Seis comunidades se al¨ªan contra el modelo catal¨¢n de financiaci¨®n
Exigen que el n¨²mero de habitantes tenga menos peso como criterio de reparto
Noroeste frente a Este, o Atl¨¢ntico contra Mediterr¨¢neo. El Gobierno no ha logrado evitar la formaci¨®n de bloques en la negociaci¨®n del nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica y la reforma encara su recta final con posiciones enfrentadas, aparentemente irreconciliables y con un lenguaje que sube de tono. Seis comunidades aut¨®nomas de distinto signo pol¨ªtico escenificaron ayer la estrategia com¨²n del frente Noroeste -Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y Le¨®n, Arag¨®n y Extremadura- con un rechazo a la limitaci¨®n del mecanismo de solidaridad que propone Catalu?a. Y con un ¨®rdago al Gobierno.
El PSC amenaz¨® con pedir el cupo vasco si no se atienden sus demandas
La propuesta del Ejecutivo se basa en reforzar como criterio de reparto la poblaci¨®n, ante los cambios experimentados en los ¨²ltimos a?os por el boom migratorio. El frente Atl¨¢ntico subray¨® ayer que para dar luz verde al nuevo sistema la poblaci¨®n deber¨¢ pesar "menos que en el actual modelo" en el reparto de los fondos.
En concreto, la poblaci¨®n deber¨¢ ponderar "entre un 70% y un m¨¢ximo del 80%", complementada por otras variables como envejecimiento, dispersi¨®n, extensi¨®n geogr¨¢fica, orograf¨ªa e insularidad, explic¨® el consejero asturiano Jaime R¨¢bago en un encuentro en La Granda (Goz¨®n, Asturias) con los responsables de Hacienda de las seis comunidades. "No se puede revisar el modelo atendiendo s¨®lo a la poblaci¨®n", dijo. En el sistema aprobado en 2001, con datos de 1999, la poblaci¨®n pesaba en torno a un 90%.
Las posturas est¨¢n cada vez m¨¢s alejadas. El presidente andaluz, Manuel Chaves, ha asegurado que "no se trata de cambiar el modelo, sino de mejorarlo", lo que desde Catalu?a se interpreta como un lampedusiano "que todo cambie para que todo siga igual". Y los partidos catalanes vuelven a la carga: el PSC amenaz¨® ayer con pedir el concierto econ¨®mico vasco para Catalu?a si la reforma no atiende las demandas catalanas. Las seis comunidades reunidas en Asturias calificaron esa reacci¨®n de "pataleta" y denunciaron que la propuesta catalana de limitar la solidaridad a sanidad, educaci¨®n y servicios b¨¢sicos "rompe las costuras de la Constituci¨®n", dijo el consejero extreme?o ?ngel Franco (PSOE). "Extremadura va a estar radicalmente en contra de un modelo que s¨®lo garantice la suficiencia en los servicios fundamentales y no en el resto de las competencias transferidas, como ha sucedido hasta ahora".
Catalu?a se alinea con la Comunidad Valenciana y Baleares en las demandas relativas a reforzar el peso de la poblaci¨®n. La consejera de Hacienda de Castilla y Le¨®n (PP), Pilar del Olmo, reiter¨® que los cambios en la poblaci¨®n explican como m¨¢ximo el 80% de las necesidades de financiaci¨®n de las autonom¨ªas, y exigi¨® que se conceda m¨¢s peso al envejecimiento, la dispersi¨®n y la extensi¨®n geogr¨¢fica, as¨ª como que "est¨¦n garantizados los recursos para todos los servicios p¨²blicos, no s¨®lo para los fundamentales". "Vamos a votar no a todo lo que suene a nivelaci¨®n parcial y a cualquier cambio en el modelo que quiera imponerse bilateralmente y no por unanimidad. El modelo actual [negociado por PP y CiU en 2001] se aprob¨® por unanimidad", record¨® Del Olmo. La reforma que propone el Gobierno afecta a las comunidades de r¨¦gimen com¨²n, pero una vez abiertas las hostilidades nadie queda ya a salvo de la disputa.
El frente Atl¨¢ntico reclam¨® que la solidaridad, a diferencia de ahora, "se extienda tambi¨¦n a las comunidades forales". "El cupo vasco fue una decisi¨®n colectiva y hay que respetarla, pero ha llegado el momento de decir que es injusto que las comunidades forales tengan el doble de financiaci¨®n por habitante y eso les permita competencia tributaria desleal, con bajadas fiscales que sufren las comunidades lim¨ªtrofes", dijo el consejero c¨¢ntabro ?ngel Agudo.
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