"Nunca apostar¨ªa contra ¨¦l"

Mardy Fish se daba pu?etazos en la cabeza a la una de la ma?ana. Sudaba Rafael Nadal, the matador of spin, que le dicen en Estados Unidos por sus efectos endemoniados. Se vaciaba el estadio ya entrada la madrugada del jueves, solitarias la mayor¨ªa de sillas azules. Fish, por delante. Nadal, remando. Y, de repente, un grito en espa?ol: "?Despierta Rafa!". Despert¨® (3-6, 6-1, 6-4 y 6-2) y se clasific¨® por primera vez para las semifinales del Abierto de Estados Unidos. "Era una asignatura pendiente", dijo a las 2.55 de la madrugada. A las cinco de la ma?ana, tras cenar, pensar en el Premio Pr¨ªncipe de Asturias y recibir un masaje, se fue a la cama sabiendo que ma?ana le espera el peligroso escoc¨¦s Murray. Fue su victoria y la de otro tenista: Matts Wilander, el prodigio sueco, puede seguirse riendo.

"Es al menos tan bueno como cualquier n¨²mero uno de la historia", dice Wilander

"Nadal, como poco, es tan bueno como cualquier otro n¨²mero uno de la historia", dice Wilander, el mejor tenista del planeta en 1988. "Est¨¢ mejorando a un ritmo mucho mas alto que Djokovic y Federer, y por eso ahora son ellos los que le persiguen. Tiene pasi¨®n por ganar partidos de tenis, y desde que lleg¨® al numero uno siente que es el mejor jugador del mundo".

Hace a?os, Wilander hizo un diagn¨®stico que el tiempo ha convertido en leyenda: "Rafael tiene la ¨²nica cosa que a Federer le falta: pelotas. No creo siquiera que Rafa tenga dos. Creo que tiene tres". El suizo protest¨®, pidiendo una rectificaci¨®n. Y Wilander rectific¨®. A su modo, claro: "Puede que tenga pelotas, pero cuando juega contra Nadal se le reducen a un tama?o min¨²sculo". ?C¨®mo est¨¢ hoy la cuesti¨®n? "Nadal es mejor jugador que Federer cuando se enfrentan el uno al otro", contesta Wilander. "No hay nada que le frene en sus deseos de mejora. Si Federer no cambia, nunca volver¨¢ a ganarle". ?Puede mantenerse Nadal como el mejor? "Seguro, si est¨¢ sano. En cualquier caso, el numero uno es algo materialista".

Nadal, sin embargo, se enfrenta a una tendencia estad¨ªstica. En los ¨²ltimos 20 a?os, s¨®lo un tenista, Jim Courier, gan¨® el primer grande que jug¨® como n¨²mero uno, Roland Garros en 1992.

"Me sorprende que yo haya sido el ¨²ltimo en conseguirlo", dice Courier. "Nadal no tiene ninguna debilidad", prosigue. "Su fuerte es su esp¨ªritu competitivo. Y su fortaleza mental. Pero, insisto, no tiene debilidades. S¨®lo el tiempo dir¨¢ si aguanta la comparaci¨®n con los mejores jugadores de siempre... Ocupar este puesto no depende de un concurso de popularidad. El n¨²mero no cambia nada. Ni al jugador ni a la persona. Es una afirmaci¨®n de lo que haces como trabajador".

"La ¨²nica posiblidad de que Nadal fuera el segundo favorito para ganar aqu¨ª es que Jim siguiera jugando", se r¨ªe Stan Smith, campe¨®n de Wimbledon y del Abierto de Estados Unidos. "Nadal es el favorito. No apostar¨ªa nunca contra ¨¦l. Est¨¢ jugando fant¨¢stico", contin¨²a. "Este a?o se ha convertido en un tenista agotador para sus rivales. Sube m¨¢s a la red, porque ha mejorado su golpe de aproximaci¨®n y volea m¨¢s. Saca mejor y eso le est¨¢ dando muchos puntos gratis. Ha mejorado un 15% en el ¨²ltimo a?o, as¨ª que se merece el n¨²mero uno. Si mantiene este nivel durante cinco o seis a?os, estar¨¢ entre los mejores de siempre".

?Y en Espa?a? ?C¨®mo se juzga el ascenso de Nadal? "Rafa es sin lugar a dudas el n¨²mero uno", dice Manolo Santana. "Ahora tiene que consagrarse para estar a la altura de Sampras, Agassi o Federer".