Democracia e indigenismo en Am¨¦rica
Una de las paradojas actuales es que en aquellos pa¨ªses en los que hay m¨¢s poblaci¨®n ind¨ªgena, Guatemala, Ecuador y Per¨², hay menor cobertura del Estado en educaci¨®n, salud, seguridad, justicia e infraestructuras
Bolivia consolida la necesidad del debate sobre la democracia y los pueblos ind¨ªgenas en Am¨¦rica Latina. El poderoso movimiento que instal¨® en el poder a Evo Morales, es la muestra de c¨®mo los pueblos ind¨ªgenas est¨¢n usando la democracia para la conquista del Poder Ejecutivo. De base sindical, obrera y campesina, pero al final con un planteamiento indigenista.
Junto con esta emergencia, es necesario considerar el informe sobre la Democracia en Am¨¦rica Latina, elaborado por el ex canciller Dante Caputo, que demuestra que las poblaciones no ven resultados concretos en su vida cotidiana a partir de la democracia.
En cada elecci¨®n aumenta la participaci¨®n ciudadana rural, en Guatemala por ejemplo, previo a la ¨²ltima elecci¨®n el empadronamiento rural aument¨® al 119% en el 2007 (ASIES 2008). Una paradoja que invoca una reflexi¨®n estructural de los sistemas pol¨ªticos en la regi¨®n y que de alguna manera explica la llegada al poder de propuestas partidarias que proponen cambios significativos en los sistemas econ¨®micos imperantes. Es decir, la democracia no ha llegado a nuestros est¨®magos, a pesar de nuestra mayor participaci¨®n pol¨ªtica...
La democracia no ha llegado a los est¨®magos a pesar de la mayor participaci¨®n pol¨ªtica
La influencia del movimiento indigenista crecer¨¢ en los pr¨®ximos 15 a?os en toda la regi¨®n
Este tema es particularmente significativo en Ecuador, Per¨², Bolivia y Guatemala, dada sus historias, sus densidades poblacionales y las incapacidades de los Estados para manejar sus realidades multiculturales. Los casos de estos pa¨ªses son igualmente importantes por las estructuras de organizaci¨®n de los pueblos ind¨ªgenas, el avance en sus planteamientos de reforma del Estado y la evoluci¨®n hist¨®rica de sus luchas de reivindicaci¨®n manejadas por planteamientos de identidad cultural.
Las propuestas contempor¨¢neas de los pueblos ind¨ªgenas se centran en el reconocimiento de sus identidades culturales, el respeto al ejercicio de sus derechos colectivos, la eliminaci¨®n del racismo y la discriminaci¨®n, la superaci¨®n de la pobreza y el ejercicio pleno de derechos de ciudadan¨ªa. Es decir, toda una b¨²squeda del fortalecimiento de la democracia moderna.
Los pueblos que constituyen minor¨ªas de poblaci¨®n en sus pa¨ªses, en muchos casos reclaman autonom¨ªas para proteger sus territorios y recursos naturales; los pueblos que son mayor¨ªas en sus Estados buscan transformaciones estatales y han puesto a discusi¨®n los reg¨ªmenes democr¨¢ticos. Importantes estudios demuestran que Am¨¦rica Latina es la ¨²nica regi¨®n del mundo donde los movimientos sociales de base ind¨ªgena no han sido secesionistas. Es proporcionalmente inversa la magnitud de la discriminaci¨®n y el racismo hacia los pueblos ind¨ªgenas y su rebeli¨®n y movilizaci¨®n. Son gigantes que sobreviven y hoy han apostado por la democracia.
En el documento del National Intelligence Council (NIC) Latinoam¨¦rica 2020: pensando los escenarios de largo plazo, reconoce que "comparada con el escenario que enfrentan otras ¨¢reas del mundo, Latinoam¨¦rica ser¨¢ una regi¨®n relativamente pac¨ªfica en los pr¨®ximos a?os. Existir¨¢n conflictos fronterizos y reclamos territoriales... pero el escenario de enfrentamientos armados es de baja probabilidad". Al referirse a los movimientos sociales en el interior de los pa¨ªses, plantea que "la emergencia de movimientos indigenistas pol¨ªticamente organizados tambi¨¦n puede representar un riesgo para la seguridad regional. Si en los pr¨®ximos a?os los movimientos de reivindicaci¨®n indigenista no logran inserci¨®n en el sistema pol¨ªtico, ni determinados niveles de inclusi¨®n social, existe la probabilidad que muchos movimientos evolucionen hacia reivindicaciones de tipo auton¨®mico territorial... reivindicaciones territoriales impulsadas por grupos irredentistas podr¨ªan incluir el escenario de insurgencia armada y violencia pol¨ªtica". Las participaciones ind¨ªgenas en partidos pol¨ªticos y en la estructura de gobierno, las experiencias de alianzas de dirigentes e intelectuales con gobiernos nacionales, las reformas jur¨ªdicas y las cosmovisiones pac¨ªficas de estos movimientos hacen poco probable esta posibilidad en pa¨ªses con mayor¨ªa ind¨ªgena en su poblaci¨®n. Sin embargo, esta posibilidad puede existir en Estados con poblaciones ind¨ªgenas minoritarias que priorizan sus demandas territoriales, arrinconadas por decisiones unilaterales de los Gobiernos, bajo influencias econ¨®micas nacionales e internacionales injustas, violatorias de mandatos constitucionales y del derecho internacional.
Son cuestionables las estad¨ªsticas sobre los porcentajes de poblaci¨®n ind¨ªgena en Am¨¦rica Latina. Sin embargo, en Guatemala la poblaci¨®n ind¨ªgena supera el 50%, en Ecuador y Per¨² igualmente el 40%, y en Bolivia alrededor del 70%. La paradoja es que a mayor poblaci¨®n ind¨ªgena, menor atenci¨®n del Estado, menor cobertura en educaci¨®n, salud, seguridad ciudadana, administraci¨®n de justicia e infraestructura.
En estos pa¨ªses se tienen democracias formales con un manejo de la ciudadan¨ªa de manera diferenciada. En consecuencia, se tienen ciudadanos de primera categor¨ªa, capaces de participar en la toma de decisiones nacionales, de hacer valer su ciudadan¨ªa ante el mundo, tienen disfrute de vida similar a las poblaciones con renta alta en el primer mundo y con capacidad de acceso a la educaci¨®n superior; como segunda categor¨ªa se tienen poblaciones de renta media y baja, que con dificultad acceden al cumplimiento de sus derechos pol¨ªticos nacionales, urbanas en el interior de sus pa¨ªses y en el mejor de los casos con educaci¨®n de nivel medio; finalmente, las poblaciones que sobreviven con menos de un d¨®lar al d¨ªa, rurales, analfabetas, con cierta participaci¨®n pol¨ªtica local, desinformadas del sistema pol¨ªtico imperante y sin influencia en la toma de decisiones nacionales de manera consciente y sabida.
En este contexto, los pueblos ind¨ªgenas en Am¨¦rica Latina (m¨¢s de 600), a trav¨¦s de su reivindicaci¨®n hist¨®rica han logrado poner, con diferente intensidad, el tema de la multiculturalidad, en las agendas de discusi¨®n pol¨ªtica nacional. ?ste quiz¨¢ sea su gran logro a inicios del siglo XXI, pero que a¨²n no llega a la cotidianidad de las poblaciones rurales.
Es de reconocer que se han dado cambios jur¨ªdicos en la mayor¨ªa de pa¨ªses de la regi¨®n. Sin embargo, el ?ndice de Calidad Legislativa Ind¨ªgena en Am¨¦rica Latina 2004, del Banco Interamericano de Desarrollo, con datos indica que los tres pa¨ªses de mayor calidad legislativa son Colombia, Venezuela y Bolivia, con un 70%. Per¨² y Ecuador, en el cuarto y quinto lugar, con un poco m¨¢s del 60%. Llama la atenci¨®n el caso de Guatemala en el decimotercer lugar, con el 40% de calidad legislativa y el 42% de poblaci¨®n ind¨ªgena.
El mayor desaf¨ªo para los Estados, la comunidad internacional y los pueblos ind¨ªgenas es la implementaci¨®n de este nuevo escenario jur¨ªdico; se tendr¨¢ que reflejar en legislaci¨®n secundaria, en reformas ejecutivas de Estado y en la designaci¨®n significativa de recursos financieros.
Es innegable que los m¨¢s de 25 a?os de democracia en la regi¨®n han permitido la generaci¨®n de movimientos sociales que plantean y exigen la reforma de los reg¨ªmenes pol¨ªticos. Buscan que los sistemas de partidos pol¨ªticos puedan construir Estados s¨®lidos, con visiones nacionales plurales, capaces de operar con autonom¨ªa de los poderes f¨¢cticos venidos del capital nacional o transnacional, del crimen organizado y las fuerzas armadas de cada pa¨ªs. En este sentido, hay que valorar que "en los pr¨®ximos 15 a?os se producir¨¢ un crecimiento de las contradicciones culturales en la sociedad latinoamericana, como consecuencia del surgimiento de particularismos ¨¦tnicos y regionales. La expresi¨®n m¨¢s fuerte de estas contradicciones culturales ser¨¢ el movimiento indigenista, cuya influencia crecer¨¢ a lo largo de los pr¨®ximos 15 a?os en toda la regi¨®n, particularmente en la regi¨®n Andina, Centroam¨¦rica y el sur de M¨¦xico". (NIC 2004).
Los movimientos ind¨ªgenas en Am¨¦rica Latina, especialmente en Guatemala, Per¨², Ecuador y Bolivia traen consigo el desaf¨ªo de enriquecer sus democracias, el cumplimiento constitucional y aportar a la construcci¨®n de Estados capaces de servir a los ciudadanos en general, reconociendo sus diferencias culturales, superando los altos niveles de desigualdad y haciendo efectivos sus derechos pol¨ªticos. En todos los pa¨ªses, adem¨¢s, reconociendo y apreciando su val¨ªa en t¨¦rminos del respeto, el manejo sustentable al medio ambiente y eliminando el clientelismo del sistema pol¨ªtico. Esto permitir¨¢ empezar a construir el futuro de la regi¨®n.
?lvaro Pop es antrop¨®logo guatemalteco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.