S¨ªndromes

Volvemos a la rutina (si es que alguna vez rompimos con ella) y viene, adem¨¢s del mogoll¨®n de fasc¨ªculos coleccionables, el bombardeo de los s¨ªndromes. ?Socorro! Ahora nos machacan con lo del s¨ªndrome posvacacional, o sea, la mala gaita provocada por la vuelta al rollazo del trabajo, por tener que madrugar y no pillar ratito para la siesta. Y, encima, tambi¨¦n lo sufren los ni?os y provoca tristeza, apat¨ªa, decaimiento, falta de concentraci¨®n, ansiedad e irritabilidad, y puede derivar en una depresi¨®n, ah¨ª es nada.

Qu¨¦ ganas de complicarnos la existencia, porque de toda la vida a eso se le ha llamado pereza, o perez¨®n, o tremenda pereza. Pero es como que si se le da un nombre medianamente cient¨ªfico la cosa cambia: est¨¢ m¨¢s justificada. Ya no es negativo, ni pecaminoso, sino algo que se sufre. Como que est¨¢ mal decir que tienes un perez¨®n de padre y se?or m¨ªo por tener que volver al agujero negro de todos los d¨ªas. Encima, dentro de nada nos acortar¨¢n el d¨ªa y ser¨¢ m¨¢s negro todav¨ªa. Por supuesto que tener que hacer algo contra tu voluntad es un fastidio, o incluso algo m¨¢s, pero de ah¨ª a tener que inventarse un s¨ªndrome y toda una lista de recomendaciones que hasta las dan en los telediarios...

O algunos est¨¢n muy aburridos o no saben de qu¨¦ hablar. O, peor aun, se empe?an en convencernos de lo que tenemos que sentir, y sufrir. Y tambi¨¦n se empe?an en tratar como si fuera de la secci¨®n de sucesos toda la avalancha de temas sociales o pol¨ªticos que tanto nos afectan. Para que luego todo se quede en un "?te has enterado lo de...?" y ya est¨¢. Debe ser el s¨ªndrome de que nos resbale un poco todo, porque bastante tenemos con sujetarnos la cabeza.

Aunque creo que ser¨ªa mejor que se nos cayera de una vez (y no de verg¨¹enza) y mantuvi¨¦ramos un punto de rebeld¨ªa, porque poco a poco nos est¨¢n convirtiendo en sufridores, y nosotros sufridoramente nos lo comemos todo. Lo peor es que nos vamos convenciendo que eso es as¨ª, y no hay tu t¨ªa. Que viene una crisis gorda, ?y?; que las decisiones judiciales son lamentables, ?y?; que todos los a?os se cambian los libros de texto, ?y?; que empieza la guerra por lo de la consulta, ?y? Hay tantos frentes abiertos que vamos pillando s¨ªndromes como quien pilla catarros. ?Estar¨¦ sufriendo el s¨ªndrome de la oveja descarriada?

Menos mal que nosotros no podemos pillar el s¨ªndrome de Par¨ªs, que solo afecta a los turistas japoneses que visitan esa ciudad y tienen que volver corriendo a casa. Por lo menos, a nosotros siempre nos quedar¨¢ Par¨ªs.