Cend¨®n quiere volver a ?frica

"Los secuestradores tampoco eran tan malos", le dijo Jos¨¦ Cend¨®n a su madre cuando baj¨® del avi¨®n el lunes, tras 38 d¨ªas retenido en la regi¨®n somal¨ª de Puntlandia. Adem¨¢s de darle un abrazo, eso fue lo ¨²nico que se le ocurri¨® para tranquilizarla. Pero no era una mentira piadosa, lo sigue pensando. "Son personas, y aunque al principio pensaba en matarlos a todos, despu¨¦s trat¨¦ de comprender sus intenciones". A pesar de intentar mantener con ellos "una amistad hasta cierto punto", Cend¨®n ejerc¨ªa de poli malo. El papel del bueno le toc¨® a su compa?ero de cautiverio, el tambi¨¦n fot¨®grafo freelance Colin Freeman. Ambos deb¨ªan coger un avi¨®n de vuelta a casa el 26 de noviembre tras haber terminado un reportaje para el Daily Telegraph sobre la pirater¨ªa en Somalia cuando empez¨® su pesadilla.

"Al principio quer¨ªa matar a los secuestradores, luego trat¨¦ de entenderlos"

El periodista sospecha que el Gobierno somal¨ª est¨¢ implicado en el secuestro

Esa fingida complicidad, "una estrategia necesaria para sobrevivir", asegura Cend¨®n, hizo convertirles incluso en improvisados profesores de ingl¨¦s para algunos de sus secuestradores. Abandonaron la docencia cuando el grupo de captores m¨¢s hostil les amenaz¨® de muerte.

Con actitud pasota, pero nervioso, recost¨¢ndose en la silla y quitando hierro al secuestro -"son cosas que pasan y, simplemente, me toc¨® a m¨ª"- Cend¨®n atendi¨® a la prensa un d¨ªa despu¨¦s de llegar a Galicia advirtiendo de que esa ser¨ªa la ¨²ltima vez en mucho tiempo. "Estoy hecho polvo, no tengo pensado conceder m¨¢s entrevistas y espero que me entend¨¢is, que no lo tom¨¦is a mal". El acoso period¨ªstico que sufri¨® desde que fue liberado, el pasado 4 de enero, lo desbord¨®. "Me llamaron de 30 peri¨®dicos en un d¨ªa y ya no pod¨ªa m¨¢s". De hecho, la rueda de prensa de ayer estaba organizada por una agencia de representantes con sede en Valencia, E. P. A. Milenium Music, SL, en cuya cartera de clientes conviven varios famosos por accidente. Desde Juan Jos¨¦ Cort¨¦s, el padre de Mari Luz, hasta Ana Mar¨ªa R¨ªos, la peluquera que salt¨® a la palestra despu¨¦s de su detenci¨®n en Canc¨²n por supuesto contrabando de explosivos, pasando por otra portada de Interviu, Pilar Pacheco, la primera militar que pos¨® desnuda.

Por lo que cuenta, Cend¨®n no pretende hacer carrera en Espa?a. Su intenci¨®n es volver a su casa de Addis Abeba dentro de un mes y medio. Su "relaci¨®n de amor-odio" con ?frica todav¨ªa no ha terminado y ya esboza un posible futuro reportaje: "Etiop¨ªa es la tierra prometida de los rastafaris". El a?o que viene, varios meses despu¨¦s de lo que le hubiera gustado, viajar¨¢ al otro lado del Atl¨¢ntico. "Me apetece conocer la nueva izquierda emergente en Latinoam¨¦rica", explic¨® ayer arropado por su hermana Julia, el decano del Colexio Profesional de Xornalistas de Galicia, Xos¨¦ Manuel Pereiro, y el presidente de la Asociaci¨®n de Periodistas de Santiago, Luis Men¨¦ndez Villalba.

Aunque admiti¨® que no pudo averiguar mucho sobre el secuestro porque "todo fue demasiado r¨¢pido", Cend¨®n sospecha que el propio Ministerio de Seguridad de Somalia est¨¢ involucrado en el delito. El d¨ªa que fue capturado, al salir del hotel, sus guardaespaldas no eran los mismos, un detalle que, tanto a ¨¦l como a Freeman, les result¨® muy extra?o. "El Gobierno somal¨ª tendr¨¢ que dar explicaciones, pero no descarto a nadie", afirm¨®. Si algo tiene claro el fot¨®grafo es que sus secuestradores no tienen nada que ver con los piratas.

Iniciada ya la retirada de las tropas et¨ªopes de Somalia tras casi tres a?os de invasi¨®n, Cend¨®n asegura que el pa¨ªs est¨¢ "peor que nunca". Precisamente por eso se fue para all¨¢. "El periodismo es contar cosas importantes y para m¨ª no hay nada m¨¢s importante que el sufrimiento de las personas", sentenci¨®. "Por desgracia", a?adi¨®, "en Espa?a, el sufrimiento de ?frica no interesa en absoluto", lament¨®. Ganador del World Press Photo en 2007 por su trabajo en los centros de salud mental de Burundi, Cend¨®n siempre trabaj¨® para publicaciones extranjeras como Time, Newsweek, New York Times o Stern. Y advierte: "No tengo preferencias, s¨®lo trabajo para quien me paga m¨ªnimamente bien".