El Bar?a cede ante el Shakhtar

El Barcelona perdi¨® su condici¨®n de invicto en el Camp Nou despu¨¦s de un partido intrascendente contra el Shakhtar Donetsk. A nadie le import¨® porque la comidilla de la afici¨®n azulgrana versaba sobre la destituci¨®n de Schuster y los posibles rivales en los octavos de final y no en la actuaci¨®n de su equipo en la Copa de Europa, sellada ya su clasificaci¨®n en Lisboa. El encuentro no ten¨ªa inter¨¦s y, a fin de cuentas, result¨® insustancial. Apenas hubo tensi¨®n competitiva y la mecha del f¨²tbol no prendi¨® nunca, ni siquiera en el Shakhtar, cuya efectividad fue demoledora frente a un Bar?a tan acad¨¦mico como falto de pegada y especialmente vulnerable en defensa.

Aunque s¨®lo se prest¨® atenci¨®n al equipo titular para deducir que los ausentes ser¨ªan precisamente los que jugar¨ªan el s¨¢bado contra el Madrid, el Bar?a fue un equipo tan poco solvente como reconocible por su despliegue en cancha ajena, su determinaci¨®n a la hora de afrontar el partido y su inter¨¦s en protagonizar la mayor¨ªa de jugadas. El Shakhtar, en cambio, ni siquiera repar¨® en la rebajada alineaci¨®n del rival sino que jug¨® como si enfrente tuviera a los titulares azulgrana y se sali¨® con la suya con oficio. El plantel de Lucescu se repleg¨® muy bien en su cancha y s¨®lo se estir¨® en situaciones de superioridad para cantar gol, uno detr¨¢s de otro, casi siempre con Gladkiy a la cabeza.

La mecha del f¨²tbol no prendi¨® nunca, ni siquiera en el demoledor Shakhtar

Jug¨® siempre a contracorriente el Barcelona. No hab¨ªa manera de montar ni acabar una jugada, as¨ª que los remates eran m¨¢s bien escasos. Hleb capitaliz¨® la ofensiva con sus desmarques y tiros a media distancia, acompa?ado normalmente por Bojan. El mayor inconveniente para los delanteros era que recib¨ªan de cara a su propia porter¨ªa, sin capacidad de sorpresa, bien defendidos por la zaga contraria, contenta por poder actuar a favor de marcador. Al Barcelona le falt¨® justamente talento, creatividad, capacidad para desequilibrar en la ¨²ltima jugada. A veces no arm¨® el ¨²ltimo pase y en otras no dio con la manera de enfocar a Pyatov.

Acomodado en la cancha y a gusto con el marcador, el Shakhtar ni siquiera tuvo necesidad de mostrar su condici¨®n de equipo pendenciero, calificativo que se ha ganado por el n¨²mero de faltas y tarjetas acumulado en el torneo. La afici¨®n incluso mir¨® con buenos ojos al equipo de Ucrania despu¨¦s de que Guardiola se?alara al central Chygrynski y al medio Jadson como futbolistas especialmente interesantes y de que no jugara Brandao, un brasile?o que mont¨® un numerito de mucho cuidado en la ida. Poco exigidos, los visitantes patrullaron por el estadio sin demasiadas preocupaciones ante un contrario inofensivo. Ning¨²n azulgrana se reivindic¨® como aspirante a disputar la titularidad para el cl¨¢sico.

Hubo detalles incluso sorprendentes como la entrada sin venir a cuento de Bojan a Kucher que le cost¨® una tarjeta. Los saques de esquina se suced¨ªan en el marco del Donetsk, se?al del empuje azulgrana y tambi¨¦n de su falta de precisi¨®n o acierto de la defensa del Shakhtar. Al Bar?a le escoci¨® el segundo gol de Gladkiy y Sylvinho puso a los azulgrana en el encuentro con un remate armado despu¨¦s de un fuera de banda. Ni siquiera el tercer gol del Donetsk, en un remate de Fernandinho, atemper¨® el arrebato del Barcelona.

Busquets culmin¨® una asistencia de Gudjohnsen y oblig¨® al Shakhtar a sacar su repertorio de tretas. Al Bar?a le falt¨® entonces cabeza para evitar la derrota despu¨¦s de 20 partidos consecutivos sin perder. Aunque dolorosa, la derrota entraba dentro de las posibilidades despu¨¦s de que Guardiola cantara la lista de convocados. Al Bar?a no le preocupaba el Shakhtar sino el cl¨¢sico por m¨¢s que el equipo de Donetsk pueda presumir de haber acabado con la imbatibilidad azulgrana en el Camp Nou.