Esc¨¢ndalo en homenaje a Kandinsky

El esc¨¢ndalo ha rodeado al principal premio de arte moderno de Rusia -el Kandinsky, instituido el a?o pasado-. Gritos y manifestaciones antifascistas acompa?aron la ceremonia en la que se dio a conocer el galard¨®n, celebrada en el complejo Vinzavod, principal centro de exposiciones de vanguardia de Mosc¨². El culpable del gran incidente fue el ganador Alex¨¦i Bel¨¢yev-Gintovt, 43 a?os, pol¨¦mico artista de ideas nacionalistas y activo miembro del reaccionario partido Euroasia.

Bel¨¢yev-Gintvot gan¨® los 40.000 euros del premio con Patria-Fliglia, una serie marcadamente nacionalista, de una est¨¦tica tomada de la ¨¦poca comunista y de las tradiciones de la Iglesia ortodoxa. Como ¨¦l mismo reconoce, su estilo mezcla la tradici¨®n de la pintura de iconos con el arte sovi¨¦tico. No es de extra?ar que uno de sus colores preferidos sea el rojo y que una de las obras de la serie ganadora sea una inmensa estrella roja tridimensional.

Anatoli Osmolovski, ganador del a?o pasado, no se pudo contener e interrumpi¨® el discurso de agradecimiento de Bel¨¢yev-Gintvot con gritos de "?Verg¨¹enza, verg¨¹enza!", despu¨¦s de lo cual muchas personas se levantaron y abandonaron la sala con exclamaciones de protesta.

Para Osmolovski, la serie ganadora "es una mezcla de modernismo naif y vulgaridad". "No hay arte, Bel¨¢yev-Gintvot es un fascista", sentenci¨®.

En anticipaci¨®n del resultado, un grupo de j¨®venes izquierdistas se hab¨ªa manifestado con pancartas y gritos antifascistas a la entrada del complejo Vinzavod, la f¨¢brica decimon¨®nica convertida hoy en museo de arte moderno.

Pero a Bel¨¢yev-Gintvot no le hacen mella ni las manifestaciones en su contra ni las acusaciones de fascista. "Mi ¨²nico tema es la patria, me concentrar¨¦ en ¨¦l y mi arte siempre ser¨¢ sobre nuestra grande y hermosa patria", explica, para luego exclamar: "?Rusia es eterna!".

Como dijo el fil¨®sofo Bor¨ªs Groys en las palabras que precedieron al anuncio del ganador, "la orientaci¨®n pol¨ªtica de los tres finalistas es tan clara, que la decisi¨®n tiene que ser necesariamente tanto pol¨ªtica como est¨¦tica". Los otros dos artistas que llegaron a la final fueron el comunista Bor¨ªs Orlov, con su Desfile de cuerpos celestes, y el anticomunista Dmitri G¨²tov, con Usado.

Para Joseph Backstein, organizador de la Segunda Biennale de Arte de Mosc¨², no hay nada extraordinario en la actual politizaci¨®n del arte en Rusia, pues se distingu¨ªa por ello al menos en el siglo pasado. "Los finalistas hoy est¨¢n siguiendo las tradiciones de su pa¨ªs", manifest¨®.

La mayor¨ªa de los cr¨ªticos de arte consideran, sin embargo, que lo importante es que el Premio Kandinsky -patrocinado por el Deutsche Bank y el grupo financiero IFD Capital- brinda a los artistas un espacio de libertad en el que pueden presentar obras de un fuerte tinte pol¨ªtico. Y tambi¨¦n subrayan que nadie pone en duda la independencia y profesionalidad del jurado, que estaba compuesto por tres especialistas extranjeros y tres rusos.