"No hab¨ªa nadie que pudiera sentir verg¨¹enza"

"Tengo una silla y un asiento que no existen". Jorge viaj¨® desde Santander a Valencia el pasado jueves por la noche en compa?¨ªa de dos amigos. A las nueve de la ma?ana lleg¨® al circuito. Hab¨ªan comprado tres entradas por 420 euros cada una. "La tribuna 11 ya no est¨¢ orientada como en el plano sobre el que compramos las entradas y no tiene visibilidad". Jorge acudi¨® a la oficina de Valmor, la empresa organizadora del evento, en la calle del Doctor Lluch, junto a la comisar¨ªa de la Polic¨ªa Local. "Empleados de una subcontrata que no se responsabilizan de nada y que nos ofrecen entradas para la tribuna 7, de menos calidad y m¨¢s baratas, de 375 euros. Tambi¨¦n nos sugieren que pongamos una denuncia. Un desastre, no se ha presentado nadie de la organizaci¨®n, nadie que pudiera sentir verg¨¹enza".

Tras una visita a la Oficina del Consumidor, Jorge lleg¨® al circuito a las dos de la tarde. Hoy, anticipa, se presentar¨¢ a las ocho de la ma?ana para encaramarse a la ¨²ltima fila de la tribuna 11 y, "de pie en la silla, intentar ver lo m¨¢s que pueda". Es uno de los pocos aficionados que no ha aceptado el traslado a una zona por la que no pag¨®.

Las colas de aficionados descontentos ante la oficina de Valmor se ha mantenido dos d¨ªas consecutivos. En ese periodo de tiempo la organizaci¨®n ha registrado 375 reclamaciones por mala visibilidad. Tras comprobar el viernes que las quejas de los seguidores eran ver¨ªdicas, opt¨® por realojar en diferentes tribunas a esos aficionados. El primer objetivo, dicen, era reubicarlos en tribunas de igual calidad y precio. Adem¨¢s, en caso de que la tribuna fuera de menor coste, se abonar¨ªa la diferencia al cliente en cuesti¨®n, promet¨ªan. La mayor¨ªa de las quejas proced¨ªan de seguidores en la tribuna 11, justo enfrente del ya famoso puente giratorio que hay sobre la d¨¢rsena.

Mar¨ªa Jos¨¦, como Jorge, tambi¨¦n perdi¨® el viernes entre queja y queja. "Hab¨ªa pedido el d¨ªa en el trabajo y lo perd¨ª entero sin ver nada", apunt¨® esta madrile?a. Ella y sus amigos fueron ubicados en la tribuna 7. "Son unos asientos muy buenos y la pantalla es enorme. Hemos estado todo el d¨ªa all¨ª", dec¨ªa ya por la tarde. Pero, eso s¨ª, de devolverles la diferencia, nada de nada. "Tendremos que esperar a que la reclamaci¨®n llegue a la Oficina del Consumidor", deduc¨ªa. Si en un tiempo prudencial no reciben respuesta, presentar¨¢n la denuncia pertinente, reconoce, para que se les devuelvan a cada uno los 45 euros de diferencia.

Recibidas las protestas, la organizaci¨®n tuvo que encontrar la mejor soluci¨®n. Y la m¨¢s r¨¢pida. As¨ª, pese a la dif¨ªcil evoluci¨®n en la venta de las entradas, Valmor baj¨® las persianas a sus ventanillas cuando a¨²n quedaban 2.000 entradas por vender. "El viernes detuvimos la venta de las entradas que a¨²n nos quedaban para poder reubicar a la gente de las gradas que no ve¨ªan bien la carrera", reconoc¨ªa ayer Jorge Mart¨ªnez Aspar a este peri¨®dico.

"La tribuna 11 es un verdadero desastre. No se ve absolutamente nada", se?alaba Mar¨ªa Jos¨¦. "Estuve el viernes por la noche en la zona y s¨ª, es evidente que no se ve¨ªa bien", asumi¨® Aspar. En total, unas 1.000 personas han sido reubicadas en otras tribunas.

Entre el ir y venir de aficionados, visitantes y curiosos que ocupaban todo el tramo final de la avenida del Puerto, una docena de vecinos descontentos permanec¨ªan plantados en la esquina con la calle del Doctor J.J. D¨®mine sujetando una pancarta: El Grao no es un decorado, queremos un barrio digno.

"Siempre hay uno que tiene que dar la nota", coment¨® un visitante al paso de la pancarta. "El gran premio es bueno para el barrio y es bueno para la ciudad", reflexion¨® otro, "y ?qu¨¦ tienes que soportar?, ?un poco de ruido en un fin de semana de agosto?"