El Supremo cierra el c¨ªrculo
La sentencia del 11-M da una explicaci¨®n coherente, razonada y completa a lo ocurrido en los trenes, avala a la Audiencia Nacional y entierra definitivamente el bulo conspirativo
La sentencia dictada por la Sala Segunda del Supremo en relaci¨®n con los atentados del 11-M establece con claridad meridiana la naturaleza yihadista de sus autores -una c¨¦lula independiente y diferente inspirada en la doctrina de Al Qaeda-, recuerda todo el proceso por el que el ex minero Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras proporcion¨® m¨¢s de 200 kilos de Goma 2 de Mina Conchita al jefe operativo del grupo terrorista, Jamal Ahmidan, El Chino, y cierra el c¨ªrculo con la confecci¨®n de las bombas en la casucha de Morata de Taju?a, su colocaci¨®n en los trenes y el suicidio del grupo en Legan¨¦s. Un razonamiento l¨®gico, basado en las pruebas del sumario, de c¨®mo ocurri¨® todo, en el que no caben teor¨ªas ex¨®ticas, fabulosas conspiraciones o manipulaciones como las difundidas por El Mundo y la Cope. ETA no aparece en ninguna fase de preparaci¨®n o ejecuci¨®n de los atentados, como a algunos les hubiera gustado, tampoco hay oscuras tramas policiales o de servicios secretos que habr¨ªan transportado cad¨¢veres congelados de islamistas al piso de Legan¨¦s el 3 de abril, ni la famosa mochila de Vallecas fue colocada para derribar el Gobierno de Aznar. Adi¨®s a los frikis y conspirativos.
La sentencia del Supremo es t¨¦cnica y plena de sentido com¨²n, razona sobre los indicios y las pruebas y hace las deducciones e inferencias l¨®gicas. Como en todos los atentados, y especialmente en los que varios de sus autores mueren, siempre hay una parte que nunca llegar¨¢ a ser conocida hasta el m¨¢s m¨ªnimo detalle, porque a pesar de los adelantos cient¨ªficos no siempre se deja huella gen¨¦tica o dactilar por todos los sitios por los que se pasa o simplemente porque los muertos se han llevado el secreto a la tumba.
Con todo, de las pruebas existentes en el sumario, la Audiencia, primero, y el Supremo, despu¨¦s, han dado una explicaci¨®n coherente, razonable y completa. No s¨®lo eso sino que lo han hecho con todo rigor porque incluso han absuelto a cuatro de los condenados por entender que las pruebas contra ellos no eran suficientes o se hab¨ªan obtenido vulnerando algunos de sus derechos fundamentales. Muchas falsedades se han quedado estos a?os por el camino. Las sentencias de la Audiencia y el Supremo las aniquilan.
MENTIRAS DESENMASCARADAS. "Caravana de la muerte"
Entre las mentiras desenmascaradas figura la de los etarras de la llamada caravana de la muerte. Algunos de los que ahora dicen lo contrario proclamaron con pasi¨®n que los etarras Gorka Vidal e Irkus Vadillo que fueron detenidos en Ca?averas (Cuenca) el 29 de febrero de 2004 con m¨¢s de 500 kilos de explosivos ten¨ªan relaci¨®n y hab¨ªan colaborado con los yihadistas de la c¨¦lula de Legan¨¦s porque ese mismo d¨ªa Jamal Ahmid¨¢n, El Chino, jefe operativo del grupo de islamistas, volv¨ªa de Asturias con la Goma 2 de Mina Conchita. Ello aderezado con que Abdelkrim Bensmail, preso en la prisi¨®n de Villabona (Asturias) y compa?ero de Allekema Lamari, uno de los suicidas de Legan¨¦s, ten¨ªa un papel con la direcci¨®n del etarra Henri Parot en la c¨¢rcel de C¨®rdoba.
Investigado el tema hasta la extenuaci¨®n, result¨® que no hubo ni una m¨ªsera llamada entre los m¨®viles utilizados por los yihadistas y los de los etarras. El explosivo incautado no era Goma 2 ECO o EC, las dinamitas robadas en Mina Conchita, sino 500 kilos de cloratita, 32 de Titadyn y 90 metros de pentrita o cord¨®n detonante. La ruta de los etarras no iba a Morata de Taju?a, donde estaban los yihadistas, como dijo El Mundo el 19 de noviembre de 2004, sino a un pol¨ªgono industrial del corredor del Henares. Vadillo y Vidal comparecieron en el juicio y se burlaron de la fabulosa teor¨ªa. Tambi¨¦n Parot rechaz¨® cualquier vinculaci¨®n con los islamistas. Etarras y yihadistas no ten¨ªan nada en com¨²n salvo la absoluta falta de respeto que los asesinos sienten por sus v¨ªctimas.
Ahora el Supremo lo deja m¨¢s claro, si cabe. Los atentados del 11-M fueron cometidos por una c¨¦lula independiente sin dependencia jer¨¢rquica de otras, inspirada en las doctrinas de Al Qaeda, como se aprecia en las reivindicaciones encontradas en el desescombro del piso de Legan¨¦s. Su radicalismo religioso y su comportamiento endog¨¢mico descarta que ETA hubiera podido colaborar con ellos. La sentencia del Supremo afirma que Trashorras conoc¨ªa ese fundamentalismo, puesto que el 26 de febrero de 2004, El Chino justific¨® los atentados a las Torres Gemelas y a?adi¨® que estaban "muriendo inocentes en Irak con el env¨ªo de tropas espa?olas por parte de Aznar".
EL FALSO TEMPORIZADOR. Un programador de lavadoras
Tambi¨¦n qued¨® desenmascarada la impostura del llamado Segurtasun Tenporizadorea. "La Polic¨ªa hall¨® un temporizador como los que usa ETA en el local de un imputado en el 11-M. Los agentes de la UCIE encontraron un ST en el taller del islamista que se afili¨® al PSOE", titul¨® El Mundo, a todo trapo, el 27 de junio de 2006. La realidad es un verdadero fastidio, porque lo realmente encontrado no era un Segurtasun Tenporizadorea, o ST, uno de los ingenios utilizados por ETA para activar sus bombas, sino un STA MEC 24H, es decir un programador de lavadoras fabricado por la empresa Remle, de repuestos de electrodom¨¦sticos, que se vend¨ªa por 18,57 euros. Ahora ser¨¢ m¨¢s caro. Lo utilizaba el casero del inmueble, Mohannad Almallah Dabas, al que, por si todav¨ªa hubiera alguna duda, el Supremo ha absuelto de pertenencia a banda terrorista.
EL TEL?FONO DE EL CHINO. El etarra que no lo era
Entre las manipulaciones que tambi¨¦n fueron desenmascaradas, como la del caso de Oskar P¨¦rez. Los conspirativos trataron de hacer ver que entre el tr¨¢fico de llamadas de los yihadistas del 6 de marzo de 2004, es decir, cinco d¨ªas antes de los atentados de los trenes, un etarra llamado Oskar P¨¦rez hab¨ªa utilizado con su propia tarjeta, el tel¨¦fono m¨®vil que usaba el jefe operativo de la c¨¦lula islamista, Jamal Ahmidan, El Chino. Nuevo fiasco. El que hab¨ªa usado el tel¨¦fono de El Chino no fue un etarra condenado por quemar un autob¨²s en Basauri, como pretend¨ªan los conspirativos, sino una persona llamada ?scar Garc¨ªa P¨¦rez, un perito de una aseguradora catalana que reside habitualmente en Barcelona que estaba de viaje en Madrid y hab¨ªa pedido prestado un m¨®vil porque el suyo se le hab¨ªa ca¨ªdo al suelo y se le hab¨ªa roto. El Chino accedi¨®, pero cambiando la tarjeta para que al marroqu¨ª no le supusiera ning¨²n coste.
LOS EXPLOSIVOS. Proced¨ªan de Mina Conchita
La batalla sobre qu¨¦ explosivos estallaron en los trenes fue una de las m¨¢s intensas libradas por los conspirativos, porque de ella depend¨ªa la vinculaci¨®n con ETA. Se acredit¨® que se robaron m¨¢s de 200 kilos de Goma2 de Mina Conchita y la prueba pericial demostr¨® que todo el explosivo intacto encontrado en todos los escenarios del 11-M -Renault Kangoo, casa de Morata, mochila de Vallecas, piso de Legan¨¦s y artefacto contra el AVE en Mocej¨®n- es Goma 2 Eco procedente de la citada mina. Tambi¨¦n se prob¨® que en 22 de los 23 focos de las explosiones hab¨ªa ftalato de dibutilo, un componente exclusivo de la Goma 2 y no se tiene noticia ni indicio de que alguien haya echado en falta ni un cartucho de Titadyn.
El Supremo es contundente, bas¨¢ndose en los informes periciales dice: "En todos los focos de los trenes han aparecido restos de componentes de Goma 2 ECO, que es la dinamita utilizada en Mina Conchita, especialmente el dibutilftalato en un porcentaje superior al 1%". (...) "Est¨¢ acreditado que Trashorras proporcion¨® dinamita procedente de Mina Conchita a Jamal Ahmidan. (...) Es razonable, por lo tanto, concluir que la dinamita proporcionada por Trashorras a Jamal, Goma 2 ECO procedente de Mina Conchita, fue utilizada por ¨¦ste en los atentados del 11 de marzo".
"Aunque el Tribunal no descarte la utilizaci¨®n de otra clase de dinamita, afirma que se ha utilizado Goma 2 ECO", dice el Supremo, que concluye que de la inspecci¨®n ocular en la mina "tambi¨¦n resulta que esa otra dinamita podr¨ªa haber sido Goma 2 EC, igualmente procedente de Mina Conchita".
CAD?VERES CONGELADOS. Un bulo m¨¢s
Las pruebas derribaron tambi¨¦n el delirante bulo de que los siete miembros de la c¨¦lula yihadista autora de los atentados no se suicidaron el 3 de abril de 2004 en Legan¨¦s, sino que una oscura trama policial llev¨® hasta all¨ª los cad¨¢veres congelados y los hicieron explotar, junto con el geo Javier Torronteras, con la supuesta finalidad de derribar el Gobierno de Aznar, cuando precisamente los mandos policiales hab¨ªan sido nombrados por el Ejecutivo del PP y las elecciones de dos semanas antes hab¨ªan dejado a los populares en la oposici¨®n.
LA MOCHILA DE VALLECAS. El Supremo avala el hallazgo
La Audiencia Nacional estableci¨® que la llamada mochila de Vallecas apareci¨® en una de las bolsas en las que se guardaron los efectos recogidos en la estaci¨®n de El Pozo. Aunque su contenido pudo conducir la investigaci¨®n en un determinado sentido, el Supremo recuerda que en el desescombro de Legan¨¦s apareci¨® dinamita y detonadores de Mina Conchita, y cintas con las grabaciones de los comunicados de reivindicaci¨®n de los atentados, por lo que hab¨ªa otras pruebas independientes que conduc¨ªan en la misma direcci¨®n.
Y todo ello en la misma semana en la que la Audiencia de Madrid ha revolcado a los conspirativos en el caso del ¨¢cido b¨®rico, declarando que los mandos policiales no cometieron falsedad. Todo un descalabro.
Es una l¨¢stima que en estas materias no haya controles antidopaje. Si esto fuera como en el Tour, los habr¨ªan ya echado a todos por tramposos.
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