"No hay ninguna necesidad de reformar el mercado laboral"
Al d¨ªa siguiente de ser elegido secretario general de Comisiones Obreras por s¨®lo 28 votos, Ignacio Fern¨¢ndez Toxo, de 56 a?os, deja claras sus posturas en la dura crisis actual. Pero el cuarto l¨ªder en la historia del sindicato sabe que su trabajo comienza en su propia casa. Tiene que cerrar las heridas abiertas en un proceso que no se aclar¨® hasta contar el ¨²ltimo voto de los 1.001 delegados en el 9? Congreso de CC OO.
Pregunta. ?Acert¨® el resultado?
Respuesta. M¨¢s o menos. Me hubiera gustado que no fuera tan ajustado; pero estoy dispuesto a integrar a la otra candidatura. No tendr¨¢ demasiada importancia.
P. La composici¨®n de la ejecutiva le obliga a dirigir un equipo con diferentes corrientes.
"Las relaciones entre sindicatos y Gobierno necesitan m¨¢s cocina que escenarios"
?Tiene que ir m¨¢s a la izquierda? "No. El sindicato ya est¨¢ en la izquierda"
R. En la que va conmigo yo no veo corrientes. Est¨¢n comprometidos con el proyecto que ha animado una sola alternativa. Y en la otra, la referencia ser¨¢ el programa de acci¨®n que tiene el apoyo casi un¨¢nime del congreso.
P. ?No ve corrientes? En la votaci¨®n del informe de gesti¨®n, sus partidarios se dividieron.
R. S¨ª, pero eso lo dice el retrovisor. Se votaba la gesti¨®n de cuatro a?os. Ahora la referencia es el programa de acci¨®n.
P. ?Sale el sindicato reforzado?
R. S¨ª. Y espero que se pueda empezar a comprobar en los congresos de las organizaciones.
P. ?Teme que surjan tensiones territoriales, como en Catalu?a?
R. Con di¨¢logo y mano izquierda. No me canso de escuchar.
P. Ha dicho en su discurso que quiere contar con Fidalgo, ?qu¨¦ le va a pedir?
R. Prefiero dec¨ªrselo a ¨¦l. Tiene una cabeza privilegiada y mucho que dar. En CC OO siempre habr¨¢ un lugar para ¨¦l.
P. Ha anunciado que la primera reuni¨®n ser¨¢ con su hom¨®nimo de UGT, ?c¨®mo se debe articular la unidad de acci¨®n?
R. Hay que intensificar la relaci¨®n. Necesitamos sobreesforzarnos para intentar compartir lo m¨¢ximo posible de las iniciativas que pongamos en marcha. Cada uno tiene capacidad de iniciativa, pero debemos compartir las reflexiones para actuar al un¨ªsono.
P. Tambi¨¦n pretende reforzar el di¨¢logo social.
R. S¨ª. Hoy [por ayer] me dec¨ªa el presidente del Gobierno que necesit¨¢bamos impulsar el di¨¢logo social. Lo comparto.
P. ?Habl¨® con Zapatero de la subida del salario m¨ªnimo?
R. Algunas cosas me las guardo. Espero que tengamos un encuentro formal en breve. Tenemos que hacer alguna reflexi¨®n complementaria a la que ya hemos desarrollado para actuar sobre elementos como la inversi¨®n p¨²blica, la ley de dependencia, formaci¨®n de los trabajadores, impulso tecnol¨®gico...
P. "Menos compulsi¨®n y m¨¢s reflexi¨®n", dijo Fidalgo de las medidas anticrisis, ?lo comparte?
R. El Gobierno tuvo resaca electoral un tiempo. As¨ª naci¨® el Plan Caldera
[en referencia a las primeras medidas contra el desempleo], luego vino otro a completar no se sabe bien qu¨¦. Todo sin negociar suficiente para madurar las propuestas. Las relaciones entre sindicatos, empresarios y Ejecutivo necesitan mucha m¨¢s cocina que escenarios.
P. ?Necesita el sindicato irse m¨¢s a la izquierda?
R. No, si se entiende por aproximaci¨®n a posiciones de referencia no sindicales. El sindicato ya est¨¢ en la izquierda. Nuestras propuestas son las de una organizaci¨®n que interpreta la sociedad desde la justicia social.
P. ?Y necesita radicalizarse en la calle?
R. Depende para qu¨¦. Seremos radicales en la defensa de los intereses de los trabajadores. Vamos a estar con la gente afectada por expedientes de regulaci¨®n que se vea abocada a salir a la calle, como hemos hecho siempre.
P. ?Cu¨¢l es su postura respecto a la energ¨ªa nuclear?
R. El congreso no ha apostado por la energ¨ªa nuclear. CC OO tiene dudas sobre la viabilidad de esta energ¨ªa, pero hay que darle una oportunidad al desarrollo tecnol¨®gico. Tenemos que situar el debate a partir de qu¨¦ es estrat¨¦gico para la econom¨ªa espa?ola.
P. Usted ha criticado el modelo productivo, ?c¨®mo se cambia?
R. A lo mejor la crisis, aunque parezca un contrasentido, puede ser una oportunidad. La salida no se debe producir haciendo descansar el desarrollo econ¨®mico sobre la construcci¨®n y los servicios, que han generado empleo de baja cualificaci¨®n. Es la industria la que debe convertirse en el motor del desarrollo econ¨®mico. Pero no ser¨¢ as¨ª si no hacemos un esfuerzo muy importante en pol¨ªtica educativa. Tambi¨¦n tiene que llegar por el desarrollo tecnol¨®gico. El desequilibrio entre la inversi¨®n p¨²blica y privada a favor de aqu¨¦lla es evidente.
P. ?Y puede ayudar una reforma del mercado de trabajo?
R. No hay necesidad alguna de reformar el mercado de trabajo espa?ol. Espa?a no necesita flexibilizar m¨¢s el despido o la contrataci¨®n. Las causas de la crisis no son laborales, las soluciones no est¨¢n en flexibilizar el estatuto de los trabajadores. Tenemos una tasa tan alta de temporalidad que asociada a la composici¨®n del tejido productivo espa?ol acelera la destrucci¨®n de empleo.
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