Sue?os de Nochevieja para 2009
So?¨¦ que en una fulgurante operaci¨®n de Interpol se proced¨ªa al arresto de los Pap¨¢s Noel apostados a la entrada de los grandes almacenes del mundo entero en cuanto sospechosos de genocidio y de limpieza ¨¦tnica, como el disfrazado serbobosnio Karadzic, actualmente enchironado en su c¨®moda prisi¨®n neerlandesa.
Que la comunidad internacional inclu¨ªa en la lista de terroristas m¨¢s buscados del planeta a los crupieres de casino y trileros de Wall Street por un desplome de efectos m¨¢s pavorosos que el derrumbe espectacular de las Torres Gemelas.
Que al finalizar su mandato, el actual inquilino de la Casa Blanca anunciaba su alistamiento voluntario como soldado raso para servir a la Patria en Irak, compensando as¨ª su travesura juvenil de eludir el servicio militar en Vietnam.
So?¨¦ que Bush se alistaba como soldado raso para servir en Irak
Los cruceros de lujo inclu¨ªan una escala en Gaza para jugar al golf
Que un poderoso holding iraqu¨ª inundaba el mercado de millones de zapatos, zapatillas, babuchas y chanclos con miras a un gran concurso internacional de tiro al blanco.
Que Bush y Bin Laden se transmit¨ªan regularmente por v¨ªas misteriosas la transcripci¨®n de sus escuchas de la voz divina, como lo probar¨ªa la documentaci¨®n retenida por la CIA y filtrada a la prensa por un enigm¨¢tico Garganta Seca.
Que los yihadistas prestos a sacrificar sus vidas y las de los dem¨¢s acud¨ªan en masa a las peluquer¨ªas para afeitarse y posar muy orondos en anuncios de L'Or¨¦al.
Que los halcones del Pent¨¢gono se reciclaban en lo musical y sal¨ªan a escena con una innovadora versi¨®n de la c¨¦lebre Guantanamera.
Que en los masters de Ciencias Empresariales se impart¨ªan cursos de ingenier¨ªa financiera y de creaci¨®n de estructuras piramidales a cargo de disc¨ªpulos de Bernard Madoff y otros avispados magnates.
Que el Pocero era nombrado ministro de Econom¨ªa y Hacienda y emprend¨ªa su primer viaje oficial a Roma para entrevistarse con Berlusconi y otros colegas de reputaci¨®n limpia como una patena.
Que los beneficios de una recalificaci¨®n en un 19.000% de terrenos pertenecientes a una digna y altruista inmobiliaria se destinaban a la ayuda e integraci¨®n de los inmigrantes llegados en patera a las costas gaditanas.
Que resuelto a seguir la v¨ªa de Cristo y no la de Armani, Su Santidad Benedicto se desprend¨ªa de mitras, carrozas, palios y el resto de su parafernalia y sal¨ªa a pasear por la plaza de San Pedro cubierto con un saco zurcido y calzado con unas humildes sandalias a riesgo de ser detenido por los alabarderos de su propia guardia.
Que Sus Majestades de aqu¨ª, all¨¢ y acull¨¢ recib¨ªan con motivo del A?o Nuevo a una selecta de
-legaci¨®n de esnifadores, mendigos y pordioseros de la puta calle de la capital y los condecoraban con corbatas de Prada o de Dolce & Gabbana en prenda de cari?o y fraternidad.
Que el fruto del desmentido idilio del ex presidente Aznar y la ministra Rachida Dati ser¨ªa la pr¨®xima reencarnaci¨®n del Dalai Lama.
Que la madre Maravillas se dirig¨ªa en persona al pleno del Congreso de los Diputados para exigir que su placa ocupase el lugar que le correspond¨ªa en raz¨®n de su incansable labor al servicio de los presos y exiliados republicanos.
Que la asignatura de Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa se impart¨ªa en island¨¦s en la Comunidad Valenciana y en valenciano en Islandia.
Que etarras y batasunos se encasquetaban la boina roja de sus antepasados y entonaban a coro el Oriamendi en las excavaciones arqueol¨®gicas en donde aparecieron milagrosas inscripciones euskeras viejas de tres mil a?os.
Que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, propon¨ªa la beatificaci¨®n en vida del Campe¨®n de la Fe, Kiko Arg¨¹elles, ante una entusiasta Curia Vaticana.
Que la Corte Suprema de California y de otros Estados norteamericanos y europeos rechazaban por razones de ¨¦tica la legalizaci¨®n del matrimonio entre personas de diferente sexo.
Que se oficiaba en el Vaticano la primera gran misa gay con asistencia de todos los prelados que acababan de salir del armario.
Que los culpables de violencia machista corr¨ªan en cueros por la Gran V¨ªa mientras grupos de feministas festivas les calentaban las nalgas con ramitas espinosas y mangos de ortigas.
Que las santas mujeres de Afganist¨¢n se despojaban de sus burkas y las endosaban a los talibanes y jefes tribales a fin de preservar su pudor viril y evitarse a s¨ª mismas las tentaciones carnales.
Que por razones humanitarias y presiones de la comunidad internacional, se suspend¨ªa la tradicional lapidaci¨®n de ad¨²lteros ordenada por los Consejos de Ancianas y Sabias de la zona que se extiende de la pen¨ªnsula Ar¨¢biga a India y Pakist¨¢n.
Que gracias a la intervenci¨®n de la Moreneta, los africanos alcanzaban de golpe el nivel de vida de Europa y Norteam¨¦rica.
Que los salvapatrias y dictadores del Universo entero dimit¨ªan de sus cargos vitalicios y se dedicaban a perpetrar versos.
Que Mugabe promov¨ªa su candidatura al Nobel de la Paz con el aval de Daniel Ortega, Teodoro Obiang y otros dem¨®cratas de acrisolada virtud y honestidad.
Que los dirigentes de la Autoridad Nacional Palestina y de Ham¨¢s dejaban vivir en paz a los desdichados israel¨ªes sometidos a diario a humillantes controles, apriscados entre muros y alambradas, y machacados a bombazos de su aviaci¨®n y artiller¨ªa despu¨¦s de 42 a?os de una ocupaci¨®n ilegal condenada por Naciones Unidas.
Que los cruceros de lujo por la cuenca mediterr¨¢nea inclu¨ªan una escala en Gaza para jugar al golf y la convert¨ªan, por el reciente esplendor de sus ruinas, en el punto de destino favorito de la gente guapa.
Que, que y que...
Dejo al lector la tarea de continuar por su cuenta el sue?o de nunca acabar.
Juan Goytisolo es escritor.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.