Los talibanes matan a 31 rehenes en Kandahar
El Gobierno de Afganist¨¢n inform¨® ayer de que 31 civiles que hab¨ªan sido tomados como rehenes en la conflictiva provincia sure?a de Kandahar fueron asesinados a manos de la insurgencia talib¨¢n, que asegur¨® que todas las v¨ªctimas son soldados afganos.
El portavoz del Ministerio de Defensa, Zahir Azimi, explic¨® que un grupo de insurgentes detuvo varios autobuses que circulaban por el distrito de Maywand el pasado jueves y secuestr¨® a unas 50 personas, de las que al menos 31 fueron asesinadas. Seg¨²n la versi¨®n ofrecida por Azimi, todas las v¨ªctimas eran civiles.
Por su lado, el jefe de la polic¨ªa de Kandahar, Matitul¨¢ Khan Qaneh, asegur¨® que 40 de los secuestrados fueron trasladados a la zona de Band Timor, donde fueron asesinados por sus captores, mientras que los otros 10 fueron liberados. "Seg¨²n nuestra informaci¨®n sobre el terreno, los talibanes han matado a los 40 pasajeros restantes", explic¨®.
Sin embargo, el portavoz talib¨¢n, Qari Mohamed Yousif Ahmadi, desminti¨® la informaci¨®n facilitada por las autoridades y asegur¨® que "todas" las v¨ªctimas eran soldados afganos. Ahmadi explic¨® que los insurgentes acabaron con la vida de 27 miembros del Ej¨¦rcito afgano tras "arrestarlos" mientras viajaban en tres autobuses de pasajeros.
Documentaci¨®n militar
El portavoz talib¨¢n asegur¨® que antes de asesinarlos comprobaron su identidad, ya que llevaban documentaci¨®n militar. Ahmadi precis¨® que la detenci¨®n y asesinato fue realizado en cumplimiento de las ¨®rdenes de la c¨²pula talib¨¢n.
Los ataques de la insurgencia en la provincia de Kandahar -junto con Helmand, la zona con mayor presencia talib¨¢n de Afganist¨¢n- son frecuentes. En esas dos ¨¢reas, los talibanes tienen no s¨®lo su base de operaciones, sino tambi¨¦n su principal fuente de financiaci¨®n: el cultivo del opio.
El pasado 28 de septiembre, los talibanes afganos mataron de varios disparos a la mujer que ostentaba el m¨¢s alto rango en la polic¨ªa de Afganist¨¢n, Malalai Kakar. Kakar, de 41 a?os, fue asesinada por los fundamentalistas, quienes no tardaron en reivindicar la autor¨ªa del ataque, cuando acud¨ªa al trabajo en la ciudad meridional de Kandahar.
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