S¨¢nchez Gordillo denuncia un "trato vejatorio" en Tel Aviv
La Embajada no pudo facilitar su viaje porque el diputado no lo comunic¨®
El parlamentario andaluz y alcalde de Marinaleda, Jos¨¦ Manuel S¨¢nchez Gordillo, permanecer¨¢ en Israel un d¨ªa m¨¢s de lo deseado. Regresaba a Espa?a despu¨¦s de acompa?ar a un grupo de ni?os palestinos que volv¨ªan a los campos de refugiados de Cisjordania tras pasar unas vacaciones en Espa?a, pero los servicios de seguridad israel¨ªes le sometieron a un minucioso interrogatorio, ayer en el aeropuerto de Tel Aviv, y el legislador perdi¨® el avi¨®n. El diputado, que declar¨® sentirse "humillado", afirm¨® que fue sometido a "todo tipo de vejaciones, que incluyeron la obligaci¨®n de descalzarse, el registro abusivo de efectos personales y un largo interrogatorio sobre sus actividades". "Fue un interrogatorio", declar¨® a la agencia Efe, "m¨¢s propio de la Gestapo y de un r¨¦gimen fascista que de una democracia occidental".
La dilaci¨®n, muy probablemente, guarda relaci¨®n con las visitas efectuadas por S¨¢nchez Gordillo en Cisjordania. El parlamentario apunt¨® que hab¨ªa mantenido reuniones con dirigentes palestinos y explic¨® a los agentes israel¨ªes que "como autoridad pol¨ªtica no tiene por qu¨¦ dar explicaciones a militares de otro Estado". En Israel, sin embargo, este tipo de incidentes no se resuelven como en Europa. Los protocolos de seguridad priman sobre cualquier otra consideraci¨®n y sirven de paraguas a abusos de toda ¨ªndole.
Lo sucedido es m¨¢s que habitual. En el aeropuerto Ben Guri¨®n, pr¨®ximo a Tel Aviv, los interrogatorios a los pasajeros pueden prolongarse m¨¢s de una hora y versar sobre cualquier materia. Depende del destino del viajero, de las personas a las que haya visitado en Israel o los territorios ocupados, y, por supuesto, de su origen. Los ciudadanos de Jerusal¨¦n Este, pese a haber sido anexionada la mitad de la ciudad a Israel, optan en su inmensa mayor¨ªa por eludir el aer¨®dromo de Ben Guri¨®n y vuelan desde Amm¨¢n, la capital jordana. En alguna ocasi¨®n se ha preguntado a una mujer con qui¨¦n pas¨® la noche anterior, y m¨¢s habitual es que se obligue a las personas a desprenderse de su vestimenta hasta quedarse en ropa interior. Le ha llegado a suceder incluso a una diplom¨¢tica brit¨¢nica que se dirig¨ªa a una cita concertada en la Oficina del Primer Ministro israel¨ª. Acab¨® llorando.
Acompa?ado por Julio Rodr¨ªguez -presidente de la ONG Paz Ahora y conocedor de esos mecanismos de seguridad por sus frecuentes viajes a Israel y los territorios palestinos-, S¨¢nchez Gordillo present¨® un escrito en la embajada espa?ola en Tel Aviv en el que solicitan al Gobierno espa?ol que exprese su rechazo al Ejecutivo israel¨ª por la conculcaci¨®n de los derechos de parlamentarios electos. Aunque no tiene obligaci¨®n alguna, el diputado no sigui¨® el cauce habitual en los viajes de dignatarios extranjeros a Israel.
"Lo aconsejable es que cuando se trata de un cargo electo, de una autoridad del Gobierno, auton¨®mica o municipal se avise a la Embajada. De ese modo, no suele haber problemas. Otros grupos de cooperantes, por grandes que sean, nos advierten de su viaje y preparamos su retorno para que no haya dificultades", afirm¨® ayer un funcionario de la legaci¨®n diplom¨¢tica. S¨¢nchez y Rodr¨ªguez no advirtieron a la Embajada de su retorno y pasaron una noche m¨¢s en Oriente Pr¨®ximo.
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