La principal medida del Consell contra la pobreza est¨¢ atascada
Ning¨²n valenciano en riesgo de exclusi¨®n cobra la renta m¨ªnima
La principal medida contra la pobreza del Consell est¨¢ atascada en los despachos de la Consejer¨ªa de Bienestar Social. La Ley de Renta M¨ªnima Garantizada de Ciudadan¨ªa lleva a?o y medio de andadura desde que entr¨® en vigor en marzo de 2007, pero su situaci¨®n de empantanamiento administrativo ha impedido que miles de familias que se encuentran en situaci¨®n de riesgo de exclusi¨®n social hayan comenzado a percibir las ayudas que les reconoce la ley.
La norma se aprob¨® despu¨¦s de a?os de reclamaciones por parte de sindicatos y asociaciones. La Comunidad Valenciana contaba por fin con un instrumento que garantizaba por ley el derecho de las personas sin recursos a cobrar unas prestaciones de entre 373 y 603 euros al mes vinculadas a la voluntad de inserci¨®n sociolaboral de los beneficiarios en forma de asistencia a cursos.
Hasta tal punto se trata de una medida clave en la pol¨ªtica social que el derecho a percibirla se introdujo en la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa. No s¨®lo eso. Tambi¨¦n es uno de los pilares del Plan de Inclusi¨®n Social de la Comunidad Valenciana 2006-2008 elaborado por la consejer¨ªa de Bienestar Social para combatir la pobreza.
Pese a todo ello, la Administraci¨®n valenciana, ha mantenido esta norma en una especie de estado de coma inducido que ha impedido hacerla efectiva hasta el momento.
La ley cuenta con un generoso plazo de un a?o para su efectiva aplicaci¨®n, un periodo que daba tiempo a completar el complejo armaz¨®n administrativo que requiere una norma de este tipo. No s¨®lo para elaborar el decreto destinado a desarrollar la ley, sino tambi¨¦n para poner en funcionamiento la estructura que requiere una medida de este tipo. Por ejemplo, la creaci¨®n de las comisiones mixtas que se han de constituir por personal t¨¦cnico de la administraci¨®n (ayuntamientos, consejer¨ªas, Servef) y que son los ¨®rganos encargados de elaborar los planes de inserci¨®n social de los beneficiarios.
Sin embargo, durante este periodo no se avanz¨® ni un mil¨ªmetro en su puesta en marcha. En marzo de 2008 la medida era de efectiva aplicaci¨®n sin los medios para que pudiera comenzar a andar. Ante la falta de impresos espec¨ªficos para pedir estas ayudas, organizaciones como C¨¢ritas elaboraron sus propios formularios y comunicaron a sus colaboradores que, dado que la ley ya era efectiva, comenzaran a solicitar las ayudas pese a la falta de difusi¨®n de las mismas por parte de Bienestar Social.No ha sido hasta julio de este a?o cuando el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana public¨® el decreto que desarrolla la norma. Para la orden que establece los requisitos que deben cumplir los beneficiarios as¨ª como los formularios para solicitarlas ha habido que esperar hasta la primera semana de agosto.
Bienestar Social admite que ha habido cierto retraso en la aplicaci¨®n de esta medida, algo que, en parte, achaca al cambio de equipos de la consejer¨ªa tras el relevo de la anterior responsable Alicia de Miguel por Juan Cotino. Adem¨¢s, fuentes de este departamento aluden a la complejidad jur¨ªdica administrativa que comporta un proceso de este tipo. En todo caso, apuntan que se va a intentar "agilizar todo lo que se pueda" el proceso.
Adem¨¢s, indican que desde la entrada en vigor de la norma ya se pod¨ªan presentar solicitudes, aunque no fuera con un formulario espec¨ªfico. De hecho, las mismas fuentes se?alan que ya hay 771 peticiones que se est¨¢n tramitando y las que sean aceptadas se abonar¨¢n con efecto retroactivo desde la fecha de solicitud. La intenci¨®n de este departamento es que a lo largo de este a?o se comiencen a hacer los pagos. Bienestar Social estima que a pleno rendimiento unas 3.700 familias recibir¨¢n esta subvenci¨®n anualmente.
Trabajadores de servicios sociales consultados por este diario apuntan tambi¨¦n como motivo de la demora al esfuerzo y la atenci¨®n que requiere el desarrollo de la Ley de la Dependencia.
El diputado socialista en las Cortes Antonio Torres apunta a una causa m¨¢s prosaica: la falta de fondos. "Empezar¨¢n a pagar el a?o que viene muy pronto para cargar los gastos de esta medida al pr¨®ximo presupuesto", comenta. La falta de dinero es uno de los principales problemas de Bienestar Social para cumplir con sus compromisos.
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