El presidente tr¨¢gico

Scott Fitzgerald dijo que el sentimental cree que las cosas van a durar siempre mientras que el rom¨¢ntico espera contra toda esperanza. Ram¨®n Calder¨®n nunca fue un sentimental. Fue consciente del car¨¢cter ef¨ªmero de su aventura. Esper¨® ser presidente del Madrid contra una oposici¨®n que parec¨ªa insalvable y, una vez en el cargo, se dedic¨® a vivir con intensidad, manga ancha con sus ejecutivos y un poco de resignaci¨®n ante la fatalidad. Calder¨®n no dej¨® de pensar que Florentino P¨¦rez, como un esp¨ªritu de perdici¨®n, gobernaba los acontecimientos. El hombre no perdi¨® el sentido tr¨¢gico ni cuando vio a sus equipos levantar cinco t¨ªtulos: dos Ligas y una Supercopa en f¨²tbol, una Liga y una Copa ULEB en baloncesto.

"Dio poder a un grupo de amorales que se aprovecharon de ¨¦l", asegura un dirigente

Sus amigos lamentan que cuando caminaba por la calle, en estos d¨ªas de estr¨¦pito, se viera obligado a soportar los reproches de viandantes cada vez m¨¢s atrevidos. "?Eres un chorizo!", le increpaban. Muchos hinchas ignoraban que el hombre, sabedor de su destino, apenas se inmutaba. Tambi¨¦n olvidaban que nunca nadie consigui¨® probar que se enriqueci¨® gracias a su cargo.

Lo que s¨ª qued¨® patente en las asambleas fueron los esfuerzos que dedic¨® Calder¨®n a renovar las estructuras de un club que sufr¨ªa las consecuencias de unos estatutos imprecisos, cuando no antidemocr¨¢ticos. Los estatutos sociales de 2004, sancionados durante la presidencia de Florentino P¨¦rez y todav¨ªa vigentes, tienen las suficientes lagunas legales para permitir que la junta electoral, el m¨¢ximo ¨®rgano de control del club, se convierta en un instrumento de la presidencia hasta anular su capacidad de fiscalizaci¨®n de las elecciones, abriendo v¨ªas al fraude, como ocurri¨® en 2006 con el voto por correo. Calder¨®n intent¨® modificar los estatutos, pero la junta electoral, formada durante la anterior presidencia, se le opuso, lo mismo que la asamblea de compromisarios, formada a instancias de la junta electoral. Su intento de sancionar unos nuevos estatutos se frustraron.

Si Calder¨®n gan¨® las elecciones de 2006 fue porque recurri¨® a la justicia ordinaria para anular el voto por correo, cuya falsificaci¨®n masiva sigue siendo objeto de una investigaci¨®n policial que tiene la mira puesta en antiguos empleados del club que, presuntamente, actuaron en beneficio de la candidatura de Juan Miguel Villar Mir.

Calder¨®n hered¨® un club enfrentado a las instituciones (Federaci¨®n, UEFA y FIFA), sin una estructura deportiva sostenible y con una junta electoral que trabaj¨® para bloquear todas sus iniciativas. Afront¨® una empresa colosal y para ello precis¨® rodearse de un equipo competente. No siempre fue el caso. Calder¨®n reparti¨® cuotas de poder a diestro y siniestro. Pero los problemas heredados y los problem¨¢ticos que le rodearon le fueron fabricando una crisis irresoluble.

Mantuvo Calder¨®n una extra?a complicidad con Pedja Mijatovic, al que defendi¨® sin fisuras. Tras la marcha de Fabio Capello, le concedi¨® libertad de acci¨®n para dise?ar una pol¨ªtica deportiva que, poco a poco, fue perdiendo el rumbo. La incompetencia de Mijatovic para actuar en el mercado se combin¨® con el mayor gasto en fichajes de la historia del club: 300 millones de euros en dos a?os y medio. Los viejos empleados menean la cabeza cuando hablan de Mijatovic y de su grupo de asesores: "Se creen que han inventado el f¨²tbol y no tienen ni idea. Su comportamiento da verg¨¹enza ajena".

Mijatovic, como Mariano Rodr¨ªguez, Nan¨ªn, o como su jefe, Luis B¨¢rcenas, el director del ¨¢rea social, destituido por permitir el ingreso indebido de personas a la asamblea de socios compromisarios, pertenecen a lo que un alto cargo del club denominaba "el grupo amoral". A decir de este ejecutivo, cercano a Calder¨®n, "son gente con una idea circunstancial de la moral. Para ellos, no hay nada objetivamente bueno o malo. Todo depende de las circunstancias. As¨ª, acusando a los dem¨¢s de ser blandos, se han ido haciendo con el club y aprovech¨¢ndose de su posici¨®n".

Si en su organizaci¨®n deportiva se estanc¨®, en sus relaciones institucionales el Madrid prosper¨® con Calder¨®n. Gracias a su aproximaci¨®n a la federaci¨®n, el club cont¨® con el respaldo de ?ngel Mar¨ªa Villar para interceder ante la FIFA y la UEFA, que concedi¨® al Bernab¨¦u la condici¨®n de estadio de m¨¢xima categor¨ªa y le adjudic¨® la final de la Liga de Campeones de 2010.

Uno de los m¨¢s estrechos colaboradores de Calder¨®n hizo una reflexi¨®n a modo de ep¨ªlogo. "De Ram¨®n puedes decir que ha sido negligente, irresponsable y hasta fr¨ªvolo", concedi¨® este alto cargo del Madrid, celoso de su anonimato; "lo indiscutible es que es un hombre honesto y una buena persona".