Los Lakers apuntan a los Celtics
La baza de Andrew Bynum relanza al equipo de Pau Gasol frente al Big Three de Boston, fiado a su experiencia y eficacia para repetir un t¨ªtulo con muchos aspirantes
Al mal tiempo buena cara. David Stern, el comisionado de la NBA, optimiza los recursos en los despachos de una Liga que se concedi¨® un respiro en las canchas gracias a dos acontecimientos capitales: la ansiada final entre los Celtics y los Lakers y el triunfo y la buena imagen que recuper¨® la selecci¨®n estadounidense en los Juegos Ol¨ªmpicos. Apoyado en ese colch¨®n, en la baraja de excelentes jugadores que se consolidan en la mejor Liga del mundo, en la carne fresca que llega de otros pa¨ªses, Europa y Argentina esencialmente, y en la expansi¨®n que se palpa en China, Stern puede gestionar con cierta tranquilidad los resortes para alimentar a la competici¨®n con mayor salario medio del deporte mundial: 4,1 millones de euros. Grandes jugadores y grandes duelos. Eso es lo que necesita la m¨¢quina televisiva para continuar haciendo posible el lujo de una competici¨®n que, por otra parte, se presenta apasionante por lo mucho que pueden dar de s¨ª dos cl¨¢sicos como los Lakers y los Celtics y el coro de magn¨ªficos equipos que baten el cobre por estar a su altura.
- La revancha deseada. Los Lakers no han cambiado mucho y, sin embargo, con la recuperaci¨®n de Andrew Bynum, lesionado desde enero, dan la sensaci¨®n estar en disposici¨®n de rendir mucho mejor que la pasada campa?a. Ahora poseen m¨¢s m¨²sculo, m¨¢s capacidad para percutir cerca del aro, m¨¢s dureza para hacer frente a los enormes p¨ªvots del torneo. Pau Gasol ya no est¨¢ tan solo all¨ª. De eso se puede beneficiar Kobe Bryant. Pero Phil Jackson tiene que ajustar las piezas, conseguir que Lamar Odom asuma el papel de sexto jugador si eso es lo que pretende alineando de nuevo a Radmanovic en el quinteto titular. La profundidad de banquillo que no tuvieron los Lakers el a?o pasado ser¨¢ una de las claves, m¨¢xime si Ariza, tambi¨¦n lesionado durante una gran parte de la temporada, contin¨²a subiendo el list¨®n. Los Celtics pueden acusar la baja de Posey, que recal¨® en los Hornets. No parece importarles a los campeones que se mantienen desafiantes como ya sucedi¨® en la final. "Somos mejor equipo que la pasada temporada y no me importa lo que los general managers hayan apostado por los Lakers", dice Doc Rivers, el entrenador del equipo de Boston que tambi¨¦n ha perdido el concurso de P.J. Brown. Alejado de los focos, sin ning¨²n representante en la selecci¨®n ol¨ªmpica, los Celtics dan la misma pinta que la pasada temporada en la que dominaron con todas las de la ley tanto en la fase regular como en los play offs. Nadie es capaz de repetir t¨ªtulo desde que consiguieran el triplete precisamente los Lakers de Shaquille O'Neal y Kobe Bryant entre 2000 y 2002.
- La pujanza de Chris Paul. En una Liga repleta de magn¨ªficos bases, con Deron Williams, Jason Kidd, Steve Nash, Chauncey Billups , Monta Ellis o Jos¨¦ Manuel Calder¨®n, Chris Paul se ha asentado como un l¨ªder capaz de poner en ¨®rbita a los Hornets. A sus 23 a?os, el primer jugador de la NBA capaz de dominar las estad¨ªsticas de asistencia y robos desde que lo consiguiera John Stockton en 1992, Paul contar¨¢ con un equipo similar al del a?o pasado reforzado por la presencia de ese sexto hombre estelar imprescindible en un aspirante al t¨ªtulo. La franquicia de New Orleans ha jugado fuerte pag¨¢ndole un contrato de casi 20 millones de euros por cuatro a?os a James Posey, el hombre que ya ha ganado dos anillos con los Heat de Miami y con los Celtics.
- Los Pistons ?a¨²n? Los de Detroit mantiene el mismo equipo que les dio el t¨ªtulo en 2004 y que les ha permitido estar en los play offs con asiduidad. El principal cambio est¨¢ en la primera silla de su banquillo. Cesado de forma fulminante Flip Saunders, el d¨ªa despu¨¦s de que los Pistons fueran eliminados por los Celtics, dej¨® su puesto a su antiguo ayudante Michael Curry. Los Pistons trataron de fichar a Carmelo Anthony, sin ¨¦xito, claro. Y por fin se han encomendado de nuevo a sus veteranos all-stars, Billups, Hamilton, Wallace, adem¨¢s del campe¨®n ol¨ªmpico Prince y el tambi¨¦n veterano McDyess. La energ¨ªa renovada se espera que provenga de la perla de la pasada temporada, Rodney Stuckey, un fino alero de 22 a?os y 1,96 metros, adem¨¢s de la dureza bajo los aros de Jason Maxiell, de 25 a?os y 2,01 metros, adem¨¢s del ¨²ltimo intento de recuperar al ex n¨²mero uno del draft de la promoci¨®n de Pau Gasol, Kwame Brown.
- ?La hora de Lebron James?La fuerza de la naturaleza, el jugador que fue saludado como el nuevo Michael Jordan desde que era apenas un adolescente, vuelve a la carga despu¨¦s de los ¨²ltimos play offs, que poco menos se plante¨® como yo contra todo el mundo con un resultado insatisfactorio. Los Cavaliers est¨¢n obligados a rearmar su potencial colectivo y eso pasa ante todo por conseguir que varios de sus componentes eleven su rendimiento, caso de Varejao o Pavlovic, y de que sepan extraer el m¨¢ximo jugo a su nueva incorporaci¨®n, Mo Williams, el base adquirido de los Bucks que relegar¨¢ a Delonte West en el quinteto titular.
- Factores Artest y O'Neal. La NBA siempre concede una nueva oportunidad. Para muestra, m¨¢s de un bot¨®n. Ron Artest, el tipo de los mil y un conflictos, ha sido fichado por los Rockets, un equipo con muchas aspiraciones, que ya la pasada temporada despunt¨® y se fue hasta las 55 victorias pese a una inoportuna lesi¨®n de Yao Ming. Con ambos, adem¨¢s de McGrady, Scola y Francis, los de Houston tratar¨¢n de progresar en la dif¨ªcil Conferencia Oeste en la que San Antonio Spurs, Utah Jazz, Phoenix Suns, Dallas Mavericks y Portland Trail Blazers son los principales aspirantes a situarse en buena posici¨®n en los play offs. En la Conferencia Este, el objetivo de los Raptors ser¨¢ meterse, cuando menos, en la segunda ronda. Para ello han repescado del dolce far niente a Jermaine O'Neal, que languidec¨ªa en Indiana. La fortaleza del p¨ªvot, sobre el papel, es ciertamente lo que necesitaba un equipo con mucho talento pero poco m¨²sculo bajo los aros. Si O'Neal cumple con lo que se espera de ¨¦l, si vuelve a ser el de sus primeros tiempos en Indiana, los Raptors pueden aspirar a llegar lejos. No ser¨¢ una cuesti¨®n menor haber resuelto definitivamente el conflicto existencial que se les plante¨® la pasada temporada cuando no supieron ver que Jos¨¦ Manuel Calder¨®n se hizo claramente acreedor al puesto de base titular adjudicado a TJ Ford. El jugador espa?ol, ya con un contrato a la altura de su rendimiento, 5,8 millones de euros esta temporada, dirigir¨¢ a un equipo muy remozado, pero que mantiene un esqueleto en apariencia muy consistente con Bosh, Parker, Moon, Bargnani y Kapono.
- Los espa?oles consagrados. Jam¨¢s una temporada de la NBA se present¨® tan densa y rica desde el punto de vista espa?ol. Jorge Garbajosa prefiri¨® dar carpetazo a su desigual experiencia en Toronto para recalar en el Khimki, uno de los nuevos ricos rusos, mientras que Juan Carlos Navarro desisti¨® en su empe?o de conseguir un contrato digno de su categor¨ªa en la NBA y prefiri¨® regresar al Bar?a. A¨²n as¨ª, los desaf¨ªos empiezan a ser de primer orden para los espa?oles. Pau Gasol apunta claramente al t¨ªtulo y, de paso, a ganarse un puesto en el All-Star. Jos¨¦ Manuel Calder¨®n ya acarici¨® el a?o pasado la posibilidad de acudir a la convenci¨®n anual de los mejores jugadores de la NBA. Por m¨¦ritos propios, atendiendo a las estad¨ªsticas, hizo m¨¢s que suficiente. Pero en la NBA, adem¨¢s de la calidad individual, se valora tambi¨¦n la trayectoria del equipo en cuesti¨®n. Esta vez, los Raptors est¨¢n llamados a dar un salto adelante y, de ser as¨ª, Calder¨®n tendr¨¢ muchas m¨¢s opciones de poder estar el pr¨®ximo mes de febrero en el escaparate que se montar¨¢ esta vez en Phoenix.
- Los espa?oles que se abren paso. Tambi¨¦n puede estar all¨ª Rudy Fern¨¢ndez, un jugador que ha impactado como pocos en Estados Unidos despu¨¦s de su actuaci¨®n los Juegos Ol¨ªmpicos. Recibido en Portland con los honores de un h¨¦roe, parece que Rudy puede contar con bastantes minutos de juego en un equipo como los Blazers, llamado a ser una de las revelaciones de la tempoada. De aprovecharlos, el escolta mallorqu¨ªn tambi¨¦n optar¨¢ a ser el rookie del a?o. Los grandes jugadores quieren estar en la NBA, aunque para ello deban renunciar incluso a salarios superiores como puede ser el caso de Rudy, que en su primer a?o en Portland percibir¨¢ unos 852.000 euros, bastante menos de lo que cobrar¨ªa en Europa. Pero los jugadores son conscientes de que la NBA es el mejor escenario y de que, con trabajo, perseverancia y una pizca de suerte, se cumple el cuento de la lechera. ?se ha sido el caso de Sergio Rodr¨ªguez, al que los Blazers han renovado hasta 2010 haciendo valer una cl¨¢usula de pr¨®rroga de su contrato al igual que Roy y Aldridge. En un caso similiar al de Rudy, en cuanto a contrato y perspectivas de futuro se refiere, se encuentra Marc Gasol. Ha empezado con buen pie su experiencia en Memphis donde se ha ganado un puesto en el equipo titular. Los Grizzlies, por lo dem¨¢s, despu¨¦s de su decepcionante pasada temporada, en la que s¨®lo consiguieron ganar 22 de sus 82 partidos, deben escalar posiciones. La experiencia acumulada por Gay, Conley y Lowry, adem¨¢s de la aportaci¨®n de veteranos como Jaric y Walker y la savia nueva que aportan Gasol y O.J. Mayo deben devolverle a la senda que perdieron hace ya varias temporadas.
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