Los televidentes se lanzan a la calle en 'La Nit 25', de TV-3

La televisi¨®n suele ser acusada de encerrar a la gente en su casa. Ayer, Televisi¨® de Catalunya logr¨® en buena parte todo lo contrario gracias al ¨¦xito de la mayor¨ªa de las 150 actividades gratuitas que, en 18 poblaciones, formaron parte de La Nit 25, de TV-3, con la que la cadena auton¨®mica celebra su primer cuarto de siglo de vida.

El jard¨ªn del TNC estuvo hasta los topes y a ratos parec¨ªa un 'chill-out'

La primera se?al del poder de convocatoria la dieron, en Barcelona, los visitantes a la Casa Batll¨®, donde un gran globo blanco iluminado y suspendido de la fachada marcaba el edificio como uno de los escenarios. Ya antes de abrir las puertas -con la m¨²sica del Club Super3 de fondo- la cola daba la vuelta por la calle de Arag¨® y llegaba hasta la Rambla de Catalunya.

El vest¨ªbulo de la Casa Ametller tambi¨¦n estaba a rebosar, si bien ah¨ª la gente bailaba a ritmo de un grupo de rock. Asimismo, la cola ante La Pedrera anunciaba otro lleno seguro, que se fue repitiendo hasta pasada la medianoche. Un poco m¨¢s tranquila fue la velada en el CCCB y en el Macba, otro de los focos de la nit en blanc, que, sin embargo, contrastaba con la amena masificaci¨®n que se congreg¨® en la plaza de los ?ngels.

La gente, euf¨®rica, subi¨® hasta las monta?as. En el Tibidabo, la oferta de una decena de atracciones abiertas y gratuitas hicieron que se contabilizaran, seg¨²n cifras de los organizadores, cerca de 4.000 personas. En el promontorio de Montju?c, la afluencia tambi¨¦n fue masiva. El r¨¦cord se lo llev¨® la iniciativa de la Fundaci¨® Mir¨® de promover, junto con la Universidad de Barcelona, una observaci¨®n de estrellas que encandil¨® a 1.500 personas. La aglomeraci¨®n oblig¨® a formar turnos de visita acotados a 30 minutos. Entre el p¨²blico, con significativa presencia infantil, imperaba un cierto desconocimiento de la existencia de autobuses especiales, lo que explicaba que a medianoche circularan vac¨ªos.

El Teatre Lliure tambi¨¦n hizo pleno: unas 200 personas llenaron el aforo para asistir a la obra de Tom Stoppard Rock'n Roll, de ?lex Rigola. Mucho menos masiva fue la afluencia de visitantes al MNAC, donde media hora antes de medianoche hab¨ªan pasado apenas unas 200 personas.

En otro punto de la ciudad, en el Auditori, la cita tuvo su gracia. Como m¨ªnimo, la de ver convertida la sala Tete Montoliu en una discoteca con parroquianos que iban de la est¨¦tica modernilla a la okupa. En su escenario, entre otras actuaciones, el pop sencillo y efectivo de Ruido Blanco. La entrada era por invitaci¨®n (se recog¨ªan en el Palau de la Virreina) y al final se repartieron todas.

En los jardines del Teatre Nacional de Catalunya (TNC) confluyeron los que iban a la fiesta de la nit blanca, los que sal¨ªan de la presentaci¨®n p¨²blica de la temporada del teatro y los que acababan de ver a Loquillo en el vecino Auditori. Combos de jazz, payasos y malabaristas amenizaron all¨ª la velada, cuyo programa ofrec¨ªa tambi¨¦n un avance de canciones del nuevo musical de Dagoll-Dagom, Aloma. Con una temperatura tan agradable, el jard¨ªn del TNC estuvo hasta los topes y a ratos parec¨ªa un chill-out. Entre los que disfrutaban de ello estaba el consejero de Cultura y Medios de Comunicaci¨®n, Joan Manuel Tresserras.

Informaci¨®n elaborada por Alberto Barbieri, Agust¨ª Fancelli e Israel Punzano. (M¨¢s sobre los 25 a?os de TV-3 en Quadern).