Europa se cree su papel espacial
La ESA potencia sus sat¨¦lites y otros proyectos de investigaci¨®n y tecnolog¨ªa
?Para qu¨¦ sirve el espacio? ?Llega al ciudadano el dinero que se invierte en tecnolog¨ªas e investigaci¨®n espaciales? Jean-Jacques Dordain, director general de la Agencia Europea del Espacio (ESA) lo tiene muy claro: "Podr¨ªamos desenchufar todos los sat¨¦lites durante un d¨ªa, una vez al a?o, para demostrar que nadie puede vivir sin el espacio, porque si cort¨¢ramos la se?al de los sat¨¦lites no habr¨ªa taxista alguno que se atreviera a circular por Par¨ªs, por ejemplo; el tr¨¢fico a¨¦reo intercontinental se ver¨ªa muy perjudicado; tampoco tendr¨ªamos previsiones meteorol¨®gicas con cinco d¨ªas de antelaci¨®n... Y si encima hacemos que ese d¨ªa coincida con la final de un mundial de f¨²tbol, imagine lo que eso supondr¨ªa: nadie ver¨ªa el partido en directo".
La conferencia ministerial dedica 10.000 millones en tres a?os
Para mantener bien enchufados todos los sat¨¦lites o, en concreto, para hacer nuevos equipos espaciales avanzados, los 18 pa¨ªses miembros de la ESA han dise?ado el plan a seguir en los pr¨®ximos a?os -en forma de financiaci¨®n concreta en proyectos concretos- en la conferencia ministerial de la agencia, celebrada la semana pasada en La Haya (Holanda). En total se han aprobado inversiones por casi 10.000 millones de euros para las actividades espaciales en los pr¨®ximos tres a?os, aunque algunos programas tienen mayor horizonte temporal.
Una nueva generaci¨®n de sat¨¦lites Meteosat para hacer predicciones mucho m¨¢s precisas que hasta ahora, un veh¨ªculo todoterreno para explorar Marte (ExoMars), el desarrollo de los cohetes Ariane y Vega, la construcci¨®n de naves autom¨¢ticas de transporte ATV, proyectos de telecomunicaciones y nuevas tecnolog¨ªas, son las principales novedades que han recibido luz verde de los ministros. Adem¨¢s, el programa cient¨ªfico y de exploraci¨®n (obligatorio para todos los pa¨ªses miembros de la ESA y financiado en proporci¨®n al PIB de cada uno), ha logrado un incremento del 3,5% anual.
Excepto para este programa de ciencia (que supone la cuarta parte del presupuesto de la ESA), cada pa¨ªs ha definido, seg¨²n sus intereses y posibilidades, en qu¨¦ proyectos participa y con qu¨¦ financiaci¨®n. Y los ministros, en tiempos de crisis, se han mirado mucho la cartera en La Haya antes de asumir compromisos financieros, con la excepci¨®n de Alemania que, comentaron otras delegaciones, ha acudido a la conferencia con muchos euros para invertir en el espacio.
Espa?a aporta el 8% del presupuesto de la ESA y en La Haya se ha comprometido a dedicar 677 millones de euros a proyectos de la agencia en tres a?os, seg¨²n anunci¨® Cristina Garmendia, ministra de Ciencia e Innovaci¨®n y representante espa?ola en la conferencia. "Hemos apostado, sobre todo, por dos programas nuevos: el Meteosat de tercera generaci¨®n, en el que vamos a participar con un 12% [de los 860 millones aprobados], y una iniciativa nueva, denominada de conocimiento del medio espacial, cuyo objetivo ser¨ªa proteger a los sat¨¦lites en ¨®rbita de los factores que pueden amenazarlos, como meteoritos, basura espacial y erupciones solares", explic¨® Garmendia.
En cuanto a la explotaci¨®n de la Estaci¨®n Espacial Internacional (ISS), la mayor¨ªa de los ministros han mostrado bajo inter¨¦s (que se traduce en pocas contribuciones econ¨®micas) y los acuerdos de financiaci¨®n han estado protagonizados casi en exclusiva por Francia, Alemania e Italia. Sin embargo, la ISS va ¨ªntimamente unida al destacamento de astronautas de la ESA, que actualmente est¨¢ terminando el proceso de selecci¨®n de nuevos miembros. Unos ochenta aspirantes -elegidos entre varios miles que se presentaron a la convocatoria de hace unos meses- quedan ahora en la lista restringida. Tras las ¨²ltimas pruebas, Dordain elegir¨¢ cuatro o cinco nuevos astronautas europeos.
De los casi 1.400 millones de euros aprobados en la Haya para explotaci¨®n de la ISS, el 80% se dedica a la construcci¨®n y lanzamiento de nuevas unidades del carguero autom¨¢tico ATV, que la ESA estren¨® este a?o con gran ¨¦xito. Sin embargo, el plan para desarrollar estas naves hacia un modelo m¨¢s avanzado, el ARV, ha logrado s¨®lo 19,3 millones. Pero este plan ser¨ªa para despu¨¦s de 2016, as¨ª que puede replantearse y lograr m¨¢s apoyo en los pr¨®ximos a?os.
"Creo, honestamente, que los resultados del Consejo ministerial de la ESA han de valorarse de manera positiva: los 18 estados miembros han aprobado la financiaci¨®n de nuevos programas, como la tercera generaci¨®n de Meteosat y ExoMars, y la continuaci¨®n de importantes proyectos para Europa, como GMES/Kop¨¦rnicus [de observaci¨®n de la Tierra], los lanzadores de la familia Ariane y la Estaci¨®n Espacial Internacional", coment¨® el espa?ol Maurici Lucena, presidente del Consejo de delegados de la ESA. "Es verdad que la crisis econ¨®mica internacional ha obligado a moderar la ambici¨®n de algunos de los planes inicialmente previstos, pero, al mismo tiempo, ha servido para desmostrar que, cualesquiera que sean las circunstancias, Europa considera que la tecnolog¨ªa espacial es fundamental para el desarrollo de sus pol¨ªticas".
Con destino al suelo de Marte
Con un presupuesto de poco m¨¢s de 2.300 millones de euros para cuatro a?os, el programa cient¨ªfico de la ESA tiene que llevar adelante sus misiones de astrof¨ªsica y exploraci¨®n planetaria m¨¢s osadas. Adem¨¢s de completar las que est¨¢n en desarrollo, como la Beppi Colombo, una nave que ir¨¢ a Mercurio, la agencia tiene que seleccionar los proyectos para dentro de ocho o diez a?os. Uno bien colocado es el Solar Orbiter, una nave para estudiar la estrella de cerca, que podr¨ªa partir hacia 2017. Otra propuesta es una misi¨®n para buscar planetas extrasolares similares a la Tierra; y una tercera se dedicar¨ªa a investigar la materia oscura del universo, explic¨® en la reuni¨®n de La Haya David Southwood, director del programa cient¨ªfico de la ESA. La decisi¨®n sobre cu¨¢l o cu¨¢les se hacen se tomar¨¢ en 2009.
Pese a ser uno de los planes m¨¢s espectaculares, el futuro veh¨ªculo de exploraci¨®n de la superficie de Marte, ExoMars, no sali¨® muy bien parado de la reuni¨®n de los ministros. El proyecto (financiado con contribuciones voluntarias de los pa¨ªses de la ESA) estaba aprobado con una financiaci¨®n de 600 millones de euros, pero hace falta otro tanto.
En La Haya se han logrado s¨®lo 250 millones de los 600 a?adidos (15 millones aportados por Espa?a), y se ha decidido mantener abierta la convocatoria en 2009 para intentar captar m¨¢s dinero europeo y buscar colaboraciones con Estados Unidos y con Rusia.
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