Matr¨ªcula de honor
A las 9.30 asist¨ª a la defensa de una tesina de master sobre inform¨¢tica en la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a. En el aula, peque?a y abarrotada por familiares y amigos del ponente, hac¨ªa un calor considerable. El ponente, el joven Hugo Hern¨¢ndez Pibernat (vestido con pantal¨®n corto y polo: las galas de los inform¨¢ticos), hab¨ªa preparado un power point y se explic¨®, en ingl¨¦s, con el aplomo y la elegancia gestual de los meteor¨®logos de la televisi¨®n. Propuso un algoritmo que mejora los hasta ahora utilizados para ahorrar energ¨ªa en circuitos en red de m¨®viles u ordenadores, siguiendo los m¨¦todos de la Ant Colony Optimization de Marco Dorigo, que se inspira en el comportamiento de las colonias de hormigas para seguir el camino m¨¢s corto de cuantos conducen desde el hormiguero hasta un determinado dep¨®sito de alimentos: las hormigas van dejando a su paso un rastro de feromonas que se hace paulatinamente m¨¢s intenso al transitar por el camino m¨¢s corto y, por el contrario, se va haciendo m¨¢s leve en los trayectos m¨¢s largos, hasta que ¨¦stos son desechados.
Por esta investigaci¨®n que ya est¨¢ siendo publicada en la prensa especializada internacional, el tribunal propuso y obtuvo la matr¨ªcula de honor para Hugo Hern¨¢ndez, y el p¨²blico aplaudi¨® con entusiasmo. Luego en el pasillo todo eran sonrisas y l¨¢grimas, abrazos y emoci¨®n. Yo, que soy lo que en el lenguaje de la correcci¨®n pol¨ªtica llaman un sujeto technologically challenged, 'desafiado tecnol¨®gicamente', torpe en estas materias, no lo soy tanto en otras, relativas a la observaci¨®n, como para no haber disfrutado intensamente de un rito acad¨¦mico tan brillantemente conducido en el que la inteligencia, encarnada en el joven ingeniero en pantalones cortos, se aplicaba a un problema y lo resolv¨ªa con sencillez y desenvoltura m¨¢ximas. Este asunto de las hormigas y las computadoras tan bella y verazmente expuesto me emocion¨®.
Por la tarde fui a la calle del Consell de Cent, a la inauguraci¨®n de Con el tiempo, contra el tiempo, la exposici¨®n sobre ?ngel Crespo en el d¨¦cimo aniversario de su muerte, que empez¨® en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid y ahora llega a la sala de exposiciones del C¨ªrculo de Lectores de Barcelona. Es una exposici¨®n muy completa, con manuscritos, cartas, fotograf¨ªas, dibujos, ediciones, y los aforismos de Crespo escritos en las paredes. Estaban Pilar G¨®mez Bedate, claro, y J. L. Gim¨¦nez-Front¨ªn, ?lex Susanna, Joan Riambau... Corredor Matheos pronunci¨® unas c¨¢lidas palabras para recordar cu¨¢nto bien hizo y nos hizo ?ngel Crespo. Cit¨®, me parece, aquellos versos en los que ¨¦ste se refer¨ªa a sus exilios, a su vida de profesor errante de pa¨ªs en pa¨ªs hasta volver a Espa?a: "He muerto muchas veces / y otras tantas he vuelto / a contemplar mis d¨ªas... Voy gozoso a la tierra / de la que me he de alzar / con oro entre las manos". Desde luego, esto no lo puede decir cualquiera. Yo creo que estos versos tambi¨¦n le cuadran al ¨²ltimo viaje. Por lo menos para m¨ª s¨ª se cumple su fant¨¢stica predicci¨®n cuando vuelvo a casa y encuentro que me estaban esperando tres libros de Crespo reci¨¦n salidos de las imprentas, como si su asombrosa fecundidad de cr¨ªtico, de poeta espl¨¦ndido, de traductor leal, no cesase nunca. Son los ensayos sobre poes¨ªa y sobre arte recogidos bajo el t¨ªtulo de El poeta y su invenci¨®n (C¨ªrculo de Lectores); la reedici¨®n de El libro del desasosiego de Pessoa (Seix Barral), y el volumen Con el tiempo, contra el tiempo (C¨ªrculo de Bellas Artes), que es el cat¨¢logo de la exposici¨®n a la que me he referido, e incluye los tributos de un mont¨®n de literatos y amigos. Como no los puedo nombrar a todos, nombrar¨¦ s¨®lo a Claudio Guill¨¦n. S¨®lo a ¨¦l, pero dos veces: Claudio Guill¨¦n. D¨ªa perfecto.
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