Espa?a levanta el pie

Radares, carn¨¦ por puntos, nuevas limitaciones en el extrarradio de las ciudades, campa?as de la DGT. Sea por prudencia o por temor al castigo, lo cierto es que los espa?oles est¨¢n reduciendo la velocidad a la que circulan con sus veh¨ªculos. Y as¨ª han logrado salvar vidas. Pero descubren que tambi¨¦n, y no es balad¨ª en estos tiempos, ahorran combustible. Y con ello, emisiones contaminantes. Es decir, conducir a velocidades moderadas resulta m¨¢s seguro, m¨¢s limpio y m¨¢s barato. La duda es si puede imponerse con car¨¢cter general un recorte de los l¨ªmites actuales.

Se compran autos m¨¢s peque?os, m¨¢s econ¨®micos y con menos potencia

El l¨ªmite de 80 km/h en Barcelona baj¨® m¨¢s los accidentes que la poluci¨®n

Los cursos de conducci¨®n verde ayudan a reducir el gasto

Ir a 90 por hora puede suponer 30 euros mensuales menos en gasolina

La crisis econ¨®mica ha venido a empujar la tendencia hacia una conducci¨®n m¨¢s prudente y econ¨®mica. La gasolina es un 13% m¨¢s cara que hace un a?o y el precio del gas¨®leo ha crecido un 23%. Esto anima a los ciudadanos a hacer un uso m¨¢s racional del veh¨ªculo privado. Lo que incluye a veces dejarlo en casa.

Los ¨²ltimos datos registrados avalan esa teor¨ªa: los desplazamientos por carretera en julio y agosto se han reducido un 4,5% (descienden un 3,7% en lo que va de a?o), y el consumo de carburante baj¨® un 10% en junio. Y, seg¨²n datos de la Uni¨®n Internacional de Ferrocarriles, ha aumentado un 3% el tr¨¢fico de viajeros en tren en Europa.

Dejar el coche en casa puede ser una buena receta ante la crisis, pero tambi¨¦n levantar el pie del acelerador. Las velocidades medias vienen descendiendo desde hace a?os por la implantaci¨®n de una nutrida red de radares, la entrada en vigor del carn¨¦ por puntos y el endurecimiento del C¨®digo Penal. Ahora se circula por las autov¨ªas cuatro kil¨®metros por hora m¨¢s lento que hace dos a?os. La media est¨¢ en 113.

El ministro de Industria, Miguel Sebasti¨¢n, propuso a finales de julio recortar los l¨ªmites de velocidad en los accesos a las grandes ciudades, anillos de circunvalaci¨®n y v¨ªas de gran capacidad. El objetivo, reducir el consumo de carburante. La medida corre el riesgo de quedar en una pura an¨¦cdota, porque hace ya m¨¢s de un mes y medio que fue planteada en el Congreso por el titular de Industria sin mucho eco entre sus compa?eros del Consejo de Ministros, incluidos los competentes en materia de tr¨¢fico.

Sebasti¨¢n estableci¨® un plazo de tres meses para elaborar un informe que a¨²n nadie ha abordado y en el que deben colaborar los departamentos de Fomento, Interior e Industria. Un portavoz de uno de estos ministerios reconoce que ni siquiera se ha producido a¨²n un encuentro para empezar a trabajar. "De todas formas, lo que se va a hacer es un mapa de los lugares en los que podr¨ªa aplicarse la medida, y como seguramente s¨®lo se har¨¢ en cuatro o cinco ciudades, nos va a sobrar tiempo", se?ala la misma fuente.

Mientras tanto, el Ministerio del Interior ha lanzado una campa?a aconsejando a los ciudadanos levantar el pie del acelerador con el ahorro como principal argumento. Este verano, en los paneles luminosos de las carreteras se pod¨ªa leer: "Si corres m¨¢s, ahorras menos" o "Si corres menos, ahorras m¨¢s". Estas campa?as, que se difunden fundamentalmente a trav¨¦s de las radios, son pr¨¢cticas, baratas y se basan en la complicidad y no en la imposici¨®n.

El objetivo del recorte de velocidad proyectado por el Gobierno es ahorrar hasta un 20% de combustible y al mismo tiempo reducir las emisiones de CO2 y otros gases contaminantes. En Espa?a, el transporte por carretera genera el 29% de las emisiones totales de CO 2 y 16.000 personas mueren cada a?o prematuramente por la mala calidad del aire. "Si se considera una medida tan eficaz, ?por qu¨¦ no se aplica en todo el territorio?", se pregunta Roberto Dur¨¢n, director del ¨¢rea de Psicolog¨ªa del Tr¨¢fico del Colegio de Psic¨®logos de Madrid. "Da la sensaci¨®n de que es un poco experimental y con el tr¨¢fico no se puede experimentar. Este tipo de medidas hay que explicarlas muy bien, porque puede entenderse como una medida recaudatoria m¨¢s", concluye.

Los conductores que acceden a la ciudad de Barcelona saben bien lo que es circular a 80 kil¨®metros por hora. Desde enero, ¨¦se es el l¨ªmite en las carreteras y autov¨ªas de casi una veintena de municipios de la primera corona de Barcelona. Los primeros resultados trajeron dos sorpresas. Una, que los niveles de contaminaci¨®n atmosf¨¦rica no descendieron en la medida que se esperaba (s¨®lo un 4%). Y la segunda, ¨¦sta en positivo, la ca¨ªda por encima del 40% de la siniestralidad mortal. Eso s¨ª, han tenido que montar un importante sistema de vigilancia para garantizar el cumplimiento del l¨ªmite establecido y se han impuesto casi 700 multas diarias por circular m¨¢s r¨¢pido. Seg¨²n datos de la DGT, un 5% de descenso de la velocidad media se traduce en una disminuci¨®n del 20% de los accidentes con muertos.

Actualmente, las universidades polit¨¦cnicas de Madrid, Barcelona y Valencia se encuentran auditando las carreteras espa?olas para adaptar el l¨ªmite de velocidad a las caracter¨ªsticas de cada tramo. El trabajo no estar¨¢ concluido hasta el a?o que viene, pero, seg¨²n la DGT, "en ning¨²n caso se producir¨¢ una revisi¨®n al alza".

Los estudios de eficiencia concluyen que conducir a 90 puede reducir hasta un 20% el consumo de combustible. Para un ciudadano con un veh¨ªculo de 120 caballos y 1.600 cent¨ªmetros c¨²bicos, con un consumo de 6,7 litros a los 100 kil¨®metros, y que recorra cinco d¨ªas a la semana unos 100 kil¨®metros diarios, eso viene a suponer un ahorro de unos 30 euros mensuales.

Tr¨¢fico realiza mediciones de la afluencia de veh¨ªculos en determinadas v¨ªas. Tomando tres carreteras de entrada a la capital, se puede comprobar c¨®mo entre junio de este a?o y el mismo mes de 2007 circulan menos coches. Por ejemplo, en la A-42 se produjo un recorte de hasta el 15%. Seg¨²n el Ayuntamiento de la capital, en un a?o ha descendido un 4,4% el n¨²mero de veh¨ªculos en la ciudad.

Las limitaciones de velocidad en las ¨¢reas de influencia de las grandes urbes genera, sin embargo, dudas entre algunos expertos, asociaciones de conductores y otros colectivos. Blas Vives, secretario general de Faconauto, la patronal de los concesionarios, considera que no se trata de un sistema eficaz, porque genera m¨¢s embotellamientos, m¨¢s colisiones y una conducci¨®n mucho m¨¢s contaminante y despilfarradora, con continuos frenazos y acelerones bruscos. Una teor¨ªa que no avala ni Tr¨¢fico ni un estudio elaborado por Ecologistas en Acci¨®n titulado Ideas y buenas pr¨¢cticas para la movilidad sostenible. En ese informe se explica que las experiencias en otros pa¨ªses demuestran que la medida permite reducir los ruidos, las emisiones de CO 2 y otros contaminantes, la siniestralidad y la congesti¨®n en el tr¨¢fico. Samuel Mart¨ªn-Sosa, responsable de Internacional de esta asociaci¨®n, aplaude la iniciativa de Industria, pero asegura que de poco servir¨ªa aplicarla de forma aislada, sin otras acciones complementarias, como la potenciaci¨®n del transporte p¨²blico.

Con la subida de las hipotecas y la inflaci¨®n apretando, muchos espa?oles han alterado su lista de prioridades. Eso ha provocado un desplome de las ventas de coches que entre enero y agosto alcance el 21,1%. Quien decide comprar, adem¨¢s, opta cada vez m¨¢s por los llamados "coches ecol¨®gicos". Un t¨¦rmino que irrita a los ecologistas, que prefieren referirse a estos veh¨ªculos como "menos contaminantes". De hecho, varias asociaciones de defensa de la naturaleza y del medio ambiente tienen intenci¨®n de batallar jur¨ªdicamente con el sector para que la UE proh¨ªba unir estos t¨¦rminos que consideran incompatibles.

Los autom¨®viles m¨¢s limpios son los que est¨¢n soportando la mayor parte del peso de las ventas desde que entr¨® en vigor la nueva fiscalidad que establece la exenci¨®n del pago del impuesto de matriculaci¨®n si el coche emite menos de 120 gramos de CO2 por kil¨®metro. Este segmento ha crecido un 43,5%, seg¨²n datos del sector. Mientras, el mercado del coche de lujo se desploma un 46,9% entre enero y agosto. Seg¨²n Faconauto, "la ecolog¨ªa est¨¢ entrando por el bolsillo". Sin embargo, el ahorro medio se sit¨²a en torno a los 400 euros. No parece entonces la ¨²nica raz¨®n que decanta la compra hacia uno u otro veh¨ªculo. Las estad¨ªsticas muestran que se compran coches m¨¢s baratos y m¨¢s peque?os, y estas caracter¨ªsticas suelen ir unidas a la menor emisi¨®n de CO

2 . "Son un 3% m¨¢s baratos, pero tambi¨¦n un 2,4% m¨¢s peque?os y tambi¨¦n un 0,4% menos potentes que hace un a?o", se?ala Vives.

A la moda de los coches verdes se ha sumado la de los cursos de conducci¨®n eficiente o eco-conducci¨®n. El negocio parece redondo: cuatro horas de formaci¨®n gratuita para conocer y aplicar unos sencillos consejos (ver gr¨¢fico) que revierten en un ahorro de combustible del 15%. Muchos de ellos est¨¢n subvencionados por el IDAE (Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa) y las administraciones auton¨®micas, y son impartidos por empresas especializadas o asociaciones de automovilistas como RACC y CEA.

Su clientela se nutre, de momento, de funcionarios, empleados de grandes empresas y colectivos profesionales. Aunque cada vez m¨¢s particulares se apuntan por el boca a boca. A pesar de su denominaci¨®n, la mayor¨ªa de los alumnos acuden mirando m¨¢s al bolsillo que al cielo.

En la localidad madrile?a de Alcal¨¢ de Henares, en un d¨ªa en el que el verano se resiste a retirarse, un nada discreto coche rojo circula totalmente rotulado. Eco-conducci¨®n. Cursos gratis. En su interior, Carlos, un instructor, reprende a uno de sus alumnos:

-No cambies. ?Por qu¨¦ cambias?

-Por la costumbre -contesta el hombre.

"Es lo que m¨¢s le cuesta a la gente, saltarse marchas, cambiar de segunda a cuarta sin pasar por la tercera, o circular a 50 por hora en quinta", explica. Carlos es uno de los 32 formadores que tiene la empresa Prevensis, que imparte los cursos de conducci¨®n eficiente de Cea. En Espa?a todav¨ªa es una an¨¦cdota, pero en Holanda, desde principios de a?o, la conducci¨®n ecol¨®gica ya forma parte del examen de conducir. "Aqu¨ª si conduces as¨ª el examinador te suspende", asegura Jes¨²s G¨®mez, gerente de Prevensis.

Este pionero en la formaci¨®n de conductores, que lleva 10 a?os en el negocio, asegura que parte de la eficacia de los cursos es que el resultado que se puede obtener aplicando estas t¨¦cnicas "es muy tangible", lo compruebas en el momento. "La mayor¨ªa viene con una actitud como diciendo: 'A m¨ª me vas a ense?ar a conducir despu¨¦s de 30 a?os', pero enseguida se dan cuenta de lo que pueden llegar a ahorrar". En muchos casos, se?ala G¨®mez, "hay que desaprender cosas que ya no tienen sentido porque los coches de hoy han evolucionado, pero seguimos conduciendo como nuestros padres".

Luis ha logrado reducir el consumo en cuatro litros (a los 100) y ha invertido menos tiempo en el mismo trayecto. A su lado varios soldados repasan sus notas. "Se van muy sorprendidos de los resultados. Otra cosa es que despu¨¦s lo sigan aplicando", explica Jes¨²s G¨®mez.