Una portada que no podr¨¢ rechazar
Si la agenda radical de Internet es construir una sociedad autoorganizada, un mundo donde la espont¨¢nea emergencia del orden sustituya al control central, si ¨¦sa es la idea, el estado del arte debe ser justo la portada del Men¨¦ame. S¨®lo publica las noticias m¨¢s votadas por sus propios lectores, y es por tanto un medio "editado sin editor", un habitante de la nueva era. Empresarios de la pornograf¨ªa piden plan de rescate para el ramo, dice por ejemplo en la portada. Faros nucleares saqueados en el C¨ªrculo Polar ?rtico. Conoce al peque?o calamar sonriente y con brillo en los ojos.
Men¨¦ame y sus tres clones locales (La Tafanera, en catal¨¢n; Chuza!, en gallego, y Zabaldu, en vasco) descienden en l¨ªnea directa de Digg, el primer "agregador" de noticias aportadas, votadas y seleccionadas por los usuarios. Naci¨® en Silicon Valley como herramienta para la nueva "informaci¨®n democr¨¢tica", organizada de abajo arriba. Digg viene de dig (desenterrar), con una 'g' extra, cortes¨ªa de Walt Disney. El dibujante ya hab¨ªa reservado el dominio www.dig.com a?os antes. Un misterioso olor dulz¨®n invade Manhattan, seg¨²n un despacho de Efe que cita como fuente al Daily News de Nueva York para acabar todos en la web de El Universal de Caracas. ?Es ¨¦ste el mundo que estamos autoorganizando para nuestros hijos?
'Men¨¦ame' s¨®lo publica las noticias m¨¢s votadas por sus propios lectores, es un medio "editado sin editor"
Digg empez¨® como un proyecto modesto. Le pusieron desenterrar (o lo intentaron) porque la idea era que los usuarios rastrearan peque?os tesoros ocultos entre los inacabables estratos de informaci¨®n excedente, la que se produce cada d¨ªa en cualquier lugar del mundo, pero no cabe en ninguna parte. Los votos de los lectores servir¨ªan para "desenterrar" esos hallazgos y propulsarlos hasta donde no llegar¨ªan jam¨¢s en ning¨²n medio convencional: la primera p¨¢gina democr¨¢tica, una selecci¨®n decidida desde las bases. Pero tuvo demasiado ¨¦xito.
Sus gestores empezaron por renunciar a su idea inicial de no incluir publicidad, y acabaron por introducir varias clases de controles "centrales" -debi¨® de ser una vejaci¨®n- para moderar los desvar¨ªos, ataques y manipulaciones m¨¢s evidentes. Tambi¨¦n crearon una serie de castas o ¨¦lites con diversas atribuciones y privilegios: unos pueden eliminar (enterrar) noticias; otros, editarlas; otros, comentarlas.
El siguiente problema ya se lo imaginan: que la gente ha empezado a percibir que las castas meten la mano donde no tienen que meterla. Muchos comentarios adversos se van por el desag¨¹e con el agua sucia de los comentarios injuriosos, y muchos otros caen v¨ªctimas de una tal "opci¨®n entierro", que re¨²ne la triple agravante de anonimato, arbitrariedad y malsonancia.
El correo basura (spam) es un engorro para todo el mundo, pero m¨¢s grave en estas webs hiperconectadas. Buena parte del trabajo de los usuarios consiste en barrer la basura, circunstancia aprovechada por unas abominables "brigadas para entierros" que, a decir de sus cr¨ªticos, otorgan el t¨ªtulo de spam con una liberalidad que ya podr¨ªan usar sobre el nivel del suelo.
Los creadores de Digg, el empresario californiano y figura televisiva Kevin Rose, y de Men¨¦ame, el cient¨ªfico de la computaci¨®n y activista del software libre Ricardo Galli, de la Universidad de las Islas Baleares, han podido sortear varios de estos avisperos con un manejo h¨¢bil del algoritmo. Est¨¢n todo el d¨ªa retocando el algoritmo. Cuando los usuarios de Digg se rebrincan en masa contra su creador porque, no s¨¦, ha censurado un art¨ªculo con las claves secretas de los DVD, o por tolerar que el nicho de los 20 ocupe por sistema un cuarto de la portada, Rose suele responder: "Ahora he entendido vuestro mensaje. Cambiaremos el algoritmo".
El algoritmo es el cerebro de los agregadores de noticias, porque es quien te sube o te baja tu karma, o tu categor¨ªa. Los usuarios con el karma m¨¢s alto son los que toman la mayor¨ªa de las decisiones: la casta controladora. Y para que el algoritmo te suba el karma te conviene: 1. Mandar noticias que luego resulten muy votadas. 2. Votar a favor de noticias candidatas que despu¨¦s resulten ser publicadas. 3. Votar en contra de las noticias candidatas que despu¨¦s resulten ser rechazadas.
Eso implica que la gente no manda las noticias que le interesan, ni vota por las que le gustan. Manda las que cree que les van a interesar a los dem¨¢s, y vota por las que supone que les gustan a todo el mundo. Esa portada no es un promedio de lo que le interesa a cada lector. Es un compendio de sus prejuicios sobre los dem¨¢s.
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