Dec¨¢logo para entender a Obama
La formaci¨®n de su Gabinete, la principal decisi¨®n tomada hasta ahora por Barack Obama como futuro presidente de Estados Unidos, deja algunas ense?anzas sobre su estilo de gobierno y ofrece algunas respuestas a las expectativas de su gesti¨®n. ?stas son las m¨¢s destacadas:
1. Competencia sobre ideolog¨ªa. Despu¨¦s de ocho a?os en los que la Administraci¨®n norteamericana ha estado en manos de un grupo de activistas neoconservadores que arruinaron pol¨ªtica, econ¨®mica y moralmente a este pa¨ªs en aras de sus enso?aciones ideol¨®gicas, Obama no ha ca¨ªdo en la tentaci¨®n de sustituirlos por otros de distinto signo pol¨ªtico. Ha optado por los mejores en cada ¨¢rea, sin atender a la filiaci¨®n partidista. Dem¨®cratas y republicanos convivir¨¢n en un Gabinete de centristas y moderados.
El modelo de un 'Gobierno de rivales' revela la gran confianza del presidente electo en su capacidad de di¨¢logo
2. Competencia sobre imagen. Obama no ha jugado con su Gobierno el juego de los mensajes encubiertos o del impacto medi¨¢tico. Nadie ha reparado en cu¨¢ntas mujeres, cu¨¢ntos negros, cu¨¢ntos cat¨®licos o cu¨¢ntos homosexuales hay en el Gabinete. No hay sorpresas extravagantes ni ocurrencias dif¨ªciles de explicar. Tampoco ha buscado Obama los nuevos rostros del cambio. Las caras del cambio han resultado ser viejos conocidos en la labor de gobernar.
3. Competencia sobre lealtad y amistad. Muy pocos de los nombrados tienen antecedentes de colaboraci¨®n directa con Obama o de deberle su carrera pol¨ªtica. Al contrario, la mayor¨ªa de ellos presentan sus propias y extensas credenciales, en algunos casos de sonora oposici¨®n al presidente electo.
4. Pragmatismo. El pragmatismo fue la principal cualidad que Obama dijo el lunes compartir con el equipo elegido para trabajar con ¨¦l. Tanto la pol¨ªtica econ¨®mica como la pol¨ªtica exterior est¨¢n en manos de personas con tradici¨®n de hacer en cada momento lo que consideran mejor para el pa¨ªs, con la flexibilidad que la ¨¦poca requiere.
5. Aceptaci¨®n del riesgo. Decenas de columnistas han alertado a Obama sobre el peligro de rodearse de personalidades tan fuertes. ?l ha dicho que prefiere eso a una Casa Blanca de pensamiento ¨²nico, lo que habla de un presidente poco acomodaticio.
6. Apuesta por el di¨¢logo. El modelo de un Gobierno de rivales revela una gran confianza de Obama en su capacidad de di¨¢logo y persuasi¨®n, lo que puede ser una gran arma durante su Administraci¨®n. No s¨®lo para poner orden entre egos tan poderosos como los de Larry Summers o Tim Geithner, Hillary Clinton o James Jones, sino para tratar con otros caudillos internacionales.
7. El 'caso Hillary'. La forma en la que Obama ha resuelto su largo enfrentamiento con Hillary Clinton, otorg¨¢ndole el puesto estrella del Gobierno, le garantiza al presidente que su rival en el partido va a estar a su lado -y no enfrente- cuando, m¨¢s que probablemente, llegue la ¨¦poca de vacas flacas que la creciente crisis econ¨®mica anticipa. Obama ha demostrado con esa decisi¨®n que tambi¨¦n tiene recursos para la peque?a y denostada pol¨ªtica de Washington.
8. La relatividad de las promesas electorales. En sus primeros pasos, Obama ha dado a entender que va a condicionar sus promesas electorales a las exigencias de los tiempos. Su decisi¨®n de escuchar a los mandos militares antes de anunciar un plan de retirada de Irak es el mejor ejemplo. En algunas intervenciones, el presidente electo ha explicado que su obligaci¨®n, una vez elegido, es la de tratar de hacer compatibles las aspiraciones de quienes votaron por ¨¦l con las demandas de aquellos que votaron por John McCain.
9. El reino de los intelectuales. Doce de los 18 nombramientos hechos hasta ahora son de graduados en universidades de la Ivy League (Harvard, Yale, Columbia, Brown, Dartmouth, Cornell, Princeton y University of Pennsylvania). La vocaci¨®n populista y rural de los republicanos ha sido sustituida por el refinamiento y el conocimiento.
10. El reino de la NBA. No s¨®lo el presidente electo juega al baloncesto casi a diario y es capaz de anotar con facilidad desde fuera del ¨¢rea de tres puntos, sino que al menos tres de sus m¨¢s destacados colaboradores (James Jones, Eric Holder y Susan Rice) practicaron con distinto ¨¦xito ese deporte en su juventud.
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