La banda mat¨® a Carrasco al fallar el secuestro de un edil

Los escoltas salvan vidas. Benjam¨ªn Atutxa, edil socialista en Eibar (Guip¨²zcoa), estuvo vigilado por los liberados (a sueldo) del comando Vizcaya de ETA entre septiembre y diciembre de 2007, entre ellos por su jefe, Arkaitz Goikoetxea, detenido esta semana en la operaci¨®n de la Guardia Civil contra el comando etarra m¨¢s activo tras la vuelta de ETA a la violencia.

Los terroristas ten¨ªan orden del jefe de los comandos, Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki -que previamente les hab¨ªa adiestrado en Francia en el manejo de armas y explosivos-, de intentar secuestrar al edil para presionar al Ejecutivo de Zapatero. Esto al menos es lo que ha declarado a los agentes del instituto armado el propio cabecilla del complejo Vizcaya, la red tejida por ETA que ha sostenido la campa?a de la banda desde agosto de 2007.

Los tranquilizantes hallados en los dos zulos cerca de Ezcaray (La Rioja) estar¨ªan destinados a sedar al secuestrado. Fue el propio magistrado Baltasar Garz¨®n el que pregunt¨® el jueves, cuando trasladaron en helic¨®ptero a Goikoetxea al zulo de Pazuengos, para qu¨¦ quer¨ªan las jeringuillas y un estuche de pl¨¢stico con frasquitos de sedantes hallados dentro de un bid¨®n escondido en el agujero de Pazuengos.

Las fuentes de la investigaci¨®n aseguran que en ese momento Goikoetxea habl¨® de un secuestro, pero no dio el nombre al juez. Todo esto sigue en investigaci¨®n. Las diversas declaraciones de Goikoetxea ante los agentes tienen fallos y contradicciones y deber¨¢n ser cotejadas hoy cuando pase a disposici¨®n de Garz¨®n, encargado de la operaci¨®n contra el comando Askatu Haizea, nombre del grupo que operaba en Vizcaya.

Lo ¨²nico contrastado es que tras el fracaso del anterior proceso negociador, ETA quer¨ªa vengarse del Gobierno socialista. Los liberados, probablemente junto a la activista que fue detenida ayer en Francia, Olga Comes, comprobaron el domicilio del edil, su trabajo y sus costumbres para secuestrarlo. Y comprobaron tambi¨¦n que era disciplinado y llevaba escolta, como viene exigiendo el PSE a sus cargos desde el fin de la tregua.

Pero el tiempo se echaba encima y ETA ten¨ªa que dar un golpe de efecto contra los socialistas. Y al no poder convertir a Benjam¨ªn Atutxa en un nuevo Miguel ?ngel Blanco -el edil del PP de Ermua secuestrado y asesinado en julio de 1997- la direcci¨®n de ETA fue a lo f¨¢cil. Entre enero y el 9 de marzo pasado, fecha de las ¨²ltimas elecciones generales en las que Zapatero volvi¨® a ganar, la ejecutiva etarra orden¨® buscar un objetivo mucho m¨¢s asequible. Y lo f¨¢cil era atentar contra un ex cargo socialista sin escolta: Isa¨ªas Carrasco, que hab¨ªa sido concejal de Mondrag¨®n, reducto del abertzalismo radical. Los expertos en bal¨ªstica siguen chequeando las cuatro armas cortas intervenidas por la Guardia Civil a Goikoetxea (un rev¨®lver y una pistola) y las dos pistolas que ten¨ªa el presunto miembro legal Gaizka Jare?o, arrestado el martes en Elorrio. Tras descartar el rev¨®lver, los expertos analizan las pistolas.

Con todo, las fuerzas de seguridad han mantenido estos meses que el terrorista que dispar¨® contra Carrasco era un experto pistolero, diferente de los etarras del Vizcaya.