El Supremo tumba el decreto de la Comunidad de Madrid sobre la radio

En apenas un mes, la Comunidad de Madrid ha recibido dos varapalos judiciales que afectan a la regulaci¨®n de los medios de comunicaci¨®n. Despu¨¦s de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) echara abajo a finales de noviembre la concesi¨®n de 30 televisiones locales en 2005, el Supremo ha tumbado parcialmente el decreto que regula la adjudicaci¨®n de emisoras de radio. El alto tribunal da la raz¨®n a la Uni¨®n de Radios Culturales de Madrid y obliga al Ejecutivo de Esperanza Aguirre a reconocer la existencia de estas emisoras sin ¨¢nimo de lucro.

La sala de lo Contencioso del Tribunal Supremo sostiene que estas entidades deber¨ªan haber sido tenidas en cuenta por el Gobierno de la Comunidad de Madrid cuando elabor¨® el reglamento sobre "el r¨¦gimen de difusi¨®n sonora en ondas m¨¦tricas con frecuencia modulada". El decreto objeto del litigio lleva fecha de marzo de 2003 -¨¦poca en la que la presidencia de la comunidad estaba en manos de Alberto Ruiz-Gallard¨®n- y en el mismo se establecen las bases para la adjudicaci¨®n de emisoras de radio por parte de la administraci¨®n auton¨®mica.

Cerrar los canales no lucrativos era una pieza clave de la reforma

Durante el proceso de elaboraci¨®n del reglamento, el Ejecutivo madrile?o recab¨® las opiniones del sector. Cit¨® a la Asociaci¨®n Espa?ola de Radiodifusi¨®n Comercial (AERC), organismo del que forman parte grandes cadenas como la SER, Onda Cero o Cope, pero excluy¨® de la ronda de contactos a las radios culturales. El Supremo reprocha que se omitiera la audiencia "a quien representaba los intereses que resultaban m¨¢s directamente afectados por el decreto", es decir, a los titulares de las emisoras culturales, cuya supresi¨®n, como tal categor¨ªa, "era una de las claves" del reglamento en cuesti¨®n.

En su sentencia, el alto tribunal recuerda que uno de los objetivos del decreto era "la supresi¨®n de las previsiones relativas a las emisoras culturales y otras de car¨¢cter no lucrativo". La nueva regulaci¨®n normativa afectaba tan de lleno a este sector que detallaba los procedimientos para el cierre y las sanciones que recaer¨ªan sobre aquellas empresas que emitieran sin tener la preceptiva licencia administrativa.

Reconoce el Supremo que las emisoras culturales y no lucrativas "compiten en la asignaci¨®n de frecuencias del limitado espacio radioel¨¦ctrico con los dem¨¢s tipos de radiodifusores", entre ellos los operadores comerciales.

El fallo estima el recurso interpuesto por la Uni¨®n de Radios Culturales de Madrid contra una sentencia dictada por el TSJM dos a?os antes. La sentencia del Supremo cuenta con el voto particular del magistrado ?scar Gonz¨¢lez, seg¨²n el cual la administraci¨®n no necesitaba escuchar a la asociaci¨®n recurrente porque es "de car¨¢cter privado".