La peor manera de complicarse la vida
Los tipos inteligentes suelen complicarse la vida como idiotas. Un aragon¨¦s, soltero, de 41 a?os, al que llamaremos Pepe -nombre supuesto para que no pueda llegar a identificarse al menor que goza de especial protecci¨®n-, quer¨ªa ser padre a toda costa y ya se sabe lo testarudos que son algunos ma?os cuando se proponen algo.
En lugar de casarse y seguir el m¨¦todo tradicional, Pepe intent¨® adoptar a un ni?o ruso, pero el Instituto Aragon¨¦s de Servicios Sociales cort¨® sus expectativas al declararlo "no id¨®neo" el 6 de octubre de 2004. Como la obsesi¨®n nubla el juicio, lejos de conformarse, el tipo decidi¨® explorar otras v¨ªas alternativas para conseguir un beb¨¦.
Por medio de la familia de dos empleados suyos supo que en Uruguay viv¨ªa una mujer de 22 a?os embarazada, a la que llamaremos Claudia, sin recursos econ¨®micos, que ejerce la prostituci¨®n, que ya hab¨ªa entregado a uno de sus hijos a los propietarios de una farmacia y que estar¨ªa dispuesta a cederle el reci¨¦n nacido.
La obsesi¨®n por ser padre puede costarle a un hombre dos a?os y medio de c¨¢rcel
Ni corto ni perezoso, Pepe viaj¨® con su abogado a Montevideo el 6 de enero de 2005, donde permaneci¨® cinco d¨ªas para simular que ¨¦l podr¨ªa haber sido el padre biol¨®gico del ni?o y apalabrar las condiciones de la entrega. Tambi¨¦n proporcion¨® dinero a la madre de una de sus empleadas para que cuidase a la embarazada y que no le faltase nada.
A primeros de julio de 2005 naci¨® un rollizo beb¨¦ en el Hospital Pereira Rosell, de Montevideo, aunque nuestro protagonista hab¨ªa intentado un reconocimiento previo de paternidad por poderes para no tener problemas cuando fuese a recogerlo, pero que no fue admitido por la falta de validez del procedimiento en Uruguay.
El d¨ªa 25 del mismo mes, de nuevo en Am¨¦rica con el abogado, Pepe reconoci¨® al ni?o en el registro civil, aunque en la anotaci¨®n figura como "padre natural (no biol¨®gico)". El 4 de agosto, los dos varones regresaron a Espa?a con el beb¨¦ al que d¨ªas antes hab¨ªan intentado documentar como espa?ol en el consulado.
Hasta ah¨ª todo parec¨ªa perfecto, pero en la legaci¨®n advirtieron el chanchullo. Tras las pesquisas pertinentes, result¨® que el m¨¦dico que atendi¨® el parto certific¨® que ¨¦ste hab¨ªa sido a t¨¦rmino y que el ni?o no era prematuro, por lo que su concepci¨®n se situaba a principios de noviembre de 2004. La Direcci¨®n General de Migraciones del Ministerio del Interior de Uruguay comunic¨® al c¨®nsul espa?ol que la madre nunca hab¨ªa salido del pa¨ªs y que el supuesto padre no pudo serlo, puesto que no lleg¨® a Montevideo hasta enero, esto es, cuando la madre ya llevaba dos meses de gestaci¨®n. Adem¨¢s, la polic¨ªa espa?ola pudo establecer la simulaci¨®n al comprobar que el presunto padre no obtuvo su primer pasaporte hasta el 15 de diciembre de 2004, un mes despu¨¦s de la concepci¨®n del beb¨¦.
Todo ello configuraba un delito de alteraci¨®n fraudulenta de la paternidad, que deb¨ªa juzgarse en la Audiencia Nacional por haber sido cometido en el extranjero.
En el juicio, Pepe, que se ha negado a que se realice un an¨¢lisis de ADN para determinar la paternidad del menor, mantuvo que el ni?o pudo ser prematuro y que aunque inicialmente tuvo dudas de que ¨¦l fuera el padre biol¨®gico, ahora no descarta que lo sea.
Pantomima espectacular que se desmonta a poco que se escarbe en la causa. Porque la madre de una empleada de Pepe declar¨® en Uruguay que fue ella quien le avis¨® de la existencia de la joven embarazada, que por hacerle un favor a ¨¦l, se la llev¨® a su casa durante la gestaci¨®n, aunque recibi¨® dinero por los gastos ocasionados y para que la madre, de extrema pobreza, pudiera ir construyendo una vivienda. Adem¨¢s, en una declaraci¨®n sumarial, el tipo admiti¨® que sabe que no es el padre, aunque justific¨® que se trajo al beb¨¦ a Espa?a porque la madre le dijo que si no lo quer¨ªa lo abandonaba o lo tiraba a la basura y ¨¦l no quer¨ªa que acabara en un contenedor. ?Como si la idea inicial no hubiera sido conseguir un ni?o a toda costa!
Ahora, por el empecinamiento, Pepe puede ser condenado a dos a?os y medio de c¨¢rcel y el abogado, a dos, que es lo que solicita el fiscal para ellos. Pero peor todav¨ªa, como si la c¨¢rcel no fuera suficientemente mala, es que puede perder por siete a?os la tutela y patria potestad del beb¨¦ que contin¨²a inscrito como hijo suyo y que pasar¨ªa a depender de los Servicios Sociales de Arag¨®n.
Dec¨ªa la poetisa Margarita de Navarra que "el hombre es sabio... cuando reconoce que no hay peor enemigo que uno mismo".
Seguro que habr¨¢ alguna manera m¨¢s tonta de complicarse m¨¢s la vida, pero ahora mismo no se me ocurre c¨®mo.
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