'El capital' vuelve a las estanter¨ªas

El arzobispo de M¨²nich y Freising, Reinhard Marx, dice sin tapujos que la especulaci¨®n "salvaje" es un "pecado" y advierte, por ejemplo, que el auge del socialismo en Latinoam¨¦rica es una consecuencia de la actual crisis financiera. "Un populismo de izquierdas en Venezuela es igual de peligroso que un populismo de derechas. El mesianismo pol¨ªtico siempre es peligroso", sostuvo Marx en una entrevista con la revista Der Spiegel con motivo de la publicaci¨®n de su libro El Capital. S¨ª, as¨ª es, otro Marx vuelve casi 150 a?os despu¨¦s a publicar un libro con el mismo nombre. La encuadernaci¨®n y la cubierta tienen incluso los mismos colores y fuentes que la editorial Dietz utilizara para la primera edici¨®n de El Capital de Karl Marx.

El autor dice que su tocayo Karl Marx "no est¨¢ muerto y hay que tomarlo en serio"

El arzobispo aboga por que la econom¨ªa sea redise?ada de acuerdo con unas normas ¨¦ticas y reclama un nuevo orden tanto econ¨®mico como pol¨ªtico. "Esas reglas de juego deben tener una cualidad ¨¦tica. En ese sentido, la doctrina social de la Iglesia es cr¨ªtica con el capitalismo", se?ala. Marx avisa, adem¨¢s, de que "viejas ideolog¨ªas" -en alusi¨®n al socialismo populista- est¨¢n resurgiendo como ya predijo el papa Juan Pablo II, debido a la expansi¨®n del "capitalismo radical". "Un capitalismo sin un marco regulatorio es hostil a las personas", afirma el religioso. Adem¨¢s, a?ade que "el capitalismo salvaje es un pecado" por su relaci¨®n directa con el de la "codicia". Karl Marx "no est¨¢ muerto y hay que tomarlo en serio", clama Reinhard Marx.

Comienza el arzobispo en su libro con una carta a su "querido tocayo" muerto en 1883, al que pide que reconozca ahora su equivocaci¨®n respecto a la inexistencia de Dios. En el resto del texto hay otros reproches a su predecesor. "Hay que confrontarse con la obra de Karl Marx, que nos ayuda a entender las teor¨ªas de la acumulaci¨®n capitalista y el mercantilismo", afirm¨® el arzobispo en la presentaci¨®n de su libro.

Ello no implica, sin embargo, que haya que "dejarse arrastrar a las insensateces y atrocidades cometidas en su nombre en el siglo XX", sino saber interpretar debidamente su contenido. El arzobispo califica de "social-¨¦ticos" los principios que defiende en su tratado y que describe como un libro "concienzudamente trabajado", cuyo lanzamiento ha coincidido con la crisis financiera y el debate en torno al capitalismo.

Reinhard Marx considera que el catolicismo debe aportar una visi¨®n "¨¦tica y social" para una reforma "sensata" de los sistemas financieros y apuesta por empezar limitando los sueldos de los directivos y frenar la avaricia empresarial.

El economista de la Universidad Libre de Berl¨ªn (FU) Klaus Peter Kisker resume las diferencias de ambos Marx en una: "La Iglesia cat¨®lica, igual que muchos actores sociales, se han apuntado a criticar el capitalismo y la globalizaci¨®n pero no cuestionan las verdaderas causas de las crisis y de las desigualdades sociales". Kisker no reprocha a la Iglesia y a otros cr¨ªticos su falta de formaci¨®n marxista, sino m¨¢s bien que "no saben capitalismo". Para tratar de remediar esto, Kisker ofrece cada semestre el curso Marx Reloaded, uno de los grandes ¨¦xitos de la facultad de Econ¨®micas.

Sin duda, la crisis financiera mundial ha agudizado el escepticismo alem¨¢n ante la globalizaci¨®n econ¨®mica y los mercados de capitales. Todo ha renovado el inter¨¦s en las teor¨ªas de izquierda y tanto un Marx como el otro se venden como rosquillas en las librer¨ªas.