'Yihadismo' en Espa?a

En el caso del 11-M y ahora en el de la llamada Operaci¨®n Nova -intento de atentado contra la Audiencia Nacional que no lleg¨® a cuajar- la absoluci¨®n por el Tribunal Supremo de una parte de los islamistas radicales condenados por la Audiencia Nacional no desvirt¨²a el hecho nuclear de la investigaci¨®n policial y que ha quedado judicialmente probado: la existencia en ambos de una c¨¦lula yihadista fuertemente cohesionada e inspirada en Al Qaeda. Existe, sin embargo, una diferencia radical: en el primero los terroristas consiguieron sus prop¨®sitos y en el segundo todo qued¨® en un intento al descubrirse a tiempo.

Que el Supremo haya absuelto a 14 de los 20 condenados por la Audiencia Nacional en la Operaci¨®n Nova -un caso cuya investigaci¨®n se inici¨® antes del 11-M pero concluido judicialmente despu¨¦s- no pone en entredicho la actuaci¨®n previsora y diligente de las fuerzas de seguridad ni la instrucci¨®n judicial. Ni siquiera puede tomarse como un correctivo al modo de actuar de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que enjuici¨® el caso durante semanas. ?sta es una cr¨ªtica superficial procedente sobre todo de sectores que siguen sin asimilar que las fuerzas de seguridad y la Audiencia Nacional desbarataran el culebr¨®n sensacionalista sobre el 11-M.

Lo que parece deducirse de la sentencia del Supremo es una divergencia de criterio con la Audiencia Nacional sobre el alcance del delito de integraci¨®n en banda armada aplicado al terrorismo yihadista y la valoraci¨®n de la prueba relativa a dicho delito. La Audiencia Nacional tiende a integrar en la c¨¦lula terrorista no s¨®lo al n¨²cleo central y m¨¢s activo, sino a los c¨ªrculos conc¨¦ntricos. El Supremo, en cambio, se inclina por limitar dicha integraci¨®n si no aparecen actos que la avalen m¨¢s all¨¢ de la ideolog¨ªa extremista y radical compartida por todos ellos. ?sa fue la doctrina que llev¨® al Supremo a absolver a algunos de los condenados en el 11-M y que la Audiencia Nacional dice haber seguido en su sentencia sobre la Operaci¨®n Nova. Lo que hace pensar que o bien la Audiencia no la ha interpretado correctamente o bien que el Supremo la ha endurecido.

La divergencia ser¨ªa grave si tradujese un desajuste o falta de adaptaci¨®n de la respuesta penal al terrorismo, pensada sobre todo para ETA, al de car¨¢cter yihadista, una posibilidad que no excluye la sentencia del Supremo. Si fuera as¨ª habr¨ªa que corregirla, bien por un cambio de jurisprudencia, bien por una reforma legal, pues no debe olvidarse que Espa?a sigue bajo la amenaza del terrorismo que cometi¨® el atentado del 11-M. La experiencia indica que este terrorismo, tan distinto del etarra, no necesita de grandes estructuras para pasar de la idea al acto; la disposici¨®n suicida compensa la penuria de medios y las carencias organizativas. El C¨®digo Penal deber¨ªa poder intervenir en la fase preparatoria del atentado, antes de que ¨¦ste se produzca.