Irresistible Liverpool
Xabi Alonso resquebraja al Chelsea, que sumaba 86 partidos seguidos sin perder en Stamford Bridge, y a¨²pa a los 'reds' al liderato
Un coro sensacional ha alcanzado el liderato. Con un f¨²tbol peculiar pero automatizado, el ¨²ltimo y mejorado modelo del Liverpool resulta irresistible, hasta el punto de batir al Chelsea en Stamford Bridge, estadio inexpugnable desde hac¨ªa 86 partidos, desde la primavera de 2004, cuando el Arsenal se coron¨® en la Premier -el Bar?a, en la Champions, le venci¨® en 2006-. El ejercicio defensivo del Liverpool es perfecto: basculaciones compensadas, cero huecos para realizar el ¨²ltimo pase, constantes ayudas y l¨ªneas apretujadas al m¨¢ximo para restar tiempo de ejecuci¨®n al rival. Pero los reds, al contrario que en cursos anteriores, cobran protagonismo en campo ajeno y definen mejor. La segunda l¨ªnea tiene la culpa; y Xabi Alonso, la batuta.
CHELSEA 0 - LIVERPOOL 1
Chelsea: Cech; Bosingwa (Sinclair, m. 84), Carvalho, Terry, Ashley Cole; Obi Mikel; Kalou (Belletti, m. 57), Deco, Lampard, Malouda (Di Santo, m. 57); y Anelka. No utilizados: Cudicini; Ferreira, Ivanovic y Alex.
Liverpool: Reina; Arbeloa, Carragher, Agger, F. Aurelio; Alonso, Mascherano; Kuyt (Lucas, m. 87), Gerrard, Riera (Hyypia, m. 89); y Keane (Babel, m. 59). No utilizados: Cavalieri; Benayoun, Dossena y Pennant.
Gol: 0-1. M. 10. Xabi Alonso recoge un rechace en la frontal del ¨¢rea y define con la zurda.
?rbitro: Howard Webb. Mostr¨® la cartulina amarilla a Riera, Gerrard, Mascherano, Malouda, Ashley Cole y Deco.
Unos 35.000 espectadores en Stamford Bridge.
La sensaci¨®n de la Premier este a?o era el Chelsea. Doblegaba a los rivales con insultante facilidad y pisaba el ¨¢rea contraria a su antojo. La clave era Deco, que otorg¨® al equipo el primer toque -quiz¨¢ reminiscencia de su paso por el Bar?a-, algo de lo que carecen Ballack, Makelele y Obi Mikel, carrocer¨ªas de amplio despliegue, pero necesitados de un control para pasar. Lampard, m¨¢s dotado t¨¦cnicamente, no mezclaba con soltura por falta de apoyos y se especializ¨® en las llegadas desde la segunda l¨ªnea y en engatillar desde la frontal. Con Deco todo cambi¨®. Hasta que se toparon con los reds.
Terror¨ªfica en la misma medida que pragm¨¢tica, la medular del Liverpool cumple con precisi¨®n los dos cometidos b¨¢sicos del f¨²tbol: atacar y defender. De romper el ritmo rival se encarga el medio centro Mascherano, que exige al adversario tocar de primeras para evitar la patada o el robo del bal¨®n. Con unas piernas brutales que aguantan tantos kil¨®metros como moratones, Mascherano es el capataz de las demoliciones, el fiel escudero del otro eje: Xabi Alonso. Destila el espa?ol un f¨²tbol de claqu¨¦, especializado en guardar la pelota y entregarla -en corto y largo- donde se descongestiona el campo. No la pierde y la juega de maravilla. Y, como ayer, pisa el ¨¢rea cuando el equipo aprieta. As¨ª, un saque de banda mal contrarrestado por el Chelsea acab¨® en un bal¨®n muerto en la frontal. Alonso remach¨® con la zurda y, tras tocar en Ashley Cole, la pelota resquebraj¨® la cadera de Cech y la fortaleza de Stamford Bridge. La excelente medular la completa Gerrard, quien prueba los disparos a media distancia y reluce con el ¨²ltimo pase -se ech¨® de menos a Torres, lesionado. El Chelsea tuvo m¨¢s el cuero, pero lo mare¨® atr¨¢s y nunca conect¨® con Deco o Lampard, desactivados por completo.
Durante todo el curso pasado, el Liverpool fue incapaz de ganar a los grandes (Manchester, Arsenal o Chelsea). En ¨¦ste, ya bati¨® al United en Anfield y ayer al Chelsea, equipo de mal perder, con las entradas a destiempo de Ashley Cole, los codazos de Terry y las patadas de Mikel. No elabora mucho el Liverpool las jugadas. Pero ha pulido defectos como perder balones atr¨¢s o no desestabilizar desde las bandas, donde Riera brilla por la izquierda. Un Liverpool de aplauso, l¨ªder en solitario.
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