Ambicioso y con ganas de jubilar a la vieja guardia

Aunque Jorge Alarte no hubiera conseguido la secretar¨ªa general del PSPV-PSOE, siempre habr¨ªa sido recordado por su intenci¨®n de jubilar sin empacho -al menos de palabra y en p¨²blico- a toda una generaci¨®n de pol¨ªticos veteranos de su partido como Joan Lerma, Cipri¨¤ Ciscar o Carmen Alborch. Concejal primero y alcalde de Alaqu¨¤s, una poblaci¨®n industrial de 32.000 habitantes del ¨¢rea metropolitana de Valencia, desde 1999, Alarte, soltero y a punto de cumplir los 35 a?os, sue?a desde hace a?os con ganar la presidencia de la Generalitat.

Ambicioso y pragm¨¢tico, este licenciado en Derecho lleva media vida en pol¨ªtica. Ya era alcalde cuando obtuvo su t¨ªtulo universitario. Su primer contacto con la escena p¨²blica fue en el bachillerato, donde se inici¨® en el sindicalismo estudiantil. Entre 1993 y 1995 se uni¨® a la junta de gobierno de la Universitat de Val¨¨ncia, en 1994 ingres¨® en el PSPV, y un a?o despu¨¦s ya era concejal de Juventud. Una carrera mete¨®rica.

Alarte, ardiente defensor del municipalismo, se maneja bien en los vericuetos del poder. Cre¨® con otros tres alcaldes una especie de lobby municipal en la comarca con m¨¢s afiliaci¨®n socialista del Pa¨ªs Valenciano. Cipri¨¤ Ciscar lo lleg¨® a proponer hace a?os como secretario general, en un ticket con Francesc Romeu de n¨²mero dos, en los tiempos m¨¢s convulsos del PSPV.

De su estilo pol¨ªtico se destaca su populismo, muy en la l¨ªnea del que practica Jos¨¦ Bono, al que apoy¨® hace ocho a?os frente a Zapatero. En julio de 2007, con Joan Ignasi Pla amortizado en la secretar¨ªa general, Alarte ten¨ªa ya dise?ada su operaci¨®n para saltar a la direcci¨®n del PSPV.