El pop-rock del Kremlin
El Kremlin ha cambiado de signo musical, ha virado del pop al rock, si es que el cambio de Vlad¨ªmir Putin por Dimitri Medv¨¦dev ha sido de verdad un viraje, y no un montaje.
En 1979, Vlad¨ªmir Putin era esp¨ªa de la KGB, y realizaba oscuras tareas en Alemania del Este; seg¨²n Vlad¨ªmir Usoltev, que era su mancuerna de espionaje y hoy, casualmente, es un pr¨®spero empresario, Putin pasaba sus ratos libres oyendo m¨²sica pop de baja estofa y en el trabajo, mientras ultimaba la oscura tarea que tocaba ese d¨ªa, canturreaba cancioncillas de ABBA o los Bee Gees. Dif¨ªcilmente podr¨ªamos concebir un soundtrak m¨¢s estrafalario: el esp¨ªa extrae la verdad al enemigo, a fuerza de apretones en los test¨ªculos, mientras silba los compases de Super Trouper.
Cualquier analista pol¨ªtico agudo pod¨ªa haber previsto el viraje del pop al rock en el Kremlin, si hubiera observado la alineaci¨®n del concierto que se ofreci¨® el a?o pasado con motivo del Foro Econ¨®mico Internacional de San Petersburgo: los restos de los Bee Gees, para darle gusto a Putin; y lo que queda de los Scorpions, para agasajar a su delf¨ªn, Dimitri Medv¨¦dev, que un a?o m¨¢s tarde estar¨ªa celebrando su triunfo arrollador en las elecciones presidenciales rusas, con un concierto de los a?ejos Deep Purple que en 1979 era su grupo de cabecera, precisamente cuando su mentor silbaba el Super Trouper en los oscuros callejones de Dresde; la cosa ten¨ªa su m¨¦rito, porque en esos a?os la m¨²sica de Deep Purple estaba prohibida en la Uni¨®n Sovi¨¦tica, por imperial y extranjerizante, y hab¨ªa que o¨ªrla de manera clandestina, es decir, con cascos y sin hacer mucho aspaviento.
Dimitri Medv¨¦dev, o Dima, como le llama Putin en privado y en un famoso best seller de t¨ªtulo First Person, es un tecn¨®crata de la era poscomunista, tiene 42 a?os y su experiencia pol¨ªtica se reduce al ¨²ltimo lustro que ha pasado junto a Putin. Al margen de los Scorpions, que fue el primer fanatismo que se le conoci¨®, la sant¨ªsima trinidad musical de Dima est¨¢ compuesta por Led Zeppelin, que deber¨ªa ser el padre; Deep Purple, que tendr¨ªa que ser el hijo, y Black Sabbath, la otra tercera parte, que no puede ser otra cosa que el esp¨ªritu santo.
Ian Gillan, cantante de Deep Purple, esa banda que ahora toca en el Kremlin cada vez que a Dima le da por festejar algo, declar¨® recientemente a la revista Bloomberg: "Se notaba en su mirada la felicidad que le produc¨ªa estar con nosotros; es nuestro fan".

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.