"Mi oro fue la bomba"
Jan Abascal tiene la misma piel tostada por el sol que cuando navegaba hace 30 a?os. La barba se le ha emblanquecido, y se mueve por el Centro Especializado de Alto Rendimiento (CEAR) de vela de Santander como un viejo lobo de mar. Su oro en Mosc¨² junto a Miguel Noguer, una haza?a para la ¨¦poca, fue el primero de los 10 de la vela ol¨ªmpica espa?ola para un total de 15 medallas: es el deporte m¨¢s prol¨ªfico en los Juegos. Como director del CEAR y director de preparaci¨®n ol¨ªmpica, espera que sus pupilos aumenten su legado en Qingdao.
Pregunta. ?C¨®mo recuerda aquel oro de Mosc¨² 80?
Respuesta. Los Juegos Ol¨ªmpicos son para un deportista lo m¨¢ximo. Los Mundiales son importantes, pero la gente luego no se acuerda de ellos, y lo mismo pasa con los deportistas. Yo he ganado un Mundial y no es la misma sensaci¨®n por la repercusi¨®n que tienen. En aquella ¨¦poca mi oro fue la bomba, porque era el primero ol¨ªmpico de Espa?a en la ¨¦poca moderna.
La vela en los Juegos |
Pregunta. El barco con el que compiti¨®...
Respuesta. ?No lo ha visto? Lo tengo ah¨ª colgado. Es un barco con cubierta de madera y casco de carbono, ya de tecnolog¨ªa avanzada para la ¨¦poca. Era un barco de la federaci¨®n, se vendi¨®... y lo recuper¨¦. Estaba algo estropeado, as¨ª que lo restaur¨¦.
P. ?Y Miguel Noguer?
R. Todav¨ªa sigue navegando. Siempre tuvo una forma f¨ªsica estupenda y navega en Laser, que es un barco duro, y gana campeonatos de veteranos. Es odont¨®logo en Barcelona.
P. Los regatistas tienen ahora psic¨®logo, m¨¦dico, preparador f¨ªsico... ?C¨®mo era en 1980?
R. No tiene nada que ver. Hoy hay un grado de profesionalismo importante, se pueden dedicar a eso. Nosotros ten¨ªamos que trabajar para poder navegar. Naveg¨¢bamos las fiestas, los s¨¢bados, los domingos y alg¨²n d¨ªa salteado. Hoy nuestro equipo navega de lunes a viernes y descansa los fines de semana. Yo no he tenido nunca entrenador fijo. ?ramos autodidactas y cada d¨ªa que sal¨ªas al mar ten¨ªas que sacar tus conclusiones. Nos faltaba ayuda exterior. Hoy cuidamos los m¨ªnimos detalles porque antes la t¨¦cnica era suficiente para marcar una diferencia en el agua. Hoy hay tanta igualdad, todos son tan buenos, que peque?as tonter¨ªas cambian los resultados. Todos tienen su entrenador, preparador f¨ªsico, cuidan su nutrici¨®n, un psic¨®logo cuando existen conflictos o para hacer que la gente se crea mejor de lo que es, un meteor¨®logo, un especialista en reglamentos...
P. ?C¨®mo era su vida?
R. Aqu¨ª en Santander no hab¨ªa nada. El centro de entrenamiento de la federaci¨®n estaba en Palam¨®s y me fui a vivir all¨ª. Yo pensaba: 'Aqu¨ª navego s¨®lo los s¨¢bados y salgo por ah¨ª y se me da bien'. Y prob¨¦ a dedicar unos a?os a la vela. En aquella ¨¦poca trabajaba dando cursos y clases de vela. Me he recorrido toda Espa?a ense?ando a ni?os que luego han sido campeones.
P. ?Y econ¨®micamente?
R. Era muy dif¨ªcil. Mi padre me ha costeado todo hasta que gan¨¦ un Campeonato del Mundo. No hab¨ªa ayudas de nada. Hoy a quien empieza a destacar en su tierra le llevamos a concentraciones, tiene ayudas para que vaya a las regatas... Yo eso no lo he tenido nunca. Mi padre era mi patrocinador. Era carpintero y eso es lo que me permiti¨® navegar porque ¨¦l hac¨ªa barcos. Pod¨ªa tener un barco porque ¨¦l me lo hac¨ªa.
P. ?C¨®mo empez¨® a navegar?
R. Estaba todo el d¨ªa en el astillero, me gustaban los barcos y mi padre me hizo uno. Entonces no hab¨ªa escuelas de vela. Me puso un salvavidas, me subi¨® al barco y me dijo 'as¨ª, as¨ª y as¨ª'.
P. ?C¨®mo cambi¨® su vida aquella medalla?
R. Me fui a Palam¨®s pensando en estar unos a?os, en 1975. Hice los Juegos de Montreal sin terminar los estudios. Yo pensaba en ir unos a?os y volverme. Luego pens¨¦ en Los ?ngeles. Intent¨¦ hacer oposiciones para c¨¢tedras de instituto, de f¨ªsica y matem¨¢ticas, pero siempre me cog¨ªa mal, y pens¨¦ que en el mundo de la vela sab¨ªa cosas y en el otro iba a ser uno m¨¢s del mont¨®n. El primer oro espa?ol tuvo mucha repercusi¨®n, yo era alguien conocido. Ahora los ni?os no saben qui¨¦n soy.
P. ?Y la llegada a Espa?a?
R. En el aeropuerto de Barcelona me esperaba todo el mundo. ?En la vida en la vela en Espa?a se hab¨ªa visto una pancarta! '?A qui¨¦n est¨¢n esperando?', pens¨¦. Y en Santander fue incre¨ªble, el club mar¨ªtimo estaba lleno a tope. Me llevaron en un Cadillac.
P. Aquello cambi¨® cierta mentalidad en el deporte espa?ol.
R. Hoy estamos acostumbrados a decir que venimos de los Juegos con 15 medallas, pero hab¨ªa ¨¦pocas en que lo normal era no traer ninguna. Miguel y yo abrimos un camino.
P. ?D¨®nde guarda la medalla?
R. En casa. Al a?o siguiente de ganarla me la robaron. Cog¨ª un disgusto terrible. Luego, Juan Antonio Samaranch, que era presidente del COI, me envi¨® otra, que no es lo normal. Ahora tengo la B, pero he aprendido que lo importante es el recuerdo. Me acuerdo del d¨ªa que terminamos la pen¨²ltima prueba... Miguel y yo nos dimos un buen abrazo, emocionados, porque sab¨ªamos que ¨¦ramos campeones.
P. Fueron los Juegos del boicot estadounidense.
R. Tuvimos mala suerte por el boicot, que era una estupidez. En los a?os anteriores en los Mundiales hab¨ªamos sido cuartos, terceros y segundos, y entonces ten¨ªamos que ganar. El boicot no nos favoreci¨® nada, porque salvo Canad¨¢ no hab¨ªa pa¨ªses que nos pudieran hacer sombra. No fue ninguna ayuda, sino al rev¨¦s. El ambiente no era lo mismo. Cada uno de los Juegos es distinto. He pasado muchos, desde el 76 salvo Atlanta los he hecho todos. No se puede comparar la alegr¨ªa de Barcelona con Mosc¨², porque era un pa¨ªs triste, como Corea. Nos sorprend¨ªan muchas cosas en ese Mosc¨². Ten¨ªas todo el d¨ªa un comisario pol¨ªtico que no dejaba que se acercara nadie a ti, no pod¨ªas salir sin ¨¦l. Era un agobio. Los Juegos despu¨¦s de M¨²nich cambiaron. En Montreal te mov¨ªan en autobuses con polic¨ªas. En Mosc¨² no hab¨ªa armas, pero hab¨ªa tantos polic¨ªas que sal¨ªan a 15 por deportista. Los de Mosc¨² no fueron unos Juegos alegres.
P. ?Qu¨¦ opina del equipo espa?ol actual de vela?
R. Como grupo, es el mejor que hemos tenido nunca. Quiz¨¢ antes hemos tenido regatistas mejores, pero tantas opciones... No digo que vamos a ganar seis o siete medallas, pero s¨ª tenemos seis o siete opciones de medalla.
P. ?Y la elecci¨®n de Qingdao?
R. No son criterios deportivos los que deciden. China es una zona de expansi¨®n tur¨ªstica, y necesita promoci¨®n. Es mi ¨²nica explicaci¨®n. Fuimos a China a firmar un acuerdo de colaboraci¨®n y nos sorprendi¨® mucho que la base de entrenamiento de China no est¨¢ en Qingdao, sino a 200 kil¨®metros. Perdimos el inter¨¦s.
P. ?Le queda tiempo libre?
R. Poca cosa. Tengo un barquito. Me gusta salir a navegar a disfrutar de la naturaleza, el paisaje, la tranquilidad en medio del mar. Lo tengo a 200 metros del CEAR y lo uso muy muy poco. Volver¨¦ a navegar cuando pasen los Juegos.
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