El principio del fin de la era 'p2p'

"Si esto es ilegal, ?por qu¨¦ no nos detienen?". A las doce de la ma?ana de ayer tuvo lugar una breve manifestaci¨®n frente a la sede del PSOE, en la calle de Ferraz (Madrid). Apenas eran una treintena, b¨¢sicamente los organizadores -la red Hacktivistas- m¨¢s alg¨²n espont¨¢neo, como Jos¨¦ -"Para servirle"-, un anciano que se enter¨® por la radio de la convocatoria. En una mesa, dos ordenadores hac¨ªan lo mismo que los de miles de ciudadanos: descargar contenidos gracias al sistema de intercambio de archivos p2p (peer to peer): el disco En Uruguay, un concierto de Silvio Rodr¨ªguez y Pablo Milan¨¦s que actualmente no se edita en Espa?a, o el libro Una profesi¨®n de putas, de David Mamet, que sufre la misma circunstancia.

De esta forma los manifestantes quer¨ªan demostrar dos cosas: que descargar contenidos sin ¨¢nimo de lucro no es ilegal, como sugiere la reciente campa?a del Ministerio de Cultura: si eres legal, eres legal, y que hay obras que s¨®lo se pueden conseguir de esta forma, ya que dada su escasa rentabilidad no se editan.

La realidad es que, al margen de estas protestas, el sue?o de muchos internautas espa?oles puede estar llegando a su fin. Los representantes de los operadores de acceso a Internet (ISP) y la industria audiovisual est¨¢n negociando un modelo de control de las descargas mediante un sistema de avisos y penalizaciones. Con ¨¦l, se tratar¨¢ de disuadir a los internautas para que no realicen descargas masivas, aunque sin llegar al corte de la conexi¨®n como en Francia con la ley guillotina, impulsada por el presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy.

Los operadores -agrupados en Redtel- y el sector audiovisual -representado por la Coalici¨®n de Creadores e Industria de Contenidos- consideran que la medida m¨¢s urgente es implantar el sistema de avisos para quienes realicen mayores descargas de contenidos protegidos; estiman que s¨®lo con esta medida la "pirater¨ªa" se reducir¨ªa en un 70%.

No obstante, los avisos ir¨¢n emparejados a medidas punitivas para los reincidentes, como la reducci¨®n progresiva de la velocidad de descarga, una medida t¨¦cnica que ya se aplica con ¨¦xito en los contratos de tarifas planas de datos tanto en telefon¨ªa fija como en m¨®vil cuando se sobrepasa un determinado l¨ªmite de descarga, seg¨²n informan fuentes de la negociaci¨®n. Los operadores son partidarios de que estas medidas se apliquen s¨®lo durante un periodo de tiempo limitado, pero la Coalici¨®n desea una especie de carn¨¦ por puntos para los que realicen un uso masivo del p2p.

Los operadores tambi¨¦n han ofrecido la implantaci¨®n de un men¨² de tarifas planas a la medida de las capacidades de descarga de los internautas, es decir, que paguen m¨¢s los clientes que m¨¢s se descargan, mientras que se reducir¨ªa el abono para aquellos que hacen un uso limitado de la Red (correo electr¨®nico, navegaci¨®n por la web, visionado de v¨ªdeos y peque?as descargas). Un 10% de los abonados consume el 70% del tr¨¢fico de Internet.

Telef¨®nica ya est¨¢ estudiando la puesta en marcha comercial de este tipo de tarifas planas a la carta, seg¨²n reconoci¨® Enrique Medina Malo, director de servicios jur¨ªdicos de Telef¨®nica, en unas recientes jornadas a puerta cerrada organizadas por la Asociaci¨®n de Internautas.

Ese control de las descargas llevar¨¢ asociado un cambio en el modelo tecnol¨®gico. Del actual p2p se pasar¨¢ al p4p, una nueva tecnolog¨ªa que no selecciona usuarios al azar (como ocurre con el p2p) sino que va seleccionando dentro de la red de operadores de Internet a aquellos m¨¢s cercanos al cliente, evitando el despilfarro del uso de ancho de banda. El problema es que el p4p permite a los operadores discriminar el ancho de banda a favor de los clientes, es decir, que pueden ofrecer m¨¢s ancho de banda a los usuarios que les resulten m¨¢s rentables porque tengan la tarifa m¨¢s elevada o hagan uso de servicios de pago, poniendo en peligro la "neutralidad de la red". Medina Malo reconoci¨® en esas jornadas que Telef¨®nica ya trabaja en un proyecto piloto con esta tecnolog¨ªa.