?Satisfechos?

Uno tiene que estar satisfecho cuando hace todo lo que puede. Es as¨ª, no hay que darle m¨¢s vueltas. Sin embargo, a pesar de estarlo, no puedo negar que estoy tambi¨¦n en un estado que sin llegar a la decepci¨®n, se le aproxima ligeramente.

Hablo de m¨ª y de lo que he sentido hoy en la pancarta de los ¨²ltimos 400 metros a la meta; no en el Tour, no en Alpe d'Huez, sino en la Vuelta a Sajonia, donde he comenzado hoy a correr. He atacado antes del ¨²ltimo kil¨®metro. Soplaba un fuerte viento de cara y la carretera picaba ligeramente hacia arriba, por lo tanto la oportunidad era buena para sorprender a los velocistas. Pero he arrancado demasiado lejos y, a pesar de que he abierto un hueco interesante, a unos 500 metros del final he sentido algo as¨ª como un "corte de inyecci¨®n". He comenzado a perder velocidad, y para lo ¨²nico que me ha servido el ataque ha sido para ver el sprint desde una posici¨®n privilegiada. Otra vez ser¨¢.

Lo mismo he sentido cuando una vez en el autob¨²s hemos visto la ascensi¨®n de Alpe d'Huez, la m¨ªtica subida de las 21 curvas. Yo ten¨ªa todas mis expectativas puestas en Denis. Ayer a la noche recib¨ª un sms: "Est¨¢ tranquilo, no ha querido arriesgar, ma?ana es su d¨ªa". Vaya, pens¨¦, Denis no es de los que amaga, sino de los que da. As¨ª que habr¨¢ que confiar en ¨¦l, me dije.

Entonces cuando le vi saltar al primer ataque de Sastre nada m¨¢s comenzar la ascensi¨®n, me dije: ya est¨¢, ahora ir¨¢ a por todas. Pero no, las piernas no le funcionaban, y tuvo que resignarse a ver marchar al abulense. Aqu¨ª pondr¨ªa un asterisco para remarcar lo curioso de la situaci¨®n: un compa?ero del l¨ªder al asalto del liderato; curiosa y supongo que pol¨¦mica t¨¢ctica la del CSC, tuvo que haber sido interesante la reuni¨®n t¨¦cnica de la ma?ana. Termino aqu¨ª el asterisco. Pero cuando vi que ni siquiera era capaz de aguantar el ritmo me tem¨ª lo peor. Se descolg¨® de ellos y vio c¨®mo sus opciones de subir a lo m¨¢s alto en Par¨ªs -o a lo m¨¢s bajo, siempre sin bajar del podio- se iban cuesta arriba. La llamada "monta?a de los holandeses" cavaba su tumba, y ¨¦l parec¨ªa que poco pod¨ªa hacer. Menos mal que se recuper¨® y consigui¨® reintegrarse en ese grupo.

No se c¨®mo se sentir¨¢ Denis ahora mismo. Quiz¨¢ est¨¦ en un estado parecido al m¨ªo, quiz¨¢, pues al menos ha salvado el momento de crisis. Lo que no creo que est¨¦ es euf¨®rico. Para eso ya est¨¢ Sastre, que despu¨¦s de su espectacular victoria ya estar¨¢ rumiando el soniquete que tantas veces habr¨¢ o¨ªdo: "el que sale vestido de amarillo de Alpe d'Huez, lo lleva hasta Par¨ªs". Toda una vida so?ando con ese logro, y lo consigue en el lugar en el que la leyenda le es m¨¢s favorable. No es mal bot¨ªn Carlitos, desde aqu¨ª mi enhorabuena. Aunque a m¨ª al que me gustar¨ªa ver en esa situaci¨®n es a Menchov, no nos enga?emos. Pero parece ser que este a?o no va a poder ser.

Ahora queda esperar al s¨¢bado para ver el acto final. Sabremos por fin qui¨¦n ser¨¢ el ajustado ganador de este interesante Tour, y ya de paso, comprobaremos si la leyenda es o no cierta.