser¨ªa reforzar y armonizar las normas en vigor, como la que regula el transporte de basuras en la UE y a la que pueden sumarse otros pa¨ªses que no sean socios.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Residuos t¨®xicos
- Tercer mundo
- Transporte mercanc¨ªas
- Tratamiento residuos
- Residuos
- Pol¨ªtica ambiental
- Reciclaje
- Pol¨ªtica social
- Saneamiento
- Geopol¨ªtica
- Salud p¨²blica
- Transporte mar¨ªtimo
- Pol¨ªtica sanitaria
- Equipamiento urbano
- Protecci¨®n ambiental
- Uni¨®n Europea
- Problemas ambientales
- Urbanismo
- Sanidad
- Organizaciones internacionales
- Europa
- Transporte
- Salud
- Relaciones exteriores
- Pol¨ªtica