"Hasta que nos auxiliaron, los minutos se hicieron eternos"

Otros tres supervivientes del accidente de Spanair, dos de ellos desde Canarias y a trav¨¦s de videoconferencia, y el tercero en Madrid, prestaron declaraci¨®n ayer ante el juez instructor, Juan David P¨¦rez.

Beatriz Reyes y Leandro Ortega, dos de los 18 pasajeros que sobrevivieron a la tragedia (154 muertos), coincidieron en que no pod¨ªan precisar lo que tardaron las asistencias en atender a los heridos, pero s¨ª en que les pareci¨® "una eternidad". Reyes, de 41 a?os, fue la pasajera que sufri¨® menos da?os en el accidente (una leve fractura en la pierna derecha), y, de hecho, la primer superviviente que abandon¨® el hospital. Ante el juez, relat¨® que regresaba sola a Gran Canaria desde Madrid tras unas vacaciones en Sur¨¢frica. Era su tercer vuelo en dos d¨ªas. Recuerda que la primera maniobra de despegue fue abortada y que dos t¨¦cnicos subieron a la cabina. Poco despu¨¦s, bajaron los t¨¦cnicos y comenz¨® el segundo despegue. Fue cuando sinti¨® que el aparato "no cog¨ªa velocidad" suficiente. A trav¨¦s de la ventanilla, vio que un ala de la nave "giraba", e instantes despu¨¦s not¨® "una fuerte sacudida" que le nubl¨® la vista. Ella misma se zaf¨® de los restos del fuselaje. Se hizo un torniquete en la pierna herida. Antes de que llegaran las emergencias, tuvo tiempo de auxiliar a dos ni?os que hab¨ªan quedado atrapados bajo unos asientos.

Leandro Ortega, de 22 a?os, lleg¨® algo nervioso al juzgado canario desde el que mantuvo la videoconferencia con Madrid. Cont¨® que desde el primer momento presinti¨® que algo iba mal. Se encogi¨® en su asiento, agach¨® la cabeza y apret¨® fuertes las rodillas contra el respaldo de delante. Tras el impacto, qued¨® atrapado en un amasijo de hierros y equipajes. No pod¨ªa moverse. Era muy angustiante porque, adem¨¢s, sent¨ªa c¨®mo iba subiendo el agua del arroyo en el que cay¨® el avi¨®n. Estuvo a punto de morir ahogado. "No pod¨ªa gritar porque el agua me llegaba a la boca", coment¨®. Un bombero le salv¨® la vida.

En Madrid declar¨® Rafael Vidal, de 31 a?os. Vidal coment¨®: "No respeto la memoria de los muertos. Si el piloto hizo algo mal, que se sepa", coment¨® con frialdad.