Nuevo terremoto hipotecario en EE UU

Las cosas siguen yendo a peor casi un a?o despu¨¦s del estallido de la crisis financiera en EE UU. IndyMac Bancorp, especializado en la concesi¨®n de hipotecas, quebr¨® la pasada madrugada. Las dudas sobre su solvencia espantaron a los inversores y las autoridades reguladoras no tuvieron m¨¢s remedio que hacerse con el control de una de las principales firmas hipotecarias de EE UU. La entidad -con 32.000 millones de d¨®lares (unos 20.500 millones de euros) en activos- protagoniza de esta manera el mayor colapso de un banco desde el derrumbe de American Savings & Loan Association, en 1988.

El origen de esta situaci¨®n est¨¢ en unos comentarios del senador por Nueva York Charles Schumer, que la semana pasada expres¨® su preocupaci¨®n por el estado de la entidad. Tras las dudas del senador, en los ¨²ltimos d¨ªas los ahorradores retiraron m¨¢s de 1.300 millones de d¨®lares de sus cuentas, lo que aboc¨® al grupo a la quiebra "por la crisis de liquidez", explic¨® John Reich, director de la Oficina de Supervisi¨®n de Entidades de Ahorro y Pr¨¦stamo (OTS, en sus siglas en ingl¨¦s). La bancarrota de IndyMac se convierte as¨ª en la tercera mayor de la historia financiera de EE UU, en una lista que encabeza el Continental Illinois National Bank and Trust desde el a?o 1984. Las 33 sucursales del banco permanecer¨¢n cerradas hasta ma?ana, y reabrir¨¢n bajo el nombre de IndyMac Federal Bank.

Pero el caso de este banco californiano puede quedarse en una an¨¦cdota a la vista de los sucedido esta semana en Wall Street. Si las condiciones del mercado hipotecario y de la vivienda se siguen deteriorando, en Estados Unidos puede haber v¨ªctimas ilustres en el sector financiero. Los rumores de insolvencia se ciernen ahora sobre Fannie Mae y Freddie Mac, dos entidades semip¨²blicas que garantizan la mitad de las hipotecas concedidas en EE UU, el equivalente a unos 5,3 billones de d¨®lares. Sus t¨ªtulos est¨¢n en ca¨ªda libre y en la ¨²ltima semana han perdido la mitad de su capital.

Wall Street quiere escribir ahora el pr¨®ximo cap¨ªtulo de la crisis. Los inversores reclaman al Departamento del Tesoro que salga al rescate de los dos bancos, que fueron creados por el Gobierno estadounidense para facilitar a los ciudadanos con bajos ingresos la compra de una vivienda a un precio asequible. Eso les convierte en una pieza clave del sector inmobiliario, del sistema financiero de EE UU y de la econom¨ªa en su conjunto.

En la coyuntura actual, la Casa Blanca necesita que Fannie y Freddie sigan garantizando las hipotecas que conceden los bancos ante la debacle del mercado inmobiliario. La incertidumbre sobre el estado financiero de estas dos entidades es notable. El debate est¨¢ ahora en ver si bastar¨¢ con que las dos compa?¨ªas recauden el capital necesario para seguir operando, o si ser¨¢ necesaria la acci¨®n decidida de la Casa Blanca y el Congreso para contener la hemorragia, bien por la v¨ªa de la inyecci¨®n de capital o con una nueva toma de control.

Los analistas ven dif¨ªcil que los dos grupos financieros sean capaces de hacerse con m¨¢s capital, a la vista del deterioro que est¨¢n sufriendo sus acciones. Fannie perdi¨® durante el ¨²ltimo a?o un 80% de su valor, mientras que la ca¨ªda de Freddie se eleva a casi el 90% en ese periodo.