Una aerol¨ªnea niega el viaje a Bolivia a un enfermo terminal de c¨¢ncer

El sue?o espa?ol -si ser inmigrante ilegal a 8.700 kil¨®metros de casa y dejar atr¨¢s a tres hijos puede llamarse sue?o- se ha convertido en una pesadilla para David Carlos Zapata Garnica y Maruja Arias Quiroga. Este matrimonio boliviano ya ha abandonado toda esperanza de prosperar en Espa?a, y s¨®lo quiere volver a Cochabamba para que ¨¦l, que tiene un c¨¢ncer de pleura y huesos con posible met¨¢stasis a otros ¨®rganos, pase el tiempo que le quede con sus hijos.

David Carlos Zapata desea volver a su pa¨ªs para morir en paz all¨ª

Con los ¨²ltimos ahorros y la ayuda de la familia, lo tienen todo preparado: los dos billetes de avi¨®n (m¨¢s de 2.400 euros) que les deben llevar de Madrid a Bolivia. Pero la compa?¨ªa Aerosur, que gestiona comercialmente este vuelo para Air Comet, incumpliendo la normativa, se niega a que embarquen. Le exige que presente un certificado m¨¦dico en el que se garantice que no va a morir durante el trayecto. La aerol¨ªnea argumenta que el viaje "puede ser perjudicial" para David Carlos y para la seguridad del vuelo. Pero ¨¦l s¨®lo ve que el tiempo pasa, que todav¨ªa est¨¢ bastante bien (s¨®lo necesita ox¨ªgeno y calmantes suaves), y que ya no tienen "nada que hacer en Espa?a", porque ni siquiera pueden "mandar dinero para la comida" de sus hijos.

De nada ha servido el certificado m¨¦dico que indica que el hombre "permanece estable" y que, "con la ayuda de ox¨ªgeno", se mantiene con un "94% de saturaci¨®n", muy cerca del 100% ideal en una persona sana. As¨ª lo afirma su m¨¦dico de primaria, Jos¨¦ Contreras, en un documento que la familia ha presentado a la compa?¨ªa. La negativa ha sido rotunda. Aerosur, compa?¨ªa a¨¦rea que opera en c¨®digo compartido con la aerol¨ªnea Air Comet, lo justificaba as¨ª ayer inicialmente: "El ox¨ªgeno puede suponer un problema de seguridad". Luego, cuando se record¨® a su portavoz que ¨¦sa no es la reglamentaci¨®n, a?adi¨® como inconveniente la posibilidad de que el pasajero pueda morir durante el vuelo.

El hecho de que David Carlos necesite ox¨ªgeno no debe suponer ning¨²n obst¨¢culo para volar, como confirma AENA (Aeropuertos Espa?oles y Navegaci¨®n A¨¦rea). La normativa, recuerda, permite llevar bombonas u otros medicamentos si un m¨¦dico los ha prescrito. Es m¨¢s, muchas veces la propia aerol¨ªnea facilita las botellas correspondientes, apuntan desde el organismo regulador de la navegaci¨®n a¨¦rea. Seg¨²n AENA, debe ser el m¨¦dico del interesado quien valore su estado de salud y determine si puede volar. Esta decisi¨®n, sentencia, no debe ser tomada nunca por la compa?¨ªa.

Aerosur se escuda en que AirComet exige un certificado m¨¦dico que diga textualmente que el hombre "no va a morirse durante el vuelo", algo que ning¨²n m¨¦dico puede asegurar, ya que, independientemente del c¨¢ncer, hay otros factores que pueden afectar incluso a personas absolutamente sanas. En Air Comet niegan que ¨¦ste sea el problema. "Cumplimos rigurosamente la normativa europea. Estamos verificando a¨²n los certificados del viajero y hay que tener en cuenta que el ox¨ªgeno se puede considerar, adem¨¢s de medicina, una mercanc¨ªa peligrosa", asegur¨® un portavoz. Aerosur, sin embargo, a?ade que el viajero precisa un certificado m¨¦dico que especifique qu¨¦ circunstancias precisa el enfermo para soportar 12 horas de vuelo. De momento, ninguno de los que David Carlos ha presentado -los que dicen que ¨¦l s¨®lo necesita Nolotil y ox¨ªgeno- les sirven.

Las compa?¨ªas se pasan la patata caliente. A ¨²ltima hora de la noche matizaron su decisi¨®n y aseguraron que todav¨ªa no est¨¢ del todo tomada. Pero la realidad es que David Carlos a¨²n no ten¨ªa entonces permiso para volar.

La compa?¨ªa no ha hecho ning¨²n tipo de valoraci¨®n del estado del enfermo. Ni siquiera le han visto -los billetes fueron comprados por un hermano de ¨¦l por Internet en Bolivia-, seg¨²n asegura la pareja. Mientras tanto, esperan en el hospital Cl¨ªnico de Madrid. "No tenemos dinero ni para alquilar una habitaci¨®n, y mi se?ora lleva un mes durmiendo en el sill¨®n para los acompa?antes", afirma el hombre. Su situaci¨®n es tan desesperada que dependen de las ayudas de los amigos y la familia (ella tiene una hermana en Madrid) para poder tomar "una botella de agua fr¨ªa o un refresquito" de vez en cuando. Por la noche, comparten la cena que el paciente recibe en el hospital. "Yo me tomo la sopa primero, y con lo que dejo cena ella".

Y, mientras tanto, aguardan. "Estoy desesperado", dice el hombre. El pr¨®ximo vuelo para Cochabamba de Aerosur sale, te¨®ricamente, ma?ana. Pero ya no conf¨ªan en que nadie les ayude. "Lo hemos intentado todo. No queremos dinero; los billetes ya los hemos pagado". Su miedo es tener que aplazar el vuelo otra vez.

La decisi¨®n de volverse a Bolivia la hab¨ªan tomado en mayo, cuando ella sufri¨® una hemorragia cerebral que le ha dejado secuelas que le impiden trabajar como limpiadora, que era el empleo que, sin papeles, hab¨ªa conseguido. ?l estaba empleado en la construcci¨®n, despu¨¦s de haber dejado su trabajo en una oficina en una empresa de telecomunicaciones en Cochabamba.

Ahora s¨®lo quieren volver para estar con su familia. Por lo menos, los hijos no han tenido que dejar de estudiar. Los mayores, de 20 y 19 a?os, estudian ingenier¨ªa petrol¨ªfera y electr¨®nica. La peque?a, de siete, est¨¢ en el colegio. Durante el a?o y medio que su padre lleva en Espa?a, y los dos que hace que emigr¨® su madre, han estado a cargo de otros familiares.

Un apoyo que no han encontrado en otros sitios. El matrimonio s¨ª esperaba alguna presi¨®n de su Embajada para que la compa?¨ªa a¨¦rea les admita. "Les hemos pedido que intercedan, pero nada", afirma la mujer. Este peri¨®dico intent¨® ayer hablar con la Embajada y el consulado de Bolivia en Madrid, pero a las 19.00 no hab¨ªa nadie que atendiera el tel¨¦fono. Tampoco han conseguido ayuda de la Cruz Roja ni del Gobierno espa?ol. "Como somos ilegales...".