'Txocos', d¨®lmenes y masaje de pepitas

Llevan semanas mirando el cielo, rezando para que un chaparr¨®n de ¨²ltima hora no engorde la uva y pierda el grado. Los bodegueros de la Rioja alavesa se juegan en estas fechas el trabajo de todo un a?o. Arranca la vendimia y la comarca rezuma actividad. Los vendimiadores recogen, los lagos se llenan de uva, el mosto se convierte en vino.

Hay bodegas para todos los gustos, afrancesadas como los ch?teaux Torre de O?a (en P¨¢ganos) y Contino (Laserna); divertidas como Heredad de Ugarte (P¨¢ganos), con un toque de Los Picapiedra, industriales como Faustino (Oy¨®n), selectas como Rem¨ªrez de Gamuza (Samaniego), tur¨ªsticas como Granja Remelluri (Labastida)...

No hay que perderse la arquitectura de Calatrava, Gehry, Aspiazu y Mazi¨¦res en Ysios (Laguardia), Marqu¨¦s de Riscal (Elciego), Baigorri (Samaniego) y Cvne (Laguardia). Toyo Ito est¨¢ proyectando una bodega para Freixenet (Laguardia) y este a?o abrir¨¢ sus puertas el flamante edificio del logro?¨¦s Jes¨²s Marino Pascual para Anti¨®n (Elciego), que incluye un hotel con 12 suites y una sala de catas con est¨¦tica iPod.

La mayor¨ªa de las bodegas hacen visitas guiadas y catas (con cita previa), y todas tienen tienda con botellas hasta un 40% m¨¢s baratas que en la calle. Sin embargo, no conviene saturarse, en la comarca hay m¨¢s de 280 bodegas, pero s¨®lo hay un n¨²mero determinado de veces que el turista quiere que le expliquen la fermentaci¨®n maleol¨¢ctica.

No hay problema, los encantos de la Rioja alavesa van m¨¢s all¨¢ de las bodegas. Pueblitos encaramados a cerros, iglesias medievales, gastronom¨ªa de chuparse los dedos, excursiones a caballo por la sierra... Todo en un paisaje espectacular que est¨¢ a punto de virar al rojo y al amarillo, donde incluso la temida lluvia tiene su recompensa: arco iris tan perfectos que parecen dibujados. Y luego est¨¢ la gente.

01. La casa de Judith

La primera pregunta de Judith S¨¢enz de Tejada a sus clientes es ?a qu¨¦ te dedicas? Seg¨²n los intereses del interesado, esta restauradora e ilustradora configura una gu¨ªa personalizada por pueblos, iglesias, bodegas, d¨®lmenes, vinotecas... Pero le puede la casta, es nieta del artista Carlos S¨¢enz de Tejada, y siempre cuela el arte en sus paseos. Imposible no detenerse en rincones como el p¨®rtico g¨®tico de Santa Mar¨ªa de los Reyes, donde se casaron don Sancho y do?a Urraca. De sumano tambi¨¦n se accede a lugares cerrados al p¨²blico como cuevas privadas o la elegantemente restaurada Casa Primicia, donde la iglesia recog¨ªa diezmos y primicias (los primeros frutos) de los agricultores.

La parada estrella es la casa de la familia de Judith, levantada en el siglo X y a¨²n habitada por sus padres. Tiene todas las claves de la arquitectura noble de la zona: bajos de siller¨ªa, primera planta de ladrillo con el enfoscado erosionado por el cierzo, tienda (ventana a la calle para hacer trueque), empedrado de guijos, establo y habitaci¨®n para peregrinos. El interior es un museo de artes decorativas (sus padres duermen en la cama en la que muri¨® el virrey Palafox) y tambi¨¦n de arte a secas, gracias a los lienzos del abuelo. Pero lo mejor es que entre incunables y muebles del XVII hay rastros de vida: la colada puesta a secar sobre las camas, la cocina oliendo a guiso.

? M¨¢s que rutas (617 78 63 51; www.masquerutas.com). Visitas personalizadas.

02. El trote de Pegaso

Si le aprietas, Pegaso tira. Curro es m¨¢s pach¨®n y se distrae con las hierbas del camino. "Pasear a caballo entre vi?edos es otra forma de vivir La Rioja, en vez de s¨®lo vino, vino, vino", dice Pablo Reguera a lomos de Romero, entre las cepas rojizas, ante la ondulada estructura de Calatrava para Ysios. Ni Lorenzo Lamas en Falcon Crest. Sus caballos recorren adem¨¢s de los vi?edos toda la sierra de Cantabria visitando lugares excepcionales como el m¨¢gico dolmen de La Hechicera o la laguna El Prao, ideal para avistar aves. Los menos aventureros pueden alquilar una calesa; los m¨¢s, contratar una excursi¨®n de d¨ªa que incluye almuerzo en el monte.

? Centro H¨ªpico Sierra Cantabria (639 83 65 38; www.centrohipicosierracantabria.com). Carretera de Elvillar. Precio: 16 euros la hora.

03. El silencio de Elvira

A los urbanitas que hacen noche en el agroturismo Carpe Diem de Navaridas a veces les despierta el silencio. En la plaza a la que dan los balcones de esta antigua casa de agricultor (de 1744) s¨®lo se escucha el estruendo susurrado de las hojas. "Vendemos silencio", dice Elvira Abascal. "?Pero no lo cobramos!", apunta Javi, su marido: "Esto es La Rioja de verdad, la de los agricultores que llevamos aqu¨ª generaci¨®n tras generaci¨®n". Como en muchos de los agroturismos de la zona, los due?os est¨¢n encantados de organizar visitas a sus vi?edos y bodegas familiares. Como dice Javi: "Viajar no es hacer kil¨®metros, sino integrarse en la vida de la gente".

? Agroturismo Carpe Diem (945 60 51 72; 618 57 46 59). Navaridas. La doble, 66 euros.

04. La vi?a de Juanje

A la cueva de la bodega Valdelana se entra por un confesionario. Cosas de Juanje Valdelana, que ha distinguido su negocio familiar con ideas originales como una capilla bajo tierra y una vi?a subterr¨¢nea, que florece sin color por la falta de fotos¨ªntesis. En el ¨¢tico ha reunido un peque?o museo antropol¨®gico que arranca en el paleol¨ªtico. Hay punzones de la edad de piedra recogidos por la zona, molinos celt¨ªberos y aperos de principios del siglo XX, los cuales, gracias a una estupenda colecci¨®n de fotos de la ¨¦poca, se comprueba c¨®mo se utilizaban. "Si no eres un experto es un rollo que te hablen de polifenoles, antocianos y taninos...mucha gente no quiere ver dep¨®sitos ni saber qu¨¦ es el batonage", dice Juanje, y pasa a explicar cosas m¨¢s interesantes como que los introvertidos son mejores catadores (tiene algo que ver con que producen m¨¢s saliva) o que los pellejos de cabra en los que se transportaba el vino conservan el pelo del animal en el interior: "Una porquer¨ªa, vamos".

? Bodegas Valdelana. Elciego (945 60 60 55; www.bodegasvaldelana.com). Visita, 6 euros.

05. Las manitas de Cari

En El Bodeg¨®n, Chari Garcia Ugarte, due?a y curtida relaciones p¨²blicas, s¨®lo se mete en la cocina durante horas para preparar sus m¨ªticas manitas de cerdo. "Me salen muy buenas... yo no tengo abuela", apostilla cuando canta los fuera de carta: "Crujiente de alcachofas, hongos odulis con aceite de foie, tempura de berenjenas rellenas con risotto meloso y espuma de mora...". Pizpireta y aguerrida, Chari est¨¢ montando un "hotelito coquet¨®n y con encanto" en la plaza de Laguardia. Un lugar "con doseles y vinoterapia" para ahondar en que "La Rioja no es s¨®lo vino". Las obras son un l¨ªo, Laguardia est¨¢ cerrada a los coches y horadada "como un queso gruy¨¨re" de cuevas. Aunque complique las obras, que no haya coches tiene sus ventajas: "Caminar por el pueblo escuchando tus pisadas no es pagado con dinero", dice Chari. En su restaurante han cenado ministros, actores e incluso "el hombre m¨¢s rico del mundo", Carlos Slim, que dijo "excelente" probando las manitas de Chari; se qued¨® corto.

? El Bodeg¨®n (945 60 07 93). Laguardia. Precio medio, entre 35 y 50 euros.

06. El hollejo de Loli

Lo llaman "hacer el conejo". Consiste en frotarse el hollejo (la piel de la uva) entre el labio superior y los paletos. Es imposible hacerlo sin que te entre la risa. La cata de uva que ofrecen en la bodega Loli Casado hace la delicia de hombres de negocios y ni?os por igual. Intente separar dentro de la boca la piel, la pulpa y las pepitas de tres granos y entender¨¢ por qu¨¦. Aparte de las risas, se aprende que antes de vendimiar, el pez¨®n que sujeta el grano al pedicelo tiene que estar rojito y no rasgar la piel, y que "el 80% del buen vino ya est¨¢ en la uva y s¨®lo el 20%depende de c¨®mo lo hagas", seg¨²n Jes¨²s, elmarido de Loli. La pareja tambi¨¦n hace aceite como muchas bodegas de la zona, y la cata est¨¢ al alcance de cualquiera: "?Notas el sabor a mata de tomate y a alcachofa?", preguntan al turista.

? Bodegas LoliCasado (945 60 70 96;www.bodegaslolicasado.com). La Puebla de Labarca.

07. La chimenea de Pepe

"Esto es el pol¨ªgono industrial del siglo XV". La bodega del cosechero Pepe Zald¨ªvar lleva a las afueras del precioso pueblo de Labastida desde entonces. La elaboraci¨®n de su vino de a?o se hace pr¨¢cticamente igual, pisada en el lago incluida. Sobre la bodega, en un espacioso txoko del XVIII, presidido por una chimenea donde arden viejas cepas, las patatas a la riojana y las chuletillas al sarmiento siguen, siglos despu¨¦s, sabiendo a gloria. "Aqu¨ª llevamos dando de comer desde mucho antes de que se inventase lo del enoturismo", dice Pepe frente al horno de piedra.

? Bodegas Zald¨ªvar (www.bodegaszaldivar.com; 656 78 65 23). Labastida. Men¨², 35 euros, con cita previa.

08. Las pepitas de Caudal¨ªe

Qui¨¦n lo dir¨ªa, masajeadas sobre la piel, y envueltas en miel caliente, las pepitas de uva son una delicia. En el spa Caudal¨ªe del hotel Marqu¨¦s de Riscal, el de Gehry, todo gira en torno a la fruta riojana. Los jacuzzis tienen forma de barrica, la espectacular piscina mira a los vi?edos, el s¨¦rum se llama Vinoperfect. En este rinc¨®n de vinoterapia se puede catar el lujo del hotel, que el 24 de octubre celebra el 150? aniversario de las bodegas con una subasta a cargo de Christie's y un fin de semana que no est¨¢ al alcance de la mayor¨ªa. Por 2.500 euros incluye recogida en el aeropuerto en Bentley, desayuno con champ¨¢n, cena de gala, pensi¨®n completa, habitaci¨®n firmada por un premio Pritzker y tratamientos en el spa. Por mucho menos, el com¨²n de los mortales puede acercarse a los platos de estrella Michel¨ªn del chef Francis Paniego (50 euros el men¨² del bistrot, 80 el gastron¨®mico) y darse el lujazo de un masaje vinoterap¨¦utico.

? Caudal¨ªe Spa. Hotel Marqu¨¦s de Riscal (945 18 08 88; www.caudalie.com; www.marquesderiscal.com). Elciego. Desde 58 euros.

09. La cuadrilla de C¨¦sar

Los fines de semana, C¨¦sar S¨¢enz de Samaniego sale al campo con una cuadrilla peculiar. Est¨¢n alojados en hoteles, trabajan apenas media hora y recogen un pu?ado de racimos en vez de los 1.100 kilos que corta un vendimiador al d¨ªa. "La experiencia en vi?edo sirve para que el turista entienda lo que ha pasado el agricultor durante un a?o para que esa copa llegue a la mesa", dice C¨¦sar. Los cosecheros por un d¨ªa tambi¨¦n comprueban el grado de la uva con el refract¨®metro, pisan la fruta (est¨¢ fr¨ªa y hace cosquillas) y prueban, con remilgos, el mosto resultante. La pisada ocurre en el centro Villa Luc¨ªa, una suerte de museo did¨¢ctico cuyos Vinfos (racimos con patas y carita de duende) enamoran a los ni?os, as¨ª como las distintas pruebas para los sentidos (Huele aqu¨ª: ?es cebolla o vainilla?). C¨¦sar acaba la experiencia en su bodega con parrillada incluida. En noviembre tambi¨¦n ense?a a los turistas a preparar una botella de pachar¨¢n con sus endrinos.

? Bodegas S¨¢enz de Samaniego Zu?eda (609 43 16 08). Samaniego. 35 euros.

? Centro Tem¨¢tico Villa Luc¨ªa (945 60 00 32;www.villa-lucia.com). Entrada desde 5 euros.

10. La muralla de los l¨¢brasenos

Los vecinos de Labraza celebraron el Premio del C¨ªrculo Internacional de Ciudades Amuralladas con una merienda cena en la que cada uno baj¨® algo. Este mes, 35 labrace?os, de los 80 que viven en el pueblo, viajar¨¢n a Canterbury (Reino Unido) para ser felicitados por su plan de conservaci¨®n. Es un premio para todos, porque la muralla est¨¢ habitada y forma parte de la vida de la villa. Encaramada en una colina y con fuero desde 1196, Labraza tambi¨¦n estrena, a partir del d¨ªa 19, una visita teatralizada en la que juglares, vig¨ªas y el alma en pena de un cura medieval muerto en extra?as circunstancias poblar¨¢n sus cuestas cada domingo. Muy cerca, el bonito Moreda de ?lava tiene un bar con vidilla, una docena de casas blasonadas, un antiguo trujal de aceite y un retablo barroco digno de una iglesia de capital. Por si fuera poco, el d¨ªa 22 celebran a sus patronas, santa Nunilo y santa Alodia, "las virgencillas", gemelas y m¨¢rtires decapitadas.

? Labraza (www.labraza.net). Reservar visitas en turismo de Laguardia, Elciego o Labastida.

?Moreda, para ver la iglesia o el trujal, llamar al Ayuntamiento: 945 60 18 93.