Las potencias exigen dureza contra Robert Mugabe

Los dirigentes de los pa¨ªses ricos amenazaron ayer con endurecer las sanciones contra Zimbabue si los Estados africanos no son capaces de actuar con rapidez contra Robert Mugabe —de 84 a?os y en el poder desde 1980—, que fue reelegido presidente tras unas fraudulentas elecciones realizadas sin oposici¨®n el 27 de junio.

"Me preocupa mucho la gente de Zimbabue y estoy muy decepcionado con unas elecciones a las que sin duda califico de farsa", dijo el presidente de EE UU, George Bush, durante la reuni¨®n que mantuvo con siete dirigentes africanos en Jap¨®n. La situaci¨®n fue inc¨®moda teniendo en cuenta que en la sala estaba el presidente surafricano, Thabo Mbeki, que no s¨®lo sigue sin condenar el r¨¦gimen de Mugabe, sino que se ha reunido con el dictador en Harare.

El presidente de Tanzania, Jakaya Kikwete, dijo que la mayor¨ªa de los pa¨ªses africanos compart¨ªa la preocupaci¨®n de Bush, pero "que difer¨ªan en las acciones que deb¨ªan adoptarse contra el r¨¦gimen de Mugabe". Kikwete tambi¨¦n ejerce la presidencia de turno de la Uni¨®n Africana (UA), organizaci¨®n que a¨²n no se ha atrevido a ser contundente contra la dictadura zimbabuense.

La UA considera que la soluci¨®n a la crisis en Zimbabue es la formaci¨®n de un Gobierno de unidad nacional entre el partido de Mugabe, el ZANU-PF, y el opositor Movimiento por el Cambio Democr¨¢tico (MDC, en ingl¨¦s), dirigido por Morgan Tsvangirai, que gan¨® holgadamente la primera vuelta de las presidenciales en marzo y boicote¨® la segunda en junio tras la ola de violencia promovida por el Estado contra los simpatizantes de la oposici¨®n. "Tienen que unirse y mirar juntos hacia el futuro (?) y colaborar en un Gobierno", declar¨® Kikwete.

"A usted le hubiera gustado vernos hacer algunas cosas, a nosotros nos hubiera gustado verle hacer otras", dijo con sorna el presidente tanzano al aparecer junto a su hom¨®logo de EE UU, antes de enfatizar: "Seguiremos debatiendo estos asuntos y, como amigos, al final llegaremos a un acuerdo".

El MDC ha denunciado que 103 de sus simpatizantes han sido asesinados, 1.500 arrestados, incluidos 20 de sus diputados electos, y otros 5.000 han desaparecido desde la primera vuelta de las elecciones presidenciales y las legislativas, el pasado 29 de marzo. La ola de violencia ha provocado adem¨¢s 200.000 refugiados y decenas de miles de personas han pasado por siniestros "campos de reeducaci¨®n", especialmente en zonas rurales que fueron feudos del partido gubernamental y que en marzo se atrevieron a votar por la oposici¨®n.

El partido de Tsvangirai denunci¨® ayer nuevas redadas violentas contra sus seguidores. En Ruwa, cerca de Harare, un grupo de encapuchados atac¨® a simpatizantes de la oposici¨®n que antes de los comicios pidieron asilo pol¨ªtico en la Embajada de Sur¨¢frica, seg¨²n la BBC.

Mientras tanto, Mugabe corteja a una facci¨®n disidente del MDC para tratar de integrarla en su Gobierno. Si lo logra, recuperar¨ªa la mayor¨ªa en el Parlamento, que tres meses despu¨¦s a¨²n no se ha constituido porque est¨¢ bajo el control de la oposici¨®n. La situaci¨®n econ¨®mica est¨¢ fuera de control, con una hiperinflaci¨®n del 104.000.000%. En marzo, el billete m¨¢s valioso era el de 10 millones. Ahora es el de 50.000 millones.